“La Balsa” cumple medio siglo desde su grabación

Fue una creación conjunta entre Litto Nebbia y “Tanguito”, y representaba el sentir de toda una generaciónen la Argentina

LOS GATOS EN 1967. El conjunto, que integraba Litto Nebbia, incluyó en su primer álbum “La Balsa”. El disco vendió unas 200.000 copias.  LOS GATOS EN 1967. El conjunto, que integraba Litto Nebbia, incluyó en su primer álbum “La Balsa”. El disco vendió unas 200.000 copias.
19 Junio 2017

Compuesta en pocos minutos, casi en secreto y durante la madrugada en el baño de un bar de Buenos Aires, “La Balsa” cumple hoy medio siglo de su grabación, que inauguró el llamado rock nacional, consigna la agencia DPA.

“Se me ocurrió el comienzo de una canción pero no sé cómo seguirla”, le dijo una vez José Alberto Iglesias, conocido como “Tanguito” o “Ramsés VII” a Félix “Litto” Nebbia en “La Perla del Once”, uno de los pocos bares de Buenos Aires que en 1967 permanecía abierto todo el día.

Publicidad

La primera frase de aquella canción que “Tanguito”, de 21 años, presentó a Nebbia, de 19, decía con angustia: “Estoy muy solo y triste acá en este mundo de mierda”. Nebbia e Iglesias fueron al baño del bar casi de forma clandestina, porque conocían que en “La Perla” estaba prohibido tocar la guitarra y cantar.

“Me pasó la guitarra y ahí mismo hice la canción así como es”, relató Nebbia, con sencillez, en diferentes oportunidades. No sólo continuó la composición, sino que le modificó la palabra “mierda” por “abandonado”.

Publicidad

“Estoy muy solo y triste acá en este mundo abandonado/ tengo una idea, es la de irme al lugar que yo más quiera/ me falta algo para ir pues caminando yo no puedo/ construiré una balsa y me iré a naufragar”, fue la primera estrofa de la canción.

“La Cueva”

Nebbia había llegado a Buenos Aires desde Rosario. Era cantante de Los Gatos, uno de los pocos grupos que, influenciados por Los Beatles y Los Rolling Stones, recorrían todos los lugares posibles en los que pudieran actuar a cambio de algo de dinero. Uno de ellos, acaso el principal, era “La Cueva”, que como “The Cavern” de Liverpool se transformó en un sitio mítico.

“La Cueva” estaba ubicada a poco más de 1,5 kilómetros en línea recta de “La Perla”, hacia donde Nebbia y “Tanguito” y otros músicos caminaban cada madrugada para desayunar y terminar su día alrededor de las 8. Algunos de esos jóvenes, unos pocos, componían y cantaban en español; la mayoría lo hacía en inglés.

Algo similar ocurría en otros países latinoamericanos. A mediados de los 60 habían llegado a Buenos Aires desde Uruguay Los Shakers. Tocaban rock vestidos de traje y corbata y peinados con flequillo. Los hermanos Hugo y Osvaldo Fattoruso, Roberto Capobianco y Carlos Vila eran “los Beatles sudamericanos” y convocaban multitudes, pero cantaban en inglés.

“Impactados por la ‘beatlemanía’, varios muchachos asumieron la necesidad de ir más allá, de asomarse para decir lo suyo en su propio idioma”, afirma el periodista Miguel Grinberg en su libro “La generación V. La insurrección contracultural de los años 60”.

“Pasaban muchas cosas en el mundo con nuestra generación y era el momento de expresar: ‘Yo tengo algo para decir distinto frente a la vida’. Así apareció ‘La Balsa’ con una temática eterna, que es la libertad”, expresó Nebbia tiempo atrás.

Naufragar

“Tengo que conseguir mucha madera/ tengo que conseguir de donde pueda/ y cuando mi balsa esté lista partiré hacia la locura/ con mi balsa yo me iré a naufragar”.

“Naufragar” era, para Nebbia, “Tanguito” y los otros jóvenes de la época, vagar sin rumbo, tocar música y conversar sobre el devenir del mundo entre el surgimiento del hippismo, la revolución cubana, el “Nuevo Periodismo” y el inminente “Mayo francés”.

En 1967 Los Gatos grabaron su primer álbum, que tenía como canción principal “La Balsa” y que vendió 200.000 copias. El grupo estaba conformado por Nebbia (voz), Ciro Fogliatta (piano eléctrico), Alfredo Toth (bajo), Oscar Moro (batería) y Kay Galiffi (guitarra).

“La Balsa” representó el sentir de una generación en Argentina. Quedó registrada bajo la autoría de Nebbia e Iglesias, que allí utilizó el seudónimo “Ramsés VII”.

Diferentes rumbos

Los Gatos decidieron separarse en 1970. Nebbia inició su carrera solista, que prosigue hasta hoy. Además, es productor discográfico. El resto conformó diferentes bandas, algunas de ellas emblemas del rock argentino.

“Tanguito” también logró algunos éxitos musicales en la época, entre ellos “Amor de primavera”. En los años siguientes a “La Balsa” sufrió una adicción a las drogas, pasó algún tiempo en prisión e internado en institutos psiquiátricos.

El 19 de mayo de 1972, casi un lustro después de la grabación de “La Balsa”, “Tanguito” murió, a los 26 años, en las vías de un ferrocarril en Buenos Aires. La Policía dijo que la causa del fallecimiento fue la caída desde un tren. Sus amigos abrieron la sospecha de que todo se hubiera tratado de un homicidio.

“La Perla”, el bar donde comenzó todo, “la cuna del rock nacional”, como decía en una de sus marquesinas, cerró en febrero pasado como cafetería y se convirtió en un restaurante.

Temas Litto Nebbia
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios