14 Diciembre 2015
LAMENTABLE. El golero Germán Montenegro es trasladado por auxiliares de su equipo hacia el vestuario visitante luego de sufrir el estallido de un elemento de pirotecnia que le lanzaron desde la tribuna. LA GACETA / FOTOS DE DIEGO ARÁOZ
El fútbol volvió ayer a sufrir un duro cachetazo y van..... El partido que debían disputar Sportivo y Güemes de Santiago del Estero, en el marco de la revancha de una de las semifinales del Federal B, se suspendió antes de comenzar, por una agresión al golero Germán Montenegro, de los visitantes.
Desde mucho antes de que el árbitro Gustavo Gómez, de Salta, tratara de dar por iniciado el encuentro, el clima que se vivía en el estadio de Villa 9 de Julio estaba enrarecido. Cuando alrededor de las 15.45 la delegación visitante llegó al estadio, fue hostigada por un grupo de simpatizantes “julianos”. Incluso el micro que la trasladaba sufrió la rotura de algunos de sus vidrios laterales.
Cuando a las 17.03 el árbitro intentó dar por iniciada la contienda, se observó cómo Montenegro, que se aprestaba a ocupar la valla que da espaldas a la tribuna popular norte, caía pesadamente al campo de juego, luego de un estallido. De inmediato sus compañeros y los auxiliares se acercaron al lugar para constatar el grado de la dolencia.
A partir de ese momento, se produjeron largas deliberaciones entre los protagonistas. Por un lado, los visitantes argumentaban que el arquero no estaba en condiciones de jugar, mientras que la gente de Sportivo consideraba que Montenegro estaba exagerando.
Luego de una espera más que prolongada, Gómez decidió que Montenegro fuera llevado a los camarines y que luego fuera trasladado hasta el Hospital Padilla para que se le realizaran los estudios correspondientes para tener un informe médico oficial al respecto.
Palabra autorizada
El propio árbitro y sus colaboradores acompañaron al golero al Hospital. Allí, LG Deportiva tuvo la chance de tener la versión de Gómez sobre la situación vivida.
“Se comprobó que cayó un petardo o bomba; no puedo determinar, en estos momentos, exactamente qué fue lo que cayó en las cercanías donde estaba el arquero. Por eso, como corresponde, cité a los médicos, que, son los únicos que podían certificar si el jugador estaba en condiciones físicas como para jugar. Como me dijeron que no estaba apto para disputar el encuentro, es que decidí suspender el cotejo. Ahora, voy a elevar el informe correspondiente al Consejo Federal, como se los detallé, y ellos serán los que determinarán los pasos a seguir. Vine hasta el hospital para acceder a un certificado médico para adjuntarlo al informe”, dijo Gómez.
Desde mucho antes de que el árbitro Gustavo Gómez, de Salta, tratara de dar por iniciado el encuentro, el clima que se vivía en el estadio de Villa 9 de Julio estaba enrarecido. Cuando alrededor de las 15.45 la delegación visitante llegó al estadio, fue hostigada por un grupo de simpatizantes “julianos”. Incluso el micro que la trasladaba sufrió la rotura de algunos de sus vidrios laterales.
Cuando a las 17.03 el árbitro intentó dar por iniciada la contienda, se observó cómo Montenegro, que se aprestaba a ocupar la valla que da espaldas a la tribuna popular norte, caía pesadamente al campo de juego, luego de un estallido. De inmediato sus compañeros y los auxiliares se acercaron al lugar para constatar el grado de la dolencia.
A partir de ese momento, se produjeron largas deliberaciones entre los protagonistas. Por un lado, los visitantes argumentaban que el arquero no estaba en condiciones de jugar, mientras que la gente de Sportivo consideraba que Montenegro estaba exagerando.
Luego de una espera más que prolongada, Gómez decidió que Montenegro fuera llevado a los camarines y que luego fuera trasladado hasta el Hospital Padilla para que se le realizaran los estudios correspondientes para tener un informe médico oficial al respecto.
Palabra autorizada
El propio árbitro y sus colaboradores acompañaron al golero al Hospital. Allí, LG Deportiva tuvo la chance de tener la versión de Gómez sobre la situación vivida.
“Se comprobó que cayó un petardo o bomba; no puedo determinar, en estos momentos, exactamente qué fue lo que cayó en las cercanías donde estaba el arquero. Por eso, como corresponde, cité a los médicos, que, son los únicos que podían certificar si el jugador estaba en condiciones físicas como para jugar. Como me dijeron que no estaba apto para disputar el encuentro, es que decidí suspender el cotejo. Ahora, voy a elevar el informe correspondiente al Consejo Federal, como se los detallé, y ellos serán los que determinarán los pasos a seguir. Vine hasta el hospital para acceder a un certificado médico para adjuntarlo al informe”, dijo Gómez.
Temas
Club Sportivo Guzmán
Lo más popular
