14 Junio 2014
SEGURA. "Cristina no es mi hija, pero es como si lo fuera", aseguró Carlotto. FOTO DYN.
La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, denunció en una entrevista publicada hoy por el diario "La Nación" que algunos "gremios", "la oligarquía" y los "medios hegemónicos" quieren que la mandataria argentina, Cristina Kirchner, "muera"o "desaparezca".
"Quieren que no exista lo que está pasando: que se quiera distribuir la riqueza, que existan menos pobres, que se abran fuentes de trabajo, que podamos pagar la deuda externa. Son golpes civiles como intentan hacer en varios países de América latina", sostuvo Carlotto en la entrevista.
Consultada sobre qué sectores pretenden llevar a cabo un "golpe civil" en Argentina, la presidenta de la organización defensora de los Derechos Humanos respondió que, "de alguna manera, los gremios", "la oligarquía" y "los medios (de comunicación) hegemónicos que bajan la moral" de la población buscan desestabilizar al gobierno.
"¿O no le dicen a la presidenta que se tiene que ir? Ellos quisieran que se vaya hoy. Que se muera hoy. Que desaparezca hoy", agregó.
Al respecto, consideró que también "va en dirección" de "debilitar" a la jefa de Estado la investigación judicial iniciada al vicepresidente argentino, Amado Boudou, por supuestas negociaciones incompatibles con la función pública.
La presidenta "es como mi hija. No es mi hija, pero yo me la imagino como si ella y Laura hubieran caminado juntas en las marchas", dijo.
Laura Carlotto fue secuestrada en noviembre de 1977 por fuerzas militares de la última dictadura argentina (1976-1983). Al momento del rapto se encontraba embarazada.
Según la investigación judicial, permaneció cautiva hasta agosto de 1978, dos meses después de dar a luz a un niño, y luego fue asesinada.
El destino y la identidad de aquel bebé todavía se desconoce y es el origen de la búsqueda que Carlotto inició en su momento y la llevó a formar parte de Abuelas de Plaza de Mayo.
"No hay una amistad (con la presidenta), hay solamente un cariño entrañable y un respeto por esa mujer que está dejando la vida", indicó.
"Quieren que no exista lo que está pasando: que se quiera distribuir la riqueza, que existan menos pobres, que se abran fuentes de trabajo, que podamos pagar la deuda externa. Son golpes civiles como intentan hacer en varios países de América latina", sostuvo Carlotto en la entrevista.
Consultada sobre qué sectores pretenden llevar a cabo un "golpe civil" en Argentina, la presidenta de la organización defensora de los Derechos Humanos respondió que, "de alguna manera, los gremios", "la oligarquía" y "los medios (de comunicación) hegemónicos que bajan la moral" de la población buscan desestabilizar al gobierno.
"¿O no le dicen a la presidenta que se tiene que ir? Ellos quisieran que se vaya hoy. Que se muera hoy. Que desaparezca hoy", agregó.
Al respecto, consideró que también "va en dirección" de "debilitar" a la jefa de Estado la investigación judicial iniciada al vicepresidente argentino, Amado Boudou, por supuestas negociaciones incompatibles con la función pública.
La presidenta "es como mi hija. No es mi hija, pero yo me la imagino como si ella y Laura hubieran caminado juntas en las marchas", dijo.
Laura Carlotto fue secuestrada en noviembre de 1977 por fuerzas militares de la última dictadura argentina (1976-1983). Al momento del rapto se encontraba embarazada.
Según la investigación judicial, permaneció cautiva hasta agosto de 1978, dos meses después de dar a luz a un niño, y luego fue asesinada.
El destino y la identidad de aquel bebé todavía se desconoce y es el origen de la búsqueda que Carlotto inició en su momento y la llevó a formar parte de Abuelas de Plaza de Mayo.
"No hay una amistad (con la presidenta), hay solamente un cariño entrañable y un respeto por esa mujer que está dejando la vida", indicó.