EMIRATOS ÁRABES.- "Se le escapó el águila", hubiera dicho Diego Maradona, el residente más ilustre de Dubai. Ocurre que el instructor Jacques Olivier le puso una cámara en el lomo a un ave, lanzada desde las alturas para captar en tiempo real como un dron los detalles de una de las ciudades más modernas de oriente, ante la sorpresa de los ciudadanos y turistas que aprovecharon el cálido fin de semana.
Famosa por su vista (según el Guinness los animales pueden ver un conejo en detalle a dos kilómetros), el águila planea sobre el cielo despejado, permitiendo observar el desierto sobre los márgenes, pero también la punta de los rascacielos del centro. La acción transcurre en calma hasta que Olivier le hace señas para que se inicie el descenso a toda velocidad, en caída libre sin que la imagen se altere al detalle. El proyecto de Olivier se llama "Alas de la libertad", y el objetivo es reinsertar en la naturaleza a los animales que han vivido en cautiverio.