11 Julio 2016
CRISTINA FERNÁNDEZ. La ex presidenta sale del departamento de Recoleta; Lázaro Báez le pagaba las expensas de esa propiedad. ARCHIVO
Lázaro Báez le pagó a Cristina Fernández las expensas y otros servicios del departamento de Juncal y Uruguay, en el barrio de Recoleta, y lo hizo en negro, sin dejarlo asentado en la contabilidad de Austral Construcciones, según un informe difundido en el programa la Cornisa, que se emite por la señal televisiva América TV.
El conductor del cliclo, el periodista Luis Majul, anunció que ya la dio a conocer la identidad de su fuente a la fiscalía de Guillermo Marijuán, por expresa autorización de la misma.
Para corroborar los datos, se citó un correo de un empleado de Austral Construcciones, con fecha 30 de noviembre de 2012, en el cual el subordinado le sugiere a Lázaro Báez que debía cambiarse la titularidad de quienes iban a pagar las expensas y los servicios del departamento de la exjefa de Estado.
Hasta ese momento, según el correo electrónico, figuraba como titular de las cuentas a pagar un contador llamado Mario Delgado.
Pero Delgado no era ni inquilino ni dueño del departamento donde Cristina Fernández bailó el día que tuvo que ir a declarar y presidió un acto frente a los tribunales de Comodoro Py.
Según fuentes muy seguras que trabajaron hasta hace poco en las oficinas de Austral, ubicadas en el pasaje Carabelas 241 de la ciudad de Buenos Aires, quien ocupaba el departamento de Cristina, en ese momento, era el su secretario privado, Daniel Alvarez.
En su respuesta al correo, Báez se refirió a Cristina Fernández como "la doctora", y pareció estar de acuerdo en reemplazar a Mario Delgado por otro empleado de su empresa, llamado José Sofo, a quien se le adjudica haber comprado bolsos y valijas en marroquinerías de la zona y haber entregado sobres, entre otros, al hijo de un exministro que hoy está siendo investigado.
Sofo sigue trabajando con Báez y es uno de los pocos que lo visita en el establecimiento penitenciario de máxima seguridad de Ezeiza.
La existencia de una doble contabilidad en la administración de las propiedades que el contratista patagónico posee en la ciudad de Buenos Aires y también en la provincia de Buenos Aires siempre fue un secreto a voces en las oficinas del pasaje Carabelas.
Para tratar de poner cierto orden a ese desaguisado administrativo y borrar todas las "huellas", Báez encomendó a Liliana Martha Costa que se hiciera cargo y se instalara en el quinto piso. En una entrevista con Perfil, Costa no negó ni desmintió que Lázaro Báez fuera el padre de su pequeña hija de cuatro años.
Liliana Costa trabajó en la AFIP hasta diciembre del año pasado en áreas desde donde debía controlar a investigar a Baéz, como uno de los grandes contribuyentes de la Argentina. Liliana Costa vive ahora en uno de los departamentos del edificio del barrio de Coghlan que también es propiedad de Austral Construcciones.
En los registros de visita a la cárcel Lilliana Costa aparece por lo menos una vez, el último 25 de mayo de este año.
Daniel Alvarez, exsecretario privado de Cristina, en algún momento tuvo la fantasía de transformarse en candidato a intendente de Río Gallegos e incluso a gobernador, con el apoyo logístico y económico del mismo Lázaro Báez. (Télam)
El conductor del cliclo, el periodista Luis Majul, anunció que ya la dio a conocer la identidad de su fuente a la fiscalía de Guillermo Marijuán, por expresa autorización de la misma.
Para corroborar los datos, se citó un correo de un empleado de Austral Construcciones, con fecha 30 de noviembre de 2012, en el cual el subordinado le sugiere a Lázaro Báez que debía cambiarse la titularidad de quienes iban a pagar las expensas y los servicios del departamento de la exjefa de Estado.
Hasta ese momento, según el correo electrónico, figuraba como titular de las cuentas a pagar un contador llamado Mario Delgado.
Pero Delgado no era ni inquilino ni dueño del departamento donde Cristina Fernández bailó el día que tuvo que ir a declarar y presidió un acto frente a los tribunales de Comodoro Py.
Según fuentes muy seguras que trabajaron hasta hace poco en las oficinas de Austral, ubicadas en el pasaje Carabelas 241 de la ciudad de Buenos Aires, quien ocupaba el departamento de Cristina, en ese momento, era el su secretario privado, Daniel Alvarez.
En su respuesta al correo, Báez se refirió a Cristina Fernández como "la doctora", y pareció estar de acuerdo en reemplazar a Mario Delgado por otro empleado de su empresa, llamado José Sofo, a quien se le adjudica haber comprado bolsos y valijas en marroquinerías de la zona y haber entregado sobres, entre otros, al hijo de un exministro que hoy está siendo investigado.
Sofo sigue trabajando con Báez y es uno de los pocos que lo visita en el establecimiento penitenciario de máxima seguridad de Ezeiza.
La existencia de una doble contabilidad en la administración de las propiedades que el contratista patagónico posee en la ciudad de Buenos Aires y también en la provincia de Buenos Aires siempre fue un secreto a voces en las oficinas del pasaje Carabelas.
Para tratar de poner cierto orden a ese desaguisado administrativo y borrar todas las "huellas", Báez encomendó a Liliana Martha Costa que se hiciera cargo y se instalara en el quinto piso. En una entrevista con Perfil, Costa no negó ni desmintió que Lázaro Báez fuera el padre de su pequeña hija de cuatro años.
Liliana Costa trabajó en la AFIP hasta diciembre del año pasado en áreas desde donde debía controlar a investigar a Baéz, como uno de los grandes contribuyentes de la Argentina. Liliana Costa vive ahora en uno de los departamentos del edificio del barrio de Coghlan que también es propiedad de Austral Construcciones.
En los registros de visita a la cárcel Lilliana Costa aparece por lo menos una vez, el último 25 de mayo de este año.
Daniel Alvarez, exsecretario privado de Cristina, en algún momento tuvo la fantasía de transformarse en candidato a intendente de Río Gallegos e incluso a gobernador, con el apoyo logístico y económico del mismo Lázaro Báez. (Télam)