El acto central por la Memoria concentró a todos los organismos

“Memoria, verdad y justicia. 30.000 detenidos desaparecidos ¡Presentes!”. Como un mantra, esas frases se replicaron en las miles de voces que se congregaron anoche en la plaza Independencia. Por el Día de la Memoria y a 41 años del Golpe, una multitud repudió la dictadura militar “más brutal” y las políticas del Gobierno de Mauricio Macri. Por primera vez en nueve años, los organismos de derechos humanos y la mayoría de las agrupaciones sociales, políticas, estudiantiles y sindicales alimentaron una sola columna. La fila, que partió pasadas las 19.30 desde la ex Jefatura de Policía, se extendió a lo largo de una docena de cuadras.

En los alrededores de la plaza, permanecían otros partidos, como Libres del Sur, el Partido Obrero, el MUP y sectores del radicalismo que marcharon por su cuenta.

Los organizadores de la convocatoria principal estimaron que hubo 10.000 personas. Fuentes policiales, consignaron que fueron más de 8.000 los asistentes.

Los organismos de derechos humanos encabezaron la manifestación. Tras una bandera argentina y otra que llevaba impreso el lema de la convocatoria (“Son 30.000, ¡fue genocidio!”), se observó un sinfín de rostros en blanco y negro de detenidos desaparecidos. Sus familiares llevaban las imágenes impresas en cartulinas, colgadas sobre el pecho o en pequeñas fotografías.

Entre la multitud, sobresalieron caricaturas del Presidente y del ex jefe del Ejército, César Milani (hoy detenido por causas de lesa humanidad). También hubo fotos de las militantes Natalia Ariñez, Marianella Triunfetti y Alejandra Wurschmidt (las dos primeras integraban Hijos) que murieron en un accidente en diciembre. Silvia Sandoval, madre de Ariñez, estuvo a la cabeza de la marcha. “Es la marcha más grande de los últimos años. Es la primera sin Natalia. Esta marcha unificada es el mejor homenaje a su memoria”, afirmó emocionada Carolina Frangoulis, de Hijos.

Frangoulis leyó el documento, que contó con la adhesión de 75 agrupaciones. Reivindicó la lucha de los organismos y advirtió que “el genocidio” comenzó en la provincia con el Operativo Independencia. Denunció la “ofensiva” del Gobierno macrista contra las llamadas políticas de memoria, verdad y justicia. “El propio estado quiere instalar la teoría de los dos demonios. Es retroceder décadas”, afirmó. Enumeró el desfinanciamiento de programas, el cuestionamiento del número de desaparecidos y “presiones” a la Justicia para que dicte domiciliarias a condenados. Pidió cárcel común, perpetua y efectiva para los represores y el juzgamiento de los “cómplices civiles”. Afirmaron que en la Nación hay funcionarios ligados con la dictadura.

También rechazaron las políticas de “ajuste”, a las que equipararon con las del Gobierno militar. Apoyaron la lucha docente y los paros de la CTA y CGT. Pidieron juicio y castigo a Milani y libertad para Milagro Sala, entre otros puntos.