Se robó los aplausos

No pasa en otro momento del año. Siempre cuando finaliza una temporada deportiva, las federaciones, en este caso la de voley, convocan a dirigentes, jugadores, periodistas, familiares y funcionarios para realizar la premiación a los mejores. “Estamos todos”, remarcó Juan Valenzuela, el jugador que decidió tomar protagonismo, durante la ceremonia que se realizó en el edificio de la Legislatura.

Cuando le tocó recibir el premio al mejor líbero del año, “Gumpy” solicitó hablar para las más de 100 personas que estaban presentes. Esperó que Martín Zamora gozara de su momento al ser elegido el mejor técnico en la rama femenina, aguardó que todos hicieran silencio para que le prestaran toda la atención posible y habló. “Necesitamos una sede propia”, señaló el representante de Instituto Pellegrini.

Luego de su discurso, hubo un aplauso cerrado, signo de que Valenzuela dijo algo que toda la familia del voley desea.

- ¿Podrías dar detalles del pedido?

- El concepto que quería tratar es una deuda pendiente que tiene la Federación de voley. Yo comencé a jugar hace 15 años y no tenemos todavía una sede propia para organizar debidamente las cuestiones básicas de una federación que pretende hacer las cosas bien. Lo que pido es que nos pongamos un objetivo que sea el de conseguir la sede lo antes posible. Es un pedido de unidad. La federación puede tener muchos objetivos y luchar por ellos, pero es hora que se ponga una prioridad que sea esta porque una vez que tenés tu casa, podés organizar todo de una mejor manera; tener la identidad, como yo le llamo.

-¿Por qué en este momento?

- Lo digo ahora porque tengo el reconocimiento y respeto, tanto de jugadores como técnicos y dirigentes de los clubes. Es un momento en el que mi palabra iba a ser valorada y escuchada.

- Además de un pedido, ¿es un llamado de atención?

- Tiene una doble connotación: un llamado de atención porque es un tema que no se trata y viene de hace varios años y un pedido explícito porque debemos unirnos para conseguirlo. Estamos en una transición que es positiva porque hay clubes que empezaron a trabajar en proyectos a largo plazo. Hay clubes que están tomando una bandera que debería ser tomada por el resto. Hay que buscar jugadores para desarrollarlos, trabajando fuerte en las inferiores y promocionarlos a Primera.

- ¿Pellegrini apostó a ese esquema?

- Como club tuvimos la suerte de contar con una persona que fue un inspirador en el modelo que hoy adoptan varios entrenadores. Julio Giménez (NdR: actual coordinador de las inferiores del Club Ciudad de Buenos Aires y técnico de la Selección Argentina Menor campeona Sudamericana), cuando estuvo en Pellegrini empezó con esa línea de trabajo integral.

Campeones y destacados

Las instituciones que pusieron su nombre en el primer puesto en los dos torneos (Integración, Iniciación y Anual “Andrés Ibáñez Parody”) que hizo disputar la Federación Tucumana de voley fueron: Social Monteros (3 títulos), Tucumán de Gimnasia (7), Fundarte (7), Banco Comercial (2), Monteros Voley (6), Complejo Belgrano (1), Mutual Lastenia (1), Concepción Voley (1), Deportivo Graneros (1) y Tiro Argentino (1).

Los premios individuales: mejor saque, Melisa Ferreyra y Juan Pablo Abuin; mejor ataque, María de la Paz Corbalán y Josué Atencia; mejor armador, Soledad Mateu y Ramiro Soria; mejor defensa, Ángela Barrionuevo y Enzo Cantela; mejor bloqueo Luz Ferreyra y Mario Castro; mejor líbero, Gabriela Tarvesí y Juan Valenzuela; mejor técnico, Martín Zamora (damas) y Diego Isa (varones).