22 Noviembre 2016
BUENOS AIRES.- Diez días después de haber salido a la luz el supuesto hecho, el diputado nacional por Tucumán José Orellana fue denunciado ante la Justicia penal porteña por el delito de abuso sexual. El integrante del monobloque Primero Tucumán está acusado de haberse propasado con la asesora de una diputada en la Cámara de Diputados el viernes 11 de este mes, informó el diario "La Nación".
La diputada socialista Gabriela Troiano, para quien trabaja la víctima del presunto abuso, anticipó al diario porteño que en la sesión de mañana va a plantear una cuestión de privilegio en el recinto y va a reclamar la destitución del tucumano.
Si bien la denuncia se radicó ayer, en el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires, el presunto hecho ocurrió el viernes 11 de noviembre. En el medio, el ex intendente de Famaillá se defendió a través de una carta dirigida al presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó, en la que habló de una operación en su contra. Entre los argumentos esgrimidos en ese momento, manifestó que no se había realizado una denuncia formal en su contra. Hasta ayer.
El relato de la víctima
De acuerdo con la denuncia, a la que accedió el diario "La Nación", todo sucedió entre las 13 y las 14 de ese viernes 11, en el despacho de Orellana, en el 4° piso del anexo H, ubicado en Callao 86. Las oficinas de Orellana y de Troiano están pegadas. Los hechos se desencadenaron cuando, a pedido de un empleado de seguridad apostado en la planta baja, "Luz" (nombrada así para resguardar su intimidad) llamó a la puerta del despacho de Orellana para ver si había gente.
Bajo juramento, "Luz" declaró que el diputado estaba acompañado por un asesor, que los dejó solos para ir a atender, en la oficina de Troiano, la llamada telefónica del empleado de seguridad. En ese momento habría comenzado el supuesto acercamiento de Orellana. "¿Cómo andás, nena, tanto tiempo? Me contaron que no te la están haciendo pasar bien". La denunciante explicó que hacía referencia a una situación personal por la que ella atravesaba.
La mujer agregó que el parlamentario la tomó de las manos. "Vos necesitás a alguien que te quiera. Me encantás desde que te vi". La presunta víctima contó que intentó desviar la conversación hacia un tema de salud, porque ella padecía un problema con la insulina, y que después procuró salir de la oficina. "Bueno, dipu, me voy", relató "Luz". Entonces, siempre según la denuncia, Orellana la abrazó y comenzó a darle besos en el interior de su oreja izquierda, mientras le decía: "seguramente nadie te besó así, ¿no?". "Luz" declaró que en ese momento se soltó, le respondió: "no, claramente no", y salió del despacho.
"No pude hacer nada, todo me sorprendió, es como que no podía creer lo que estaba pasando", dijo "Luz", en su declaración.
La defensa
Aquel viernes 11 de noviembre, LA GACETA se contactó después de las 19 con el ex intendente de Famaillá. En aquella charla, había dicho que era imposible que fuera él y que estaba camino a Mar del Plata a recibir un premio. “Soy incapaz de pedirle algo a una mujer, ni a nadie, a cambio de algo. Lo aprendí en mi familia”, señaló Orellana. “Es imposible que sea yo”, reiteró y destacó: “es una versión sacada de todo contexto, no tengo empleada en Diputados ni conozco alguna empleada, ni sé de alguien que me haya hecho una denuncia por insinuarme; es una confusión, porque es imposible que haya ocurrido”.
Ante las consultas de "La Nación", el diputado negó la acusación y dio otra versión de los hechos. Aseguró que nunca se quedó a solas con "Luz" y que ni siquiera hubo un contacto físico que diera lugar a un malentendido. "Ella estaba peleando con un señor en planta baja y cuando subió, me avisó que había una señora buscándome, y yo le pregunté qué había pasado con ese señor, nada más", dijo el Orellana, y ofreció como testigo a un asesor de él, de nombre Javier, que presenció toda la escena, según el diputado. "Esta denuncia no tiene lógica, sospecho que hay una operación. Esto afecta mi honorabilidad", se quejó.
La diputada socialista Gabriela Troiano, para quien trabaja la víctima del presunto abuso, anticipó al diario porteño que en la sesión de mañana va a plantear una cuestión de privilegio en el recinto y va a reclamar la destitución del tucumano.
Si bien la denuncia se radicó ayer, en el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires, el presunto hecho ocurrió el viernes 11 de noviembre. En el medio, el ex intendente de Famaillá se defendió a través de una carta dirigida al presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó, en la que habló de una operación en su contra. Entre los argumentos esgrimidos en ese momento, manifestó que no se había realizado una denuncia formal en su contra. Hasta ayer.
El relato de la víctima
De acuerdo con la denuncia, a la que accedió el diario "La Nación", todo sucedió entre las 13 y las 14 de ese viernes 11, en el despacho de Orellana, en el 4° piso del anexo H, ubicado en Callao 86. Las oficinas de Orellana y de Troiano están pegadas. Los hechos se desencadenaron cuando, a pedido de un empleado de seguridad apostado en la planta baja, "Luz" (nombrada así para resguardar su intimidad) llamó a la puerta del despacho de Orellana para ver si había gente.
Bajo juramento, "Luz" declaró que el diputado estaba acompañado por un asesor, que los dejó solos para ir a atender, en la oficina de Troiano, la llamada telefónica del empleado de seguridad. En ese momento habría comenzado el supuesto acercamiento de Orellana. "¿Cómo andás, nena, tanto tiempo? Me contaron que no te la están haciendo pasar bien". La denunciante explicó que hacía referencia a una situación personal por la que ella atravesaba.
La mujer agregó que el parlamentario la tomó de las manos. "Vos necesitás a alguien que te quiera. Me encantás desde que te vi". La presunta víctima contó que intentó desviar la conversación hacia un tema de salud, porque ella padecía un problema con la insulina, y que después procuró salir de la oficina. "Bueno, dipu, me voy", relató "Luz". Entonces, siempre según la denuncia, Orellana la abrazó y comenzó a darle besos en el interior de su oreja izquierda, mientras le decía: "seguramente nadie te besó así, ¿no?". "Luz" declaró que en ese momento se soltó, le respondió: "no, claramente no", y salió del despacho.
"No pude hacer nada, todo me sorprendió, es como que no podía creer lo que estaba pasando", dijo "Luz", en su declaración.
La defensa
Aquel viernes 11 de noviembre, LA GACETA se contactó después de las 19 con el ex intendente de Famaillá. En aquella charla, había dicho que era imposible que fuera él y que estaba camino a Mar del Plata a recibir un premio. “Soy incapaz de pedirle algo a una mujer, ni a nadie, a cambio de algo. Lo aprendí en mi familia”, señaló Orellana. “Es imposible que sea yo”, reiteró y destacó: “es una versión sacada de todo contexto, no tengo empleada en Diputados ni conozco alguna empleada, ni sé de alguien que me haya hecho una denuncia por insinuarme; es una confusión, porque es imposible que haya ocurrido”.
Ante las consultas de "La Nación", el diputado negó la acusación y dio otra versión de los hechos. Aseguró que nunca se quedó a solas con "Luz" y que ni siquiera hubo un contacto físico que diera lugar a un malentendido. "Ella estaba peleando con un señor en planta baja y cuando subió, me avisó que había una señora buscándome, y yo le pregunté qué había pasado con ese señor, nada más", dijo el Orellana, y ofreció como testigo a un asesor de él, de nombre Javier, que presenció toda la escena, según el diputado. "Esta denuncia no tiene lógica, sospecho que hay una operación. Esto afecta mi honorabilidad", se quejó.
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