15 Abril 2015
CONDENADA. Javier Penino Viñas sostuvo durante el juicio que Grimaldos no fue la culpable de la apropiación, sino Vildoza. FOTO INFOJUSO.GOV.AR
BUENOS AIRES.- La esposa de un ex jerarca de la Armada de la última dictadura fue condenada a seis años de prisión por la apropiación de un niño nacido en el campo de detención clandestino que funcionó en la ESMA y cuyos padres siguen desaparecidos.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal 4 impuso esa condena a Ana María Grimaldos, de 79 años y esposa del ex jefe del grupo de tareas de la ESMA Jorge Vildoza, por los delitos de retención y ocultamiento de un menor de 10 años, supresión del estado civil de un menor de 10 años y falsedad ideológica de instrumentos públicos, en perjuicio de la víctima.
Los jueces Leopoldo Bruglia, Pablo Bertucci y Néstor Costabel declararon los hechos como delito de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptible.
La fiscalía y la querella, integrada por las Abuelas de Plaza de Mayo, habían pedido al tribunal que la condenara a 12 años de prisión.
Grimaldos -que llegó a juicio con arresto domiciliario- fue condenada como apropiadora de Javier Penino Viñas, quien nació en la ESMA en 1977 y recuperó su identidad en 1998, cuando se sometió voluntariamente a estudios de ADN.
Su madre fue Cecilia Viñas -delegada del gremio mecánico SMATA- y su padre, Hugo Penino, ambos secuestrados en 1977 y que siguen desaparecidos.
Vildoza y Grimaldos huyeron del país en 1986 rumbo a Suiza, antes de que se sancionaran las leyes de impunidad y de que se dictaran órdenes de captura, y vivieron en Londres y en Sudáfrica.
En 1998, Javier volvió a país para hacerse un estudio de ADN para conocer su verdadera identidad y los estudios concluyeron que era hijo de desaparecidos.
Grimaldos fue detenida en 2012 por orden de la jueza federal María Servini de Cubría en una casa de Acassuso (San Isidro) después de ingresar al país con una identidad falsa.
Se cree que estaba a punto de viajar a Londres, donde vive Javier Penino Viñas, para conocer a la tercera hija del joven apropiado.
Vildoza no fue juzgado porque según su mujer falleció en 2005, en Sudáfrica, lo que no se pudo acreditar judicialmente.
La defensa de Grimaldos, quien se negó a declarar durante el juicio, dijo que la mujer desconocía que el muchacho era hijo de desaparecidos y que nunca manejó los documentos vinculados a la identidad del joven.
El tribunal dará a conocer la semana que viene los fundamentos de la condena. (DYN)
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal 4 impuso esa condena a Ana María Grimaldos, de 79 años y esposa del ex jefe del grupo de tareas de la ESMA Jorge Vildoza, por los delitos de retención y ocultamiento de un menor de 10 años, supresión del estado civil de un menor de 10 años y falsedad ideológica de instrumentos públicos, en perjuicio de la víctima.
Los jueces Leopoldo Bruglia, Pablo Bertucci y Néstor Costabel declararon los hechos como delito de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptible.
La fiscalía y la querella, integrada por las Abuelas de Plaza de Mayo, habían pedido al tribunal que la condenara a 12 años de prisión.
Grimaldos -que llegó a juicio con arresto domiciliario- fue condenada como apropiadora de Javier Penino Viñas, quien nació en la ESMA en 1977 y recuperó su identidad en 1998, cuando se sometió voluntariamente a estudios de ADN.
Su madre fue Cecilia Viñas -delegada del gremio mecánico SMATA- y su padre, Hugo Penino, ambos secuestrados en 1977 y que siguen desaparecidos.
Vildoza y Grimaldos huyeron del país en 1986 rumbo a Suiza, antes de que se sancionaran las leyes de impunidad y de que se dictaran órdenes de captura, y vivieron en Londres y en Sudáfrica.
En 1998, Javier volvió a país para hacerse un estudio de ADN para conocer su verdadera identidad y los estudios concluyeron que era hijo de desaparecidos.
Grimaldos fue detenida en 2012 por orden de la jueza federal María Servini de Cubría en una casa de Acassuso (San Isidro) después de ingresar al país con una identidad falsa.
Se cree que estaba a punto de viajar a Londres, donde vive Javier Penino Viñas, para conocer a la tercera hija del joven apropiado.
Vildoza no fue juzgado porque según su mujer falleció en 2005, en Sudáfrica, lo que no se pudo acreditar judicialmente.
La defensa de Grimaldos, quien se negó a declarar durante el juicio, dijo que la mujer desconocía que el muchacho era hijo de desaparecidos y que nunca manejó los documentos vinculados a la identidad del joven.
El tribunal dará a conocer la semana que viene los fundamentos de la condena. (DYN)