07 Febrero 2014
La justicia y la policía están armando el rompecabezas en torno al asalto que sufrieron dos mujeres en la madrugada del lunes pasado en Aguilares.
“Estamos recolectando pruebas para dar con los autores del hecho. Llama la atención la forma tan personal que uno de los delincuentes se dirigía a una de las víctimas”, reconoció el jefe de la Unidad Regional Sur, comisario Pastor Vallejo. Esto tiene que ver con lo que dijo el martes pasado en la nota una de las damnificadas. “A la señora la llamaban por el nombre”, aseguró Erica Soria, empleada de Norma Hissen de Chehín, la mujer de 80 años que vivió cuatro horas de pánico en su vivienda. Esa madrugada al menos cinco ladrones ingresaron a la casa por el fondo. Luego de maniatar a Chehín y Soria revolvieron toda la casa, llevándose joyas y algo de dinero.
“Estoy adelantando en el procesamiento de datos que recogimos en la casa”, confesó el fiscal Jorge Echayde, fiscal de Instrucción de la III Nominación, del Centro Judicial de Concepción.
“No descarto nada y todas las hipótesis las estamos analizando”, indicó. Además, comentó que hasta ahora no notaron “nada raro o sospechoso” en las filmaciones que registraron ese día las cámaras de seguridad ubicada en la calle.
Según los investigadores, la metodología que utilizaron los delincuentes coincide con otros asaltos perpetrados desde comienzo de año en la Capital y en Famaillá.
En varios asaltos, el “jefe” de la banda tiene tonada porteña, son muy violentos y para amedrentar a las víctimas los colocan una bolsa de plástico en la cabeza. “A veces rotan de grupos delictivos para confundir a las pesquisas”, añadió Echayde.
La justicia y la policía están armando el rompecabezas en torno al asalto que sufrieron dos mujeres en la madrugada del lunes pasado en Aguilares.
“Estamos recolectan pruebas para dar con los autores del hecho. Llama la atención la forma tan personal que uno de los delincuentes se dirigía a una de las víctimas”, reconoció el jefe de la Unidad Regional Sur, comisario Pastor Vallejo. Esto tiene que ver con lo que dijo el martes pasado en la nota una de las damnificadas. “A la señora la llamaban por el nombre”, aseguró Erica Soria, empleada de Norma Hissen de Chehín, la mujer de 80 años que vivió cuatro horas de pánico en su vivienda. Esa madrugada al menos cinco ladrones ingresaron a la casa por el fondo. Luego de maniatar a Chehín y Soria revolvieron toda la casa, llevándose joyas y algo de dinero.
“Estoy adelantando en el procesamiento de datos que recogimos en la casa”, confesó el fiscal Jorge Echayde, fiscal de Instrucción de la III Nominación, del Centro Judicial de Concepción.
“No descarto nada y todas las hipótesis las estamos analizando”, indicó. Además, comentó que hasta ahora no notaron “nada raro o sospechoso” en las filmaciones que registraron ese día las cámaras de seguridad ubicada en la calle.
Según los investigadores, la metodología que utilizaron los delincuentes coincide con otros asaltos perpetrados desde comienzo de año en la Capital y en Famaillá.
En varios asaltos, el “jefe” de la banda tiene tonada porteña, son muy violentos y para amedrentar a las víctimas los colocan una bolsa de plástico en la cabeza. “A veces rotan de grupos delictivos para confundir a las pesquisas”, añadió Echayde.
“Estamos recolectando pruebas para dar con los autores del hecho. Llama la atención la forma tan personal que uno de los delincuentes se dirigía a una de las víctimas”, reconoció el jefe de la Unidad Regional Sur, comisario Pastor Vallejo. Esto tiene que ver con lo que dijo el martes pasado en la nota una de las damnificadas. “A la señora la llamaban por el nombre”, aseguró Erica Soria, empleada de Norma Hissen de Chehín, la mujer de 80 años que vivió cuatro horas de pánico en su vivienda. Esa madrugada al menos cinco ladrones ingresaron a la casa por el fondo. Luego de maniatar a Chehín y Soria revolvieron toda la casa, llevándose joyas y algo de dinero.
“Estoy adelantando en el procesamiento de datos que recogimos en la casa”, confesó el fiscal Jorge Echayde, fiscal de Instrucción de la III Nominación, del Centro Judicial de Concepción.
“No descarto nada y todas las hipótesis las estamos analizando”, indicó. Además, comentó que hasta ahora no notaron “nada raro o sospechoso” en las filmaciones que registraron ese día las cámaras de seguridad ubicada en la calle.
Según los investigadores, la metodología que utilizaron los delincuentes coincide con otros asaltos perpetrados desde comienzo de año en la Capital y en Famaillá.
En varios asaltos, el “jefe” de la banda tiene tonada porteña, son muy violentos y para amedrentar a las víctimas los colocan una bolsa de plástico en la cabeza. “A veces rotan de grupos delictivos para confundir a las pesquisas”, añadió Echayde.
La justicia y la policía están armando el rompecabezas en torno al asalto que sufrieron dos mujeres en la madrugada del lunes pasado en Aguilares.
“Estamos recolectan pruebas para dar con los autores del hecho. Llama la atención la forma tan personal que uno de los delincuentes se dirigía a una de las víctimas”, reconoció el jefe de la Unidad Regional Sur, comisario Pastor Vallejo. Esto tiene que ver con lo que dijo el martes pasado en la nota una de las damnificadas. “A la señora la llamaban por el nombre”, aseguró Erica Soria, empleada de Norma Hissen de Chehín, la mujer de 80 años que vivió cuatro horas de pánico en su vivienda. Esa madrugada al menos cinco ladrones ingresaron a la casa por el fondo. Luego de maniatar a Chehín y Soria revolvieron toda la casa, llevándose joyas y algo de dinero.
“Estoy adelantando en el procesamiento de datos que recogimos en la casa”, confesó el fiscal Jorge Echayde, fiscal de Instrucción de la III Nominación, del Centro Judicial de Concepción.
“No descarto nada y todas las hipótesis las estamos analizando”, indicó. Además, comentó que hasta ahora no notaron “nada raro o sospechoso” en las filmaciones que registraron ese día las cámaras de seguridad ubicada en la calle.
Según los investigadores, la metodología que utilizaron los delincuentes coincide con otros asaltos perpetrados desde comienzo de año en la Capital y en Famaillá.
En varios asaltos, el “jefe” de la banda tiene tonada porteña, son muy violentos y para amedrentar a las víctimas los colocan una bolsa de plástico en la cabeza. “A veces rotan de grupos delictivos para confundir a las pesquisas”, añadió Echayde.
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