El azúcar y los medios de comunicación

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La actual zafra azucarera está atravesando la última tercera parte de producción en la provincia, con toda su logística de cosecha y molienda a pleno en sus 15 ingenios, produciendo azúcar y alcohol para los mercados que actualmente necesitan de esos productos.

El comportamiento que se vino dando en el mercado azucarero esta campaña, puede decirse que está teniendo una estabilidad que hace mucho tiempo no se venía dando y con un futuro bastante bueno, por cuestiones macroeconómicas y por el trabajo que se viene realizando desde hace un tiempo atrás para lograr un equilibrio que satisfaga a todos los involucrados en la principal agroindustria tucumana.

La actual zafra empezó con precios relativamente satisfactorios para todos en lo que respeta a mercado interno, debido a un trabajo integrado que se hizo desde el mismo sector productivo acompañado por el estado provincial y nacional que trabajaron para lograr, a través de controles de molienda y retenciones de azúcar, alcanzar un mercado estable y que, por ende, el precio se mantenga equilibrado.

La campaña empezó con estimaciones de producción un poco más bajas que la anterior, por lo que se esperaba que el mercado este año tendría un comportamiento también estable y con tendencia a la suba del precio del producto. Además, esta campaña se presentó con algunas heladas, que también tiraron los números de producción un poco más abajo todavía.

Expectativas

Y ahora, cuando estamos en la pendiente final de la zafra, los precios del mercado están estables y podrían mantenerse así o, incluso, mejorar, siempre y cuando los factores que conforman la actividad azucarera cumplan con las disposiciones que surgen del Instituto de Promoción del Azúcar y el Alcohol (Ipaat,) conducido por la unión entre el sector privado y el estado provincial y de la Mesa Sucroalcoholera.

Los compromisos de mantener un mercado interno equilibrado, de cumplir con exportar los excedentes y suministrar alcohol a las petroleras para la mezcla con las naftas, de acuerdo a lo dispuesto por los órganos de control, son fundamentales para que la campaña continúe y finalice con normalidad y sin sobresaltos.

Es necesario que el sector cumpla con sacar los excedentes en tiempo y forma. También es importante que los ingenios del norte acompañen la decisión tomada por el Ipaat y por la Mesa, cómo también resulta importante que la Succa (Subsecretaría de Control Comercial Agropecuario) empieza a trabajar juntamente con las organizaciones que coordinan y controlan la zafra.

Consumo beneficioso

Pero también es muy importante trabajar en la forma de generar herramientas que permitan dar a conocer los beneficios de un consumo adecuado del azúcar, ya que solo se ve en los medios de comunicación locales, nacionales e internacionales la aparición de detractores que culpan solamente al azúcar de los graves problemas de obesidad que existe en la comunidad.

En estos días, el Concejo Deliberante de la ciudad de Córdoba aprobó una ordenanza que limita la provisión de azúcar en bares y restaurantes. De acuerdo con la medida, similar a la que regula el uso de la sal, los clientes que la requieran deberán pedirla a los mozos. La norma, que fue aprobada por unanimidad, plantea el “uso responsable del azúcar” y en su punto principal establece que el producto ya no estará disponible en las mesas. Además, obliga a los locales a exhibir en un lugar visible un cartel con la leyenda: “El consumo excesivo de azúcar es perjudicial para la salud”.

Además, plantea que el 10% de los productos que vendan las heladerías deben ser light o sin azúcar.

Lo real es que, para evitar esto, el Centro Azucarero Argentino (CAA) había pedido al Concejo que reconsiderara el proyecto. La entidad señaló que la iniciativa afecta en forma negativa a su producto y consideró que se le atribuye al azúcar una responsabilidad excesiva como causa de enfermedades multicausales.

El CAA afirma que la obesidad y el sobrepeso, como otras enfermedades crónicas no transmisibles, son de carácter multifactorial, resultado de múltiples causas. Por ende, ningún alimento o nutriente puede ser señalado como único causante.

Entre los factores concurrentes se incluyen el creciente sedentarismo y el consumo excesivo de alimentos de baja densidad nutricional.

Es por ello necesario que toda la actividad en su conjunto, y de acuerdo a lo tratado en la última reunión de la Mesa Sucroalcoholera, plantearse la necesidad de trabajar en comunicación, para que la sociedad conozca realmente cómo se debe usar el azúcar y, principalmente, dar a conocer los beneficios de su consumo.

Seguramente que trabajando en este tema servirá como una ayuda más para que el mercado azucarero siga estable en beneficio de toda la actividad azucarera nacional y regional.