03 Marzo 2015
Según la Mesa de Enlace, que representa a las principales entidades del campo, la inflación y la falta de crédito afectan la rentabilidad de los productores.
El aumento de los costos en dólares, la presión fiscal, la pérdida de competitividad a causa de la inflación, el alto costo del financiamiento y el deterioro de la infraestructura impactaron negativamente en las economías regionales, señala la entidad en un comunicado. Los resultados de quebranto obtenidos por los productores ponen en riesgo más de un millón de puestos de trabajo, y el nivel de actividad económica en el interior del país. Estas fueron las conclusiones a las que arribó la Mesa de Enlace ruralista, que representa a las principales entidades del campo, en un balance sobre la actualidad del sector productivo.
El balance abordó la realidad de los productores de azúcar de Tucumán. La Mesa subrayó que el sector maneja, desde hace cuatro años, el mismo precio por el producto. “Esta situación afecta la viabilidad del negocio de 4.800 pequeños productores cañeros, es decir el 90% del total. La pérdida de competitividad internacional le quita al sector la posibilidad de exportar, y la sobreoferta se vuelca al mercado interno e impacta aún más en el precio al productor”, indicó.
Por otro lado, los dirigentes ruralistas analizaron que los productores citrícolas se enfrentan a un escenario internacional y local adverso, debido a que la demanda internacional está afectada por la devaluación de los mercados compradores como la Unión Europea, Rusia y Brasil. “La mayor oferta de cítricos de Perú y de Sudáfrica desplaza a los productores locales de los mercados mundiales. Esto volcará una mayor cantidad de fruta en el mercado interno e impactará aún más en el precio al productor”, argumentó.
Según el informe, el sector vitivinícola enfrenta una crítica situación por un exceso de oferta de 200 millones de litros, es decir el 10% de la producción anual. “Este escenario se produjo como consecuencia de las desacertadas medidas del Gobierno nacional”, advirtió la Mesa de Enlace.
El aumento de los costos en dólares, la presión fiscal, la pérdida de competitividad a causa de la inflación, el alto costo del financiamiento y el deterioro de la infraestructura impactaron negativamente en las economías regionales, señala la entidad en un comunicado. Los resultados de quebranto obtenidos por los productores ponen en riesgo más de un millón de puestos de trabajo, y el nivel de actividad económica en el interior del país. Estas fueron las conclusiones a las que arribó la Mesa de Enlace ruralista, que representa a las principales entidades del campo, en un balance sobre la actualidad del sector productivo.
El balance abordó la realidad de los productores de azúcar de Tucumán. La Mesa subrayó que el sector maneja, desde hace cuatro años, el mismo precio por el producto. “Esta situación afecta la viabilidad del negocio de 4.800 pequeños productores cañeros, es decir el 90% del total. La pérdida de competitividad internacional le quita al sector la posibilidad de exportar, y la sobreoferta se vuelca al mercado interno e impacta aún más en el precio al productor”, indicó.
Por otro lado, los dirigentes ruralistas analizaron que los productores citrícolas se enfrentan a un escenario internacional y local adverso, debido a que la demanda internacional está afectada por la devaluación de los mercados compradores como la Unión Europea, Rusia y Brasil. “La mayor oferta de cítricos de Perú y de Sudáfrica desplaza a los productores locales de los mercados mundiales. Esto volcará una mayor cantidad de fruta en el mercado interno e impactará aún más en el precio al productor”, argumentó.
Según el informe, el sector vitivinícola enfrenta una crítica situación por un exceso de oferta de 200 millones de litros, es decir el 10% de la producción anual. “Este escenario se produjo como consecuencia de las desacertadas medidas del Gobierno nacional”, advirtió la Mesa de Enlace.