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23 Febrero 2015

El año del espejo

Al llegar este nuevo año, pensé: es el año de la niña bonita, por ser el número 15. Pero, ante la realidad, me pregunto: ¿será un año bonito? Por todo lo que tenemos que transitar en este nuevo comienzo. Dije: no, este año es el año del espejo, del espejo político, donde vamos a ver a todos y todas los que se postulan y pelean a cargos politicos; diferentes, variados, inventados y hasta insólitos. Estos postulantes tienen espejos, se mirarán y dirán: no soy eterno; no soy soberbio; soy reemplazante; no soy egoísta; no soy corrupto; no soy tóxico; no soy negociable; no miento; no quiero ser re-re-re-re; no soy un bolsón; no difamo; no busco riqueza fácil; quiero ser igual ante la ley; cumpliré lo jurado ante la Constitución; tengo mi despacho abierto para el que me necesita; no vivo en una fortaleza; no ensuciaré las calles de mi ciudad; si ya me conocen por mi brillante y honrada trayectoria, dejaré mi cargo a alguien mejor, después de muchos años... nunca confundiré la palabra pueblo con la palabra público. Dicen los que saben que el espejo tiene dos caras. En una dice “soy el problema” y en la otra “soy la solución” en cual se mirarán nuestros candidatos. Señores politicos cuiden a su espejo, porque cuando el espejo se rompe viene la mala racha. Cuidemos entre todos el espejo grande que es el país de todos los argentinos, y nos representa y que hoy está tapado en señal de duelo; lleven cada uno de los postulantes una misma remera celeste y blanca que diga: “Yo amo y respeto a mi país”. ¿Y usted, qué opina? Porque todos queremos lo mismo. ¿Verdad?.

Margarita Poggi de Bottone

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Nisman

Al contrario de lo que manifiesta el lector Camilo Peral Tobar en su carta “Nisman II” (21/2), yo no considero lamentable ni patético ver a tantos argentinos marchando, ya sea a favor o en contra de algo, sino que es la demostración de que el pueblo disfruta de las libertades que otorga la democracia. Además, yo por lo menos no me creo capacitado para opinar sobre la “flojedad de papeles” de una denuncia presentada contra cualquier ciudadano, sin estar interiorizado de todos los pormenores que la originaron. Tampoco creo que este tipo de expresiones sean destituyentes, ni mucho menos comparables con intentos de golpes de Estado (blandos o duros), como también me pareció desafortunada la opinión sobre el “perfil” de los concurrentes, debido a que nadie obligó o impidió a nadie su asistencia a la marcha. Para terminar, vergüenza ajena me da ver a la Presidenta bailando mientras en el país ocurren graves disturbios y muertes como a fines de 2013, o como cuando habla de felicidad mientras se producen trágicos desastres naturales en una provincia argentina.

Enzo Della Rocca

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Nisman II

Adhiero plenamente a la carta del lector Camilo Peral Tobar (21/2), no así a la de Pablo Giunta, de la misma fecha. Este último lector, desbordado por una tremenda intolerancia, califica al lector Oscar Beltrán de ignorante, fanático y cobarde. Simplemente porque se sorprendió ante la falta de jóvenes en la marcha de los sectores opositores del 18 F, dato que fue corroborado inclusive por TN, canal del monopolio “Clarín”. ¿Por qué tanta animosidad ? El señor Giunta siempre escribió en esta sección con toda libertad y expresó y expresa su opinión, y los lectores que se diferencian de la suya tienen el mismo derecho. Yo no fui a la marcha, convocada por ocho fiscales (de 200 ) y por el variado arco opositor, que iba desde la tristemente célebre Cecilia Pando, defensora del genocidio contra nuestro pueblo, Massa, Macri, , la Sociedad Rural, Binner, Carrió, la UCR, gremialistas cercanos a Luis Etchevehere (presidente de la Sociedad Rural) y tantos otros enfrentados al gobierno de Cristina. Fue una marcha que se realizó en paz y libertad y con todas las garantías de seguridad. Lamento la actitud hipócrita de disfrazar a este acontecimiento con la falacia del homenaje a Nisman. Sin importarles la decisión de las inmensas mayorías de los argentinos en las urnas, quieren que la “ yegua” se vaya, tal como lo expresara el lector Peral Tobar . Esta nueva “Unión democrática” avizora la concreta posibilidad de otra derrota en las próximas y cercanas elecciones; entonces se dan cuenta de que no tienen votos, pero sí voz, la de los medios hegemónicos que fogonean constantemente con la prédica de “la mala onda” para infundir desesperanza a nuestra gente; pero la realidad es más fuerte. Desesperados, abrumados por el silencio de la falta de propuestas para seducir al electorado, seguramente volverán a insistir, y espero me equivoque, con actitudes que nada tienen que ver con el respeto por las reglas de la democracia. Falta poco tiempo para la hora del sufragio y los millones de ciudadanos que apoyamos las políticas de este gobierno ya estamos armados con nuestros DNI para homenajear a la democracia en ese momento de gran fiesta cívica.

Francisco Centurión

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Nisman III

Qué humana sensación es sentir y estar en democracia. Es la apreciación que tuve al ver las marchas que salieron a recorrer las calles de las ciudades del país. Mirar el espacio público como un ágora descontaminada de vicios. Ver cómo se recuperaba ese espacio donde el otro tenía las mismas ganas que yo, vivir en libertad. Por razones laborales no pude participar activamente de la marcha en Monteros, pero mi espíritu participativo estuvo siempre presente en cada espacio social del recorrido. Así como en la marcha anterior dije que los monterizos éramos indiferentes, hoy puedo decir que somos menos indiferentes, porque un grupo de vecinos salió a la calle a peregrinar, despojados de odios, con el espíritu al borde y comparable a un verdadero acto religioso. Un hecho genuino no recuerdo haber vivido hace mucho tiempo; no era un grupo de gente, sentía que estaba la humanidad, un gran sepelio configurado en la imagen de un mártir. Mientras que algunos de la clase política monteriza daban lo mejor que tenían para dar, la espalda, por suerte aparecieron antiguos dirigentes que recuperaron su memoria participativa, y el silencio de la marcha se mezclaba con la algarabía del poder municipal que trataba de tapar el agua con adoquines de cemento en un barrio de la ciudad, y tenía como invitada de lujo a la pareja gubernamental con su comitiva pre-electoralista, por unas horas Monteros era la capital tucumana, que resguardaba al gobernador del silencio de su territorio. La marcha del silencio monteriza, con la consigna “yo voy, vamos gente”, tenía el propósito de acompañar la proclama nacional, pero también el objetivo de derrocar la indiferencia, mostrada por esa clase política que sigue jugando a las escondidas en los bunkers de las confiterías del centro. La marcha que dejó revelar “las caretas” de los personajes del gran carnaval social que es Monteros. Ojalá a partir de ahora los monterizos recuperemos nuestro espacio y marchemos por sus calles sin temor de sentir que en cada entrada aparece el “prohibido pasar”.

Gustavo Núñez

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Pare, mire, escuche

Desde muy pequeña, llamábame la atención el cartel en cruz junto a las vías de los añorados ferrocarriles. En ese cartel decía, pare, mire, escuche. Es lo que faltaría en estos momentos de turbulencias sociales, políticas, religiosas y de todo tipo, en el ámbito Nacional y mundial. Siempre leo las cartas de lectores y es excelente ver que la comunidad tiene un espacio para expresarse. Sigo las polémicas que se forman y me planteo sinceramente los interrogantes que se exponen. Algo he visto en algunas de ellas que realmente les quita toda fuerza de verdad según mi apreciación, esto es, la descalificación del interlocutor y no del argumento. a mi buen entender, en una discusión con el fin de encontrar una idea más cercana a la verdad, se debe disolver el argumento no a las personas que lo sostienen, que expresan ideas diferentes u opuestas a las nuestras. De lo contrario, este espacio que sirve mucho a la ciudadanía y a la democracia, se transforma en otro “gran hermano” por decirlo de alguna manera, en una discusión de café o de una charla trasnochada o en puro alarde de erudición. Respeto la opinión ajena, “la opinión”. Esa opinión que nos deja preguntas para reflexionar, que muestra fundamentos filosóficos, históricos o de la propia experiencia, sin descalificar a los demás. Vivimos en democracia, y eso nos pone en la gran tarea de saber escucharnos, disentir y poder llegar a acuerdos en vistas del bien común. Todos tienen derecho a expresarse, a marchar, a peticionar ante las autoridades (declaraciones, derechos y garantías art., 14, 14 bis, 15, 16, 17, 18 19 Constitución Nacional). Nuestras percepciones no son la realidad; debemos ser muy cautos, muy lúcidos y poder lidiar con nosotros mismos disciplinando nuestro pensar, sentir, percibir... para poder acercarnos a la realidad, saliendo de los ensueños del ego y buscar los puntos de encuentro. Estamos en el mundo de los opuestos, cuánto nos cuesta ver la complementación y ser proactivos y respetuosos de los demás.

Susana Aguilar

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Derrame cloacal

Observar y circular a diario por las calles de Monteros hoy resulta un desafío, y esto se debe a que las autoridades responsables de mantener una calidad de vida sana y llevadera para los ciudadanos duermen el eterno descanso y una desidia constante. Las continuas pérdidas de líquidos cloacales son por demás excesivas; el mal olor que los ciudadanos debemos soportar y el riesgo de enfermedades a las que estamos expuestos es demasiado alto. Tal es el caso de la calle Colón. ¡Y para qué hablar cuando llueve! Las aguas de lluvia se mezclan con los líquidos contaminados, aumentando el malestar para frentistas de casas, peatones y automovilistas.... En fin, alguien debe hacerse cargo del problema. Monteros es una ciudad que ha crecido tanto en cantidad de habitantes como de barrios, pero no se hicieron nuevas obras o planta de tratamiento como para descongestionar las redes, y las únicas que se realizan son conexiones a las que ya existen, lo que ocasiona que se sature el sistema.

Claudio Félix Ybrahim

Pasaje Jardín de la República 391

Monteros


Recalde

El presidente de Aerolíneas, señor Recalde, ¿no aprendió nada en su vida política? Ya no es un muchachote de La Cámpora. Es el titular de una de las empresas más grandes del país, que por cierto deja mucho que desear y que en nombre del pseudonacionalismo nos cuesta muchos millones de dólares a los contribuyentes. Verlo vociferar como un “pendex” en la barricada causa mucha bronca y mucho dolor al ver en qué manos está nuestra Economía. Porque Recalde es una de las patas de la “mesa de reparto” de las rupias del Estado, junto al Ministro de Economía, al de Planificación, al jefe del Ejército, etcétera. Es atendible que los beneficiarios del reparto defiendan su “fuente de trabajo” tan bien remunerada. Pero oírlos gritar denostando, mintiendo y subestimándonos es demasiado. Parece que surtió efecto la orden de su jefa: nosotros los gritos, ellos el silencio. Pero como todo llega, en algún momento veremos a muchos esbirros haciendo silencio tras las rejas.

José Quirós

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Amparo para jubilados

Como es de conocimiento público, la situación de los jubilados transferidos continúa sin resolución por parte del Estado. Once años de lucha no lograron resultados, mientras vemos morir compañeros en total desamparo. Tanto Anses como el Ipsst pretenden que cada jubilado realice el reclamo de manera individual y a la hora de responder lo hace en forma sistemática, rechazando la pretensión de cobro, mediante resoluciones idénticas y fundamentos inconsistentes y genéricos, que obligan al jubilado a promover reclamos judiciales. Lamentablemente, muchos no poseen medios económicos suficientes, ni la salud y paciencia necesarias para encarar estos largos procesos judiciales, además del desaliento que les ocasiona su corta expectativa de vida y su lucha por la supervivencia diaria. Quienes recurren a la Justicia tardan aproximadamente 10 años para cobrar sus acreencias. Existen juicios de jubilados iniciados en el 2004 que continúan sin efectivizarse. Si bien estos juicios generalmente concluyen con fallos favorables, resulta demasiado perverso especular con la cortedad de vida de los beneficiarios para eludir el pago. Por ello, conjuntamente con un compañero de lucha, José Mattassini, buscamos una vía más idónea, rápida y expedita, la del amparo, para el reconocimiento de nuestros derechos; vía novedosa, al menos en el ámbito previsional. Sólo nos resta confiar en la lucidez, honestidad y hombría de bien de los señores jueces que tienen en sus manos los bienes y la vida de todos los ciudadanos..

Francisco Saleh

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Esquivando un bache ausente

En pasaje Benjamín Paz al 300, durante más de seis meses hubo un enorme bache en medio de la calzada. Este fue arreglado hace cinco días. Lo curioso del hecho es que muchos de los que diariamente transitan en vehículos por este lugar, siguen esquivando el sitio donde existía el bache.

Daniel E. Chávez

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Lecherías

Pocos alimentos deben tener tanta historia como la sustanciosa y saludable leche. Actividad que se inicia con la venta callejera puerta a puerta, mediante arrias de yuntas de vacas con sus terneros para apoyo, ofreciendo “leche al pie de la vaca”. Luego con la aparición de los tambos, ubicados en la periferia, que adquieren jardineras tiradas por caballos “frisones” o mulas “roma” donde cargan los tachos lecheros metálicos para abastecer leche suelta por litro a domicilio. Años después el empresario-filántropo Alfredo Guzmán crea la Granja Modelo sobre el camino a La Aguadita, con un moderno sistema de pasteurización y a partir de ahí surge la leche envasada en botellas de uno y medio litro, y sus subproductos expendidos en locales numerados, emprendimiento que llegó a tener casi un centenear de estas agencias de distribución. A mediados de la década del 40 una huelga de peones produjo la muerte de vacas lecheras de esa cabaña por falta de ordeñe. Antes ya existían otras granjas de menor escala: de los Bru, Futilevica, Bro, Argentina, El Pibe, Hispano Argentino, que vendían su propia producción: leche, crema, mantequilla, cuajada, requinsón. Años después aparecería el establecimiento La Tule (Tucumán-leche), de don Pedro Merlini, en avenida Mate de Luna al 3.000, donde los productores tamberos comercializaban la leche para cuya distribución y venta se encargarían carruajes cubiertos de chapa y pintados de blanco. Esta firma cerró sus puertas en 1949, lo que impulsó la creación de la Cootam, que agregaría la elaboración de quesos, manteca, yogur, ricota y dulce de leche, y que más adelante reemplazaría la botella por el práctico sachet. La introducción de leches y derivasdos de otras cuencas lecheras produjo el cierre de este emprendimiento tucumano. Párrafo aparte merece la provisión de la curativa y cremosa leche de burra durante las infaltables epidemias de tos covulsa, cuando las madres esperaban ansiosas, vasito en mano, que llegara el proveedor con su recua de burras como un “santo remedio”.

Ysmael Díaz

Mario Bravo 247

Banda del Río Salí


El Bicentenario

Por enésima vez reclamaré al gobernador de Tucumán, ¿cuándo asumirá la obligación de cumplir con la ley que ordena los festejos del Bicentenario de la Independencia Argentina? ¿No le teme al comentario de su pueblo que sus días de gobierno demuestran que no le interesa la fecha patria? Tal vez, sea verdad que no le interesa lo que siente y piensa el tucumano que sueña con “tirar la casa por la ventana” como lo comentó oportunamente LA GACETA para los festejos del 9 de Julio de 2016, porque Ud. estará ido y que se las arregle el que viene. El sábado 20/2 nos informa LA GACETA que el cardenal Luis Villalba comentó que el Santo Padre Francisco dijo que le gustaría venir a Tucumán en el 2016. La FET hace saber que proyecta crear el Museo de las Naciones Iberoamericanas en el cerro San Javier y que invitarían al Papa a colocar la piedra basal. La Municipalidad de la Capital en los últimos meses de 2014 licitó la construcción de un monumento al Bicentenario. Existen muchísimas instituciones civiles preparando festejos pero el Gobernador de Tucumán no ha anunciado absolutamente nada. Exhorto a que urgente se ponga a trabajar preparando la provincia histórica de Tucumán, Capital de la República Argentina los días 8 y 9 de Julio de todos los años, para festejar dignamente y ofrecer de todo lo mejor que tenemos a las visitas. Nos queda poco tiempo pero podemos lograrlo..

Ángel Ricardo Salguero

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FINAL INFELIZ

Llega el mes de enero y uno piensa sólo en disfrutar las vacaciones. Nos esperan el sol, la arena y el mar. Pero… lo que uno nunca se imagina es que después de haber pasado unos hermosos días en la playa va a tener que padecer un tormento en el viaje de regreso a casa. Sí señores; así es. Compramos los boletos en la única empresa de micros que hasta el momento hace los viajes directos de Tucumán a Mar del Plata y viceversa: “XXXX Bus” (lo dejo a su imaginación). De regreso a Tucumán el día 1/2, partimos ya con una hora de retraso en un colectivo deteriorado y en pésimas condiciones de higiene (las cucarachas subían por las piernas de los pasajeros de los pasajeros). A las 23 hs. se pincha una goma en la nada misma y el chofer nos dice que “por seguridad” nos iba a llevar (con el micro en llanta) a otro sitio para cambiarla. No conforme con esto, estando ya en la 1º parada (3.45 a.m) y luego de esperar casi una hora para emprender viaje nuevamente, nos informan que no podíamos continuar porque el micro tenia desperfectos técnicos y que su refuerzo llegaría a los 20 minutos. Cosa que nunca sucedió. Por tal motivo los choferes nos comunican que teníamos que abordar el micro de otra empresa que nos llevaría a Rosario, donde nos esperaría el micro de “XXXX Bus”, desviándonos así dos horas de viaje, y debiendo viajar tres pasajeros de parados. Una vez allí (siendo ya las 8 a.m del 2/2 y teniendo como hora prevista inicialmente de arribo a Tucumán 12:30 p.m.) los pasajeros por sus propios medios y sin ningún tipo de control que garantizase la seguridad, tuvieron que sacar su equipaje de la bodega para trasladarlo hasta el otro micro que, como si no fuera poco, no reunía los requisitos del servicio originalmente contratado. Después de 31 horas de viaje en total, finalmente arribamos; y al hacer los reclamos pertinentes ¿qué nos ofrecen? Un boleto con el 100% de descuento a cualquier destino. ¿Qué opinan? ¿Les quedarían ganas de volver a viajar con la misma empresa que cumplió deficientemente con las obligaciones que asumió al momento de contratar el servicio? A mí no. Es mi dinero; poco o mucho pero pagué por él de buena fe. Se los dejo a su criterio..

Silvana Pereyra

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Esperando propuestas

Si en la farragosa publicidad de los candidatos a gobernar la Argentina no existen planes a largo plazo que nos demuestren que están de verdad preparados para hacer algo importante en el país, sería bastante triste. Por ejemplo, hacernos conocer si seguirán manejando la presión impositiva con los impuestos directos. Por ejemplo, el IVA, el impuesto a los ingresos brutos que además lo cobran los bancos evitando el ahorro en sus cuentas de ahorro, porque descuentan el 7.50 % (algo que impide canalizar el ahorro hacia la inversión, porque los bancos podrían así bajar sus tasas usurarias actuales que llegan a más del 3 % mensual (horroroso), no hay otro adjetivo para ponerle. Si deciden hacer que pague el que más gana, y distribuir como corresponde a las provincias dejaríamos quizás de tener una Argentina macrocefálica, para ello deberán dejar de cobrar retenciones que lo único que hicieron fue encarecer carne, leche, pan, elementos de primerísima necesidad. Pero que lo digan ahora, antes de las PASO y de las definitivas. Además deberían tener ya planeado cuáles serán las grandes obras a encarar de una vez por todas. Y otros temas que son prioritarios como tener escuelas a las que no les falte nada, ni una tiza, ni un maestro bien pagado, ni un conserje que cuide los bienes. Y las universidades, que son un ejemplo en todo el mundo porque son gratuitas y hacen sabios profesionales, ya han demostrado que necesitan gobernantes estadistas que les hagan poner su sabiduría en todo lo que nos está faltando. No es menester decir qué nos falta, todos lo saben. Y si además demuestran que pueden convivir con la diferencia, enfrentándose en debates públicos entre candidatos, para que veamos cómo son en realidad, quizás tengamos una chance más de ser el país tranquilo y en pleno desarrollo que necesitamos como el aire.

Carmelo José Felice

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