20 Junio 2014
Armonizar las conveniencias de las partes que rugbísticamente componen la región del NOA nunca fue una tarea fácil. Sin embargo, pocas decisiones de la URT han sido cuestionadas de forma tan categórica y unánime como la de que en estos días se jueguen dos fechas del Regional en lugar de una, a fin de habilitar una brecha en el calendario para que el seleccionado tucumano tenga la posibilidad de jugar un amistoso en su camino de preparación hacia el Argentino. En consecuencia, 12 de los 16 clubes en competencia deberán jugar su partido de la fecha 7, y 48 horas después el correspondiente a la 8. Algunos, con viaje a otra provincia incluido.
“...de no cambiarse la programación antes de que se jueguen los segundos partidos, Cardenales RC los hace responsables de cualquier tipo de lesiones que sufran nuestros jugadores de los planteles de Primera e Intermedia...”, reza un fragmento de la nota que el club “purpurado” dirigió a los miembros del Consejo de la URT.
“Los jugadores son lo máximo que tenemos y no los estamos cuidando. Mandé esa nota porque me importan mucho mis jugadores”, aseguró Héctor Odstrcil, presidente de Cardenales, que acusa incumplimiento de las reglas de la IRB que recomiendan “poco o ningún impacto o prácticas de contacto en estas 48 horas después del partido, ya que éstas son las actividades que provocan los mayores daños musculares...”.
La polémica se instaló durante la semana, aunque muchos se abstuvieron de participar, creyendo que la decisión sería revertida, lo que finalmente no ocurrió. Y las voces de protesta comenzaron a llegar también desde afuera.
“Es un bochorno”, sintetizó Diego González Brizuela, uno de los jugadores más representativos de Universitario de Salta. “A veces no entiendo en qué piensan los que dirigen esto. Lo que más sufren esto son los clubes de Salta, Santiago del Estero y los más chicos de Tucumán. Los grandes, como Universitario o Tucumán Rugby, tienen plantel como para jugar cada una de las dos fechas con un equipo distinto. Nosotros somos un grupo chico, y nos toca jugar con Cardenales y Tucumán Rugby. Supuestamente es para abrir una ventana para el seleccionado tucumano. Es una falta de respeto hacia todos los jugadores”, descargó el salteño.
El propio Alejandro Molinuevo, entrenador principal de la “naranja”, aclaró estar en desacuerdo con la medida. “No queremos generar una ventana de esta forma. Forzándolo, sólo tendremos jugadores cansados, y eso no nos sirve. Si se lesionan será responsabilidad nuestra, y no queremos perjudicar a los clubes. Además, esto todavía no es un seleccionado, sino un preseleccionado. El Argentino se juega en noviembre, y forzar una ventana en junio no era necesario. Más conveniente sería jugar un miércoles”, señaló.
La acumulación de partidos repercute aún más tratándose de deportistas amateurs, que en la gran mayoría de los casos, deben ensamblar partidos y entrenamientos con trabajo, familia, estudios y entretenimiento (en pleno tiempo de Mundial de Fútbol). “A mí no me complica tanto, porque soy chico todavía. Pero sí a los que están casados o tienen familia. Es mucho desgaste, en 48 horas no tenés tiempo de recuperarte. Habría que buscar la forma de cuidar un poco más al jugador”, dio su punto de vista Gonzalo Marcilla, medio scrum de Jockey tucumano.
“...de no cambiarse la programación antes de que se jueguen los segundos partidos, Cardenales RC los hace responsables de cualquier tipo de lesiones que sufran nuestros jugadores de los planteles de Primera e Intermedia...”, reza un fragmento de la nota que el club “purpurado” dirigió a los miembros del Consejo de la URT.
“Los jugadores son lo máximo que tenemos y no los estamos cuidando. Mandé esa nota porque me importan mucho mis jugadores”, aseguró Héctor Odstrcil, presidente de Cardenales, que acusa incumplimiento de las reglas de la IRB que recomiendan “poco o ningún impacto o prácticas de contacto en estas 48 horas después del partido, ya que éstas son las actividades que provocan los mayores daños musculares...”.
La polémica se instaló durante la semana, aunque muchos se abstuvieron de participar, creyendo que la decisión sería revertida, lo que finalmente no ocurrió. Y las voces de protesta comenzaron a llegar también desde afuera.
“Es un bochorno”, sintetizó Diego González Brizuela, uno de los jugadores más representativos de Universitario de Salta. “A veces no entiendo en qué piensan los que dirigen esto. Lo que más sufren esto son los clubes de Salta, Santiago del Estero y los más chicos de Tucumán. Los grandes, como Universitario o Tucumán Rugby, tienen plantel como para jugar cada una de las dos fechas con un equipo distinto. Nosotros somos un grupo chico, y nos toca jugar con Cardenales y Tucumán Rugby. Supuestamente es para abrir una ventana para el seleccionado tucumano. Es una falta de respeto hacia todos los jugadores”, descargó el salteño.
El propio Alejandro Molinuevo, entrenador principal de la “naranja”, aclaró estar en desacuerdo con la medida. “No queremos generar una ventana de esta forma. Forzándolo, sólo tendremos jugadores cansados, y eso no nos sirve. Si se lesionan será responsabilidad nuestra, y no queremos perjudicar a los clubes. Además, esto todavía no es un seleccionado, sino un preseleccionado. El Argentino se juega en noviembre, y forzar una ventana en junio no era necesario. Más conveniente sería jugar un miércoles”, señaló.
La acumulación de partidos repercute aún más tratándose de deportistas amateurs, que en la gran mayoría de los casos, deben ensamblar partidos y entrenamientos con trabajo, familia, estudios y entretenimiento (en pleno tiempo de Mundial de Fútbol). “A mí no me complica tanto, porque soy chico todavía. Pero sí a los que están casados o tienen familia. Es mucho desgaste, en 48 horas no tenés tiempo de recuperarte. Habría que buscar la forma de cuidar un poco más al jugador”, dio su punto de vista Gonzalo Marcilla, medio scrum de Jockey tucumano.
Temas
Torneo Regional de Rugby