La preocupación de Francisco por el caso del cura Viroche

En la marcha que se hizo en la Plaza Independencia para pedir el esclarecimiento de la muerte del cura Juan Viroche estuvo el legislador porteño Gustavo Vera. Su presencia era todo un mensaje del vaticano, ya que se trata de uno de los mejores amigos y confidentes que tiene el papa Francisco.

En una charla con LA GACETA, Vera había informado que el sumo pontífice estaba al tanto de la muerte del sacerdote de La Florida y hasta contó que algunas personas cercanas al Papa lo conocían. Sin embargo, no comentó ninguna apreciación de Francisco sobre el caso “porque aún no habían podido hablar”.

En ese sentido, recién ayer se pudo tener más información sobre el seguimiento de la cúpula eclesial sobre este caso. “Hoy (por ayer) el Papa Francisco me dijo que sigue con dolor lo que le pasó a Juan y me aseguró que reza por él y por todo el pueblo tucumano”, informó el obispo de Añatuya, Melitón Chávez, a LA GACETA.

Chávez prefirió no realizar más declaraciones porque se encuentra en un momento de mucho dolor por la muerte de Viroche. Lo que compartían ambos era la vocación sacerdotal, pero también la lucha contra las drogas.

Antes de ser nombrado obispo de Añatuya, Chávez realizó denuncias similares a las de Viroche, pero en La Costanera. Se trata de una de las zonas más sensibles en cuanto a la venta de “paco”, por la cantidad de vendedores pero también por el número de jóvenes adictos. Sin ir más lejos, hace algunas semanas la Policía Federal atrapó allí al “Gordo Rogelio”, el vendedor más poderoso de la zona.