17 Agosto 2016
¡ESTAMOS EN LA FINAL! El “Hacha” Gonzalo Peillat (2), autor de tres goles, festeja con Manuel Brunet y Lucas Rossi (27). REUTERS
RÍO DE JANEIRO.- “Es un sueño haber jugado de la manera en que jugamos. Tener tres córners y marcar tres goles es algo increíble”, dijo “El Hacha” Gonzalo Peillat tras el 5 a 2 sobre Alemania, un resultado que llevó al equipo argentino del hockey sobre césped por primera vez a una final olímpica. El rival será Bélgica, mañana. Peillat convirtió tres tantos y los otros dos: Joaquín Menini y Lucas Vila. Descontaron Moritz Fürste y Christopher Ruhr.
Los Leones lograron una hazaña inolvidable. El estadio de Deodoro fue testigo de una jornada que quedará en el recuerdo del deporte argentino. Ante la poderosa Alemania, campeona de los dos últimos Juegos, el equipo conducido por Carlos Retegui cumplió una actuación mágica para dar el gran golpe del torneo.
En medio de tanta alegría, la única mala noticia para Argentina fue la lesión de Matías Paredes, que se perderá la final por una fractura del quinto metatarsiano del pie.
El acceso a la final es un resultado que hasta hace pocos años hubiera sido impensado para el hockey masculino, habitualmente a la sombra de Las Leonas. Sin embargo, el equipo ha venido mostrando una acelerada evolución y logró el bronce en el Mundial de 2014.
Eliminadas las mujeres por Holanda, parece haber llegado ahora el tiempo de Los Leones, que hicieron honor a su apodo devorando a una Alemania que quedó en estado de shock ante la voracidad, la contundencia y el hambre de triunfo de los argentinos. Fue una exhibición de principio a final, en un estadio pintado mayormente de celeste y blanco que rugió ante cada gol y vivió una gran fiesta.
A través de su gran arma en Río, el córner corto, y de su letal ejecutor, Peillat, Argentina encajó a Alemania dos duros golpes en los primeros minutos de juego. El 3-0 del primer tiempo invitaba a soñar, y pese a que los europeos intentaron recuperarse, Argentina no cedió a la presión: siguió con la máquina plenamente aceitada en la segunda parte y se puso 5-0.
La reacción alemana, en los minutos finales, no cambió una historia que ya estaba escrita. El final llegó con llanto y locura, además de un nuevo (y tremendo) objetivo: colgarse mañana una inimaginable medalla de oro. (Especial-DPA)
RÍO DE JANEIRO.- “Nos pusimos en la cabeza que teníamos que jugar ocho partidos y lo logramos”, destacó Carlos “Chapa” Retegui, entrenador del seleccionado nacional masculino. Los Leones llegaron a su primera final olímpica al golear a Alemania, bicampeón olímpico. “Es algo que soñamos, creímos y concretamos. ¡Vapuleamos a Alemania, doble campeón olímpico!” expresó exultante el técnico bonaerense, una vez que el partido en el complejo del Deodoro ya era un excelente recuerdo, quizás el mejor en la historia de la disciplina. “Sabíamos que no iba a ser fácil pero con trabajo, sacrificio y esfuerzo todo se consigue”, agregó Retegui.
“La base de este equipo fue campeón mundial Junior (Rotterdam 2005), medalla de bronce en Copa del Mundo (La Haya 2014) y tercer puesto en Champions Trophy (Rotterdam 2008) y ahora, finalista olímpico. Pongámosla en el lugar que se merece. No íbamos a ganar este partido ni con garra ni con huevos, hablando mal y pronto. Lo íbamos a ganar jugando al hockey desde todos lados. Los chicos lo hicieron y hoy estoy disfrutando gracias a estas bestias que tengo como jugadores”, concluyó “El Chapa”. (Télam-DPA)
Los Leones lograron una hazaña inolvidable. El estadio de Deodoro fue testigo de una jornada que quedará en el recuerdo del deporte argentino. Ante la poderosa Alemania, campeona de los dos últimos Juegos, el equipo conducido por Carlos Retegui cumplió una actuación mágica para dar el gran golpe del torneo.
En medio de tanta alegría, la única mala noticia para Argentina fue la lesión de Matías Paredes, que se perderá la final por una fractura del quinto metatarsiano del pie.
El acceso a la final es un resultado que hasta hace pocos años hubiera sido impensado para el hockey masculino, habitualmente a la sombra de Las Leonas. Sin embargo, el equipo ha venido mostrando una acelerada evolución y logró el bronce en el Mundial de 2014.
Eliminadas las mujeres por Holanda, parece haber llegado ahora el tiempo de Los Leones, que hicieron honor a su apodo devorando a una Alemania que quedó en estado de shock ante la voracidad, la contundencia y el hambre de triunfo de los argentinos. Fue una exhibición de principio a final, en un estadio pintado mayormente de celeste y blanco que rugió ante cada gol y vivió una gran fiesta.
A través de su gran arma en Río, el córner corto, y de su letal ejecutor, Peillat, Argentina encajó a Alemania dos duros golpes en los primeros minutos de juego. El 3-0 del primer tiempo invitaba a soñar, y pese a que los europeos intentaron recuperarse, Argentina no cedió a la presión: siguió con la máquina plenamente aceitada en la segunda parte y se puso 5-0.
La reacción alemana, en los minutos finales, no cambió una historia que ya estaba escrita. El final llegó con llanto y locura, además de un nuevo (y tremendo) objetivo: colgarse mañana una inimaginable medalla de oro. (Especial-DPA)
RÍO DE JANEIRO.- “Nos pusimos en la cabeza que teníamos que jugar ocho partidos y lo logramos”, destacó Carlos “Chapa” Retegui, entrenador del seleccionado nacional masculino. Los Leones llegaron a su primera final olímpica al golear a Alemania, bicampeón olímpico. “Es algo que soñamos, creímos y concretamos. ¡Vapuleamos a Alemania, doble campeón olímpico!” expresó exultante el técnico bonaerense, una vez que el partido en el complejo del Deodoro ya era un excelente recuerdo, quizás el mejor en la historia de la disciplina. “Sabíamos que no iba a ser fácil pero con trabajo, sacrificio y esfuerzo todo se consigue”, agregó Retegui.
“La base de este equipo fue campeón mundial Junior (Rotterdam 2005), medalla de bronce en Copa del Mundo (La Haya 2014) y tercer puesto en Champions Trophy (Rotterdam 2008) y ahora, finalista olímpico. Pongámosla en el lugar que se merece. No íbamos a ganar este partido ni con garra ni con huevos, hablando mal y pronto. Lo íbamos a ganar jugando al hockey desde todos lados. Los chicos lo hicieron y hoy estoy disfrutando gracias a estas bestias que tengo como jugadores”, concluyó “El Chapa”. (Télam-DPA)
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