Elecciones en EE.UU: rally de candidatos por estados clave para romper el empate técnico

A 48 horas de los comicios del martes, Clinton y Trump buscaron garantizar la mayor participación posible en las urnas.

ARCHIVO LA GACETA ARCHIVO LA GACETA
07 Noviembre 2016
Los dos candidatos presidenciales de Estados Unidos, Hillary Clinton y Donald Trump, recorrieron frenéticamente, a sólo 48 horas de las elecciones, los estados clave para garantizar la mayor participación posible en las urnas el próximo martes y romper el empate técnico que pronostica el promedio de las encuestas.
Después de varios días de concentrarse en los estados sureños más disputados, principalmente Florida y Carolina del Norte, las dos campañas comenzaron ayer una ambiciosa hoja de ruta que llevó a Trump por cinco estados en 24 horas y a Clinton a otros tres.
Trump recorrió Iowa, Minnesota, Michigan, Pensilvania y Virginia, todos estados del norte del país. La gran sorpresa fue Minnesota, un distrito que no apoya un candidato presidencial republicano desde hace más de una generación.
Clinton, por su parte, decidió dedicar su día a Pensilvania, New Hampshire y Ohio, dos estados del noreste de Estados Unidos, según la agencia de noticias DPA.
Hoy, ambos volverán a tener una agenda abarrotada. Trump hará paradas y actos en cuatro estados -Florida, Carolina del Norte, Pensilvania y New Hamphsire-, mientras Clinton pasará por Carolina del Norte y Michigan y cerrará la campaña en Filadelfia, Pensilvania, junto al presidente Barack Obama, la primera dama Michelle Obama, su esposo y ex presidente Bill Clinton y su hija Chelsea Clinton.
Mientras hace meses que Trump hace campaña completamente solo, sin la presencia de otros reconocidos líderes republicanos, Clinton ha desplegado por todo el país a la primera línea del oficialismo.
Sin dar demasiados detalles, el principal estratega de la campaña demócrata, John Podesta, adelantó hoy a la cadena de noticias NBC que en las próximas 48 horas podrán especial énfasis en ganar nuevos apoyos en los estados de Nevada y Michigan.
Las últimas encuestas, según Podesta, pronostican un empate, en el primer caso, y una leve ventaja para la candidata, en el segundo. A nivel nacional, Clinton sigue primera, pero con una ventaja tan pequeña -1,4%- que podría ser analizada como un empate técnico, según el promedio de las últimas encuestas nacionales realizado por la página web especializada Real Clear Politics.
Pese a que la mayoría de los números favorecen a los demócratas, el tono de la campaña es, por momentos, dramático.
"Les tengo que pedir que vayan a votar el martes 8 de noviembre. Hablen con su familia, con sus amigos, con sus vecinos...si necesitan ayuda, pidan que alguien los alcance al centro de votación. No podemos equivocarnos, hay demasiado en juego", aseguró hoy una Clinton muy seria desde el atril de la iglesia Monte Airy en Filadelfia, Pensilvania, según ABC.
Poco antes de que la candidata hablara dentro de la iglesia, la directora de la campaña de Trump, Kellyanne Conway, acusó al oficialismo de estar detrás del presunto ataque que provocó la dramática evacuación de Trump del escenario por parte de agentes del Servicio Secreto en medio de un acto en Reno, en el estado de Nevado.
Los dos candidatos presidenciales de Estados Unidos, Hillary Clinton y Donald Trump, recorrieron frenéticamente, a sólo 48 horas de las elecciones, los estados clave para garantizar la mayor participación posible en las urnas el próximo martes y romper el empate técnico que pronostica el promedio de las encuestas.

Después de varios días de concentrarse en los estados sureños más disputados, principalmente Florida y Carolina del Norte, las dos campañas comenzaron ayer una ambiciosa hoja de ruta que llevó a Trump por cinco estados en 24 horas y a Clinton a otros tres.

Trump recorrió Iowa, Minnesota, Michigan, Pensilvania y Virginia, todos estados del norte del país. La gran sorpresa fue Minnesota, un distrito que no apoya un candidato presidencial republicano desde hace más de una generación.

Clinton, por su parte, decidió dedicar su día a Pensilvania, New Hampshire y Ohio, dos estados del noreste de Estados Unidos, según la agencia de noticias DPA.

Hoy, ambos volverán a tener una agenda abarrotada. Trump hará paradas y actos en cuatro estados -Florida, Carolina del Norte, Pensilvania y New Hamphsire-, mientras Clinton pasará por Carolina del Norte y Michigan y cerrará la campaña en Filadelfia, Pensilvania, junto al presidente Barack Obama, la primera dama Michelle Obama, su esposo y ex presidente Bill Clinton y su hija Chelsea Clinton.

Mientras hace meses que Trump hace campaña completamente solo, sin la presencia de otros reconocidos líderes republicanos, Clinton ha desplegado por todo el país a la primera línea del oficialismo.

Sin dar demasiados detalles, el principal estratega de la campaña demócrata, John Podesta, adelantó hoy a la cadena de noticias NBC que en las próximas 48 horas podrán especial énfasis en ganar nuevos apoyos en los estados de Nevada y Michigan.

Las últimas encuestas, según Podesta, pronostican un empate, en el primer caso, y una leve ventaja para la candidata, en el segundo. A nivel nacional, Clinton sigue primera, pero con una ventaja tan pequeña -1,4%- que podría ser analizada como un empate técnico, según el promedio de las últimas encuestas nacionales realizado por la página web especializada Real Clear Politics.

Pese a que la mayoría de los números favorecen a los demócratas, el tono de la campaña es, por momentos, dramático.

"Les tengo que pedir que vayan a votar el martes 8 de noviembre. Hablen con su familia, con sus amigos, con sus vecinos...si necesitan ayuda, pidan que alguien los alcance al centro de votación. No podemos equivocarnos, hay demasiado en juego", aseguró hoy una Clinton muy seria desde el atril de la iglesia Monte Airy en Filadelfia, Pensilvania, según ABC.

Poco antes de que la candidata hablara dentro de la iglesia, la directora de la campaña de Trump, Kellyanne Conway, acusó al oficialismo de estar detrás del presunto ataque que provocó la dramática evacuación de Trump del escenario por parte de agentes del Servicio Secreto en medio de un acto en Reno, en el estado de Nevado.

Comentarios