29 Noviembre 2014
CONCENTRADOS. El plantel “decano” aprovecha casa segundo de las prácticas que dispone para llegar en óptimas condiciones a la gran final contra Santamarina, el próximo fin de semana. LA GACETA / FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
Este es uno de los casos que pocas veces sale a luz, pero siempre está presente en cada cierre de temporada, ya sea en la pelea por mantener una categoría, por lograr un título o un ascenso, como es en este caso de la B Nacional.
La incentivación suena a mala palabra. Se habla de que clubes aportan dinero extra a las arcas de otros en pos de pedirles una mano: que derrote al rival de turno. En Atlético, ninguno de sus protagonistas dice haber estado en medio de alguna negociación de este tipo. La desconocen.
“De este tema no sé nada. Nunca me pasó. La incentivación, en nuestro caso, es conseguir el ascenso. Más motivación que esa no podés pedir”, opina Cristian Lucchetti, el subcapitán del equipo, que ya está descartado para la gran final contra Santamarina.
“Podés buscar 10.000 cosas más, pero en nuestro caso no hay nada más real y palpable que la oportunidad que tenemos ahora de llevar al club a Primera”, agrega “Laucha”.
“La verdad, a mí, no me pasó nunca. Ni en La Liga ni en ninguna categoría”, jura Alfredo Carrizo, y sigue: “Pero si la motivación existe y es para ir para adelante, no me parece mal”.
“Si es para ganar, está bien. No lo veo mal al tema. Pero si me decís que alguien te ofrece dinero para jugar a perder, no lo veo. No creo que ningún jugador entre a la cancha a perder. Sería desperdiciar 90 minutos que podría utilizarlos para hacer otra cosa, ja”, bromea “Bambino”, uno de los que encontró el camino de las convocatorias de la mano del “Vasco” Azconzábal.
Y como para cerrar, Carrizo reconfirma que en los clubes donde estuvo jamás nadie les ofreció dinero ni a él ni a sus compañeros para ganar. “Nunca, pero si se habla tanto es porque debe existir, ¿No?”, dice.
“Los jugadores son los que deciden los partidos y el hecho de solamente enfrentar a un rival que está en una instancia importante le crea una motivación. Por el orgullo propio del futbolista”, asume su posición Azconzábal.
Igual, como el que “Vasco” no come vidrio, dice: “Hay un montón de situaciones que no están reglamentadas y que están abiertas a las suspicacias, pero no puedo afirmar algo que no corresponde. En nuestro caso, tenemos el hermoso desafío de volver a Primera”.
La incentivación suena a mala palabra. Se habla de que clubes aportan dinero extra a las arcas de otros en pos de pedirles una mano: que derrote al rival de turno. En Atlético, ninguno de sus protagonistas dice haber estado en medio de alguna negociación de este tipo. La desconocen.
“De este tema no sé nada. Nunca me pasó. La incentivación, en nuestro caso, es conseguir el ascenso. Más motivación que esa no podés pedir”, opina Cristian Lucchetti, el subcapitán del equipo, que ya está descartado para la gran final contra Santamarina.
“Podés buscar 10.000 cosas más, pero en nuestro caso no hay nada más real y palpable que la oportunidad que tenemos ahora de llevar al club a Primera”, agrega “Laucha”.
“La verdad, a mí, no me pasó nunca. Ni en La Liga ni en ninguna categoría”, jura Alfredo Carrizo, y sigue: “Pero si la motivación existe y es para ir para adelante, no me parece mal”.
“Si es para ganar, está bien. No lo veo mal al tema. Pero si me decís que alguien te ofrece dinero para jugar a perder, no lo veo. No creo que ningún jugador entre a la cancha a perder. Sería desperdiciar 90 minutos que podría utilizarlos para hacer otra cosa, ja”, bromea “Bambino”, uno de los que encontró el camino de las convocatorias de la mano del “Vasco” Azconzábal.
Y como para cerrar, Carrizo reconfirma que en los clubes donde estuvo jamás nadie les ofreció dinero ni a él ni a sus compañeros para ganar. “Nunca, pero si se habla tanto es porque debe existir, ¿No?”, dice.
“Los jugadores son los que deciden los partidos y el hecho de solamente enfrentar a un rival que está en una instancia importante le crea una motivación. Por el orgullo propio del futbolista”, asume su posición Azconzábal.
Igual, como el que “Vasco” no come vidrio, dice: “Hay un montón de situaciones que no están reglamentadas y que están abiertas a las suspicacias, pero no puedo afirmar algo que no corresponde. En nuestro caso, tenemos el hermoso desafío de volver a Primera”.
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