15 Marzo 2015
UN INTÉRPRETE CON PERICIA. Buffo explicó que la idea de bravura apunta a que el pianista muestre su talento. la gaceta / foto de antonio ferroni (archivo)
ACTÚA HOY
• A las 20.30, en el Centro Cultural Virla de la UNT (25 de Mayo 265)
El año pasado, Roberto Buffo ofreció un ciclo de conciertos como solista que tituló “El piano de la bravura”, en referencia a un estilo estético que aborda tanto la composición en sí como la forma de tocarlas (ver “Un concepto con dos significados”).
Satisfecho con el resultado alcanzado, el músico vuelve esta noche con una segunda parte, “Más piano de la bravura”, que ejecutará en el Kawai BX-7 que engalana el Centro Cultural Virla, del mismo modo que lo hizo en 2014. El recital es en adhesión al mes de la memoria de esa institución de la Universidad Nacional de Tucumán.
El repertorio elegido será el mismo que interpretará en mayo en La Usina del Arte, del barrio de La Boca en la Capital Federal. Antes tendrá una escala muy especial: en Semana Santa dirigirá el concierto clausura del domingo de Pascuas del festival internacional de los Caminos del Vino, en Mendoza.
“Voy a tocar estudios de Frédéric Chopin, Franz Liszt, Carl Czerny y Moritz Moszkowski. Esta forma musical significa una pieza corta que se centra en un aspecto técnico específico del instrumento elegido. Los estudios de concierto para piano son, en general, de alta dificultad técnica y frecuentemente escritos por compositores pianistas para su propio lucimiento, que es justamente el caso de los incluidos en este recital”, explicó.
Buffo también tocará “Dumka opus 59”, de Piotr Ilich Tchaikovsky, a la que consideró la obra individual más importante del compositor ruso. “Es un tanto ciclotímica, porque revela la tragedia existencial y, a la vez, la euforia desmedida características de su pueblo”, detalló.
“Luego será el turno del ‘Carnaval opus 9’ de Robert Schumann, que es uno de los grandes monumentos de la literatura pianística de todos los tiempos. Son varias piezas cortas que se ejecutan sin solución de continuidad y que caracterizan a personajes muy diversos en un aparente caos que no es tal, porque la organización interna de la obra, basada en cuatro notas, es rigurosa. Justamente, el Carnaval ocurre antes del comienzo de la Cuaresma e implica un momentáneo relajamiento del orden social”, sostuvo.
El listado de obras que se escucharán esta noche se completa con “Fuegos de artificio”, de Claude Debussy, y el “Andante spianato” y la “Gran Polonesa Brillante opus 22”, de Chopin, popularizada por su uso en la escena final de la película “El pianista”, dirigida por Roman Polanski, sobre la historia verídica de la tragedia del músico polaco Wladyslaw Szpilman, durante la Segunda Guerra Mundial.
• A las 20.30, en el Centro Cultural Virla de la UNT (25 de Mayo 265)
El año pasado, Roberto Buffo ofreció un ciclo de conciertos como solista que tituló “El piano de la bravura”, en referencia a un estilo estético que aborda tanto la composición en sí como la forma de tocarlas (ver “Un concepto con dos significados”).
Satisfecho con el resultado alcanzado, el músico vuelve esta noche con una segunda parte, “Más piano de la bravura”, que ejecutará en el Kawai BX-7 que engalana el Centro Cultural Virla, del mismo modo que lo hizo en 2014. El recital es en adhesión al mes de la memoria de esa institución de la Universidad Nacional de Tucumán.
El repertorio elegido será el mismo que interpretará en mayo en La Usina del Arte, del barrio de La Boca en la Capital Federal. Antes tendrá una escala muy especial: en Semana Santa dirigirá el concierto clausura del domingo de Pascuas del festival internacional de los Caminos del Vino, en Mendoza.
“Voy a tocar estudios de Frédéric Chopin, Franz Liszt, Carl Czerny y Moritz Moszkowski. Esta forma musical significa una pieza corta que se centra en un aspecto técnico específico del instrumento elegido. Los estudios de concierto para piano son, en general, de alta dificultad técnica y frecuentemente escritos por compositores pianistas para su propio lucimiento, que es justamente el caso de los incluidos en este recital”, explicó.
Buffo también tocará “Dumka opus 59”, de Piotr Ilich Tchaikovsky, a la que consideró la obra individual más importante del compositor ruso. “Es un tanto ciclotímica, porque revela la tragedia existencial y, a la vez, la euforia desmedida características de su pueblo”, detalló.
“Luego será el turno del ‘Carnaval opus 9’ de Robert Schumann, que es uno de los grandes monumentos de la literatura pianística de todos los tiempos. Son varias piezas cortas que se ejecutan sin solución de continuidad y que caracterizan a personajes muy diversos en un aparente caos que no es tal, porque la organización interna de la obra, basada en cuatro notas, es rigurosa. Justamente, el Carnaval ocurre antes del comienzo de la Cuaresma e implica un momentáneo relajamiento del orden social”, sostuvo.
El listado de obras que se escucharán esta noche se completa con “Fuegos de artificio”, de Claude Debussy, y el “Andante spianato” y la “Gran Polonesa Brillante opus 22”, de Chopin, popularizada por su uso en la escena final de la película “El pianista”, dirigida por Roman Polanski, sobre la historia verídica de la tragedia del músico polaco Wladyslaw Szpilman, durante la Segunda Guerra Mundial.
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