Neymar “multiuso”

Por Rodolfo Chileanschi, DPA

BELO HORIZONTE.- Encara, conduce, desborda, complica, obliga, cabecea, ejecuta, convierte. Cuando se trata de atacar, Neymar es de lo más completo que ofrece el catálogo mundial de futbolistas. El partido de octavos de final contra Chile sirvió para agregar una nueva perla al repertorio ya de por sí amplio del brasileño Neymar: el mundo supo que también sabe defender.

Luiz Felipe Scolari, el técnico de Brasil, decidió combatir la presión rival en la mitad de la cancha con una agobiante presión propia y encomendó la misión a sus delanteros.

En el primer tiempo el resultado fue aceptable si se lo mide por la cantidad de pelotas recuperadas, pero tuvo un déficit importante: la nueva tarea asignada al delantero de Barcelona coincidió con su peor partido en ataque.

La cuestión, por lo tanto, es hasta qué punto el sistema resulta conveniente, y si Felipao lo repetirá ante Colombia, en el choque del viernes por los cuartos de final.

“Neymar siempre está muy involucrado y le da equilibrio al equipo”, señaló Scolari en la rueda de prensa del día antes del partido ante Chile.

Pareció un elogio más, pero tenía una intención escondida: anunciaba que Brasil iba a defender de manera agresiva y en campo contrario, esa fórmula que, en palabras del ex campeón del mundo René Houseman, “parece ofensiva, cuando en realidad sólo se defiende hacia adelante”.

Según Scolari, Neymar aprendió a defender cuando jugaba en Santos, de la mano de Muricy Ramalho. “Le inculcó que tenía que dejar de ser creativo a veces y participar en la marca cuando el rival tiene la pelota y eso es algo que la gente no suele ver siempre”, explicó el seleccionador.

Contra “la roja”, el atacante paulista fue muy generoso en el despliegue: retrocedió hasta la línea de volantes, presionó y trabajó. Sin embargo, ello provocó que arrancara cada jugada de ataque a no menos de 50 metros del arco contrario.

El “10” brasileño creó peligro real sólo en un par de ocasiones, sobre todo en un cabezazo apenas desviado; perdió todos los duelos individuales con Gary Medel, que jugó desgarrado; en ningún momento tuvo la lucidez expuesta en los encuentros anteriores, y prácticamente no participó del juego en el segundo tiempo y el suplementario.

Scolari explicó que si Neymar no estuvo bien “fue debido a un golpe sufrido en el inicio del partido”. Sin embargo, su desgaste defensivo fue también muy fuerte.

Ahora llega Colombia, cuyo juego, como el de Chile, tiene su origen en la mitad de la cancha, allí donde confluyen Sánchez, Aguilar, Cuadrado, James Rodríguez, Zúñiga y Armero. Y cabe pensar que Felipao repetirá el esquema.

Cabe preguntar entonces: ¿es buen negocio “perder” a Neymar en los metros finales para ganarlo como volante de contención en el centro del campo?

Hace poco más de un año, Josep Guardiola aseguró que si a Lionel Messi lo pusieran de lateral izquierdo sería igual de bueno que como delantero. “Es el mejor defensa del mundo”, afirmó.

Pero ni a Alejandro Sabella, ni al propio Guardiola cuando dirigía a Barcelona se les ocurrió nunca probarlo en esa posición. Ambos lo prefieren cerca del área rival, allí donde explota su capacidad de hacer daño. El viernes se sabrá en Fortaleza lo que prefiere Scolari para Neymar.