BUENOS AIRES.- “Fueron duras estas 48 horas. La derrota aún duele, sobre todo la manera en la que se dio. En este tipo de casos el corazón sufre mucho más”. Clarito, Marcelo Gallardo, exteriorizó en rueda de prensa cómo pegó en el “Mundo River” la eliminación de Copa Libertadores a manos de Lanús. Pero sabe que la revancha está a la vuelta de la esquina.
Con la herida fresca, “Muñeco” pidió enfocarse en el Superclásico: “Tenemos la posibilidad de jugar un partido que nos permita aliviar el alma. Lo mejor que nos puede pasar es jugar el partido de mañana contra Boca”, aseguró el entrenador tratando de apaciguar el dolor de la eliminación. “La ilusión estaba depositaba en la Copa. Pero hay una cosa que tiene el fútbol, y es que te da la posibilidad a los pocos días de jugar un partido que representa muchísimo para los hinchas. Tenemos esa virtud de sobreponernos rápidamente, siempre ha sido así. Vamos a trabajar en eso, el mensaje es ganarle Boca. Vamos a jugar en nuestra cancha. No puede haber más estímulo que eso”, agregó.
El DT diferenció las sensaciones deportivas con las personales más allá de el dolor por una derrota. “No estoy golpeado. Las derrotas duelen pero yo estuve golpeado cuando murió mi mamá y tenía que enfrentar a Boca. Esto, para mí, es un dolor deportivo, un resultado que duele pero hasta ahí no más. Tenemos que mentalizarnos en ganar para cambiar el aire”, sentenció el técnico “Millonario”. (Especial)