La Armada admite que la situación del San Juan "es grave" y envían un minisubmarino de EEUU a buscarlo

A siete días del último contacto con el submarino ARA San Juan, la preocupación en la Armada es grande: lo que más preocupa es la cantidad de oxígeno disponible para los tripulantes. Existe el temor de que se estén agotando las reservas.

Una nueva señal reactivó las expectativas en el Atlántico Sur

El inmenso operativo que se despliega en el mar (participan naves, aviones y personal especializado de 10 países) es una lucha contrareloj, ya que se calcula que las reservas de oxígeno alcanzarían para una semana sin ser renovadas. Y justamente hoy se cumple ese plazo.

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“Es una preocupación permanente el tema del oxígeno porque se va haciendo crítico cada día que pasa, entonces esa es una preocupación y una de las hipótesis que venimos analizando", dijo Gabriel Galeazzi, comandante de la Agrupación de Buques Hidrográficos de la base naval de Mar del Plata, en una conferencia de prensa en la noche de ayer.

Un tucumano está al mando del submarino ARA San Juan

Se espera que el buque “Skandi Patagonia” llegue hoy a la zona de búsqueda con todo el material de última generación que aportó la Marina de Estados Unidos, detalló la agencia Reuters. Se trata de cuatro sondas no tripuladas para rastrear el fondo del mar y de una cápsula que permitirá rescatar a los tripulantes del submarino si es que la nave es hallada.

APOYO. Un niño coloca una bandera con mensajes para los tripulantes del San Juan en la base naval de Mar del Plata.

Además, en el transcurso de la jornada de hoy zarpará el buque de bandera noruega Sophie Siem con un minisubmarino de la Marina de EE.UU. a bordo para sumarse a la búsqueda.

El administrador del puerto de Comodoro Rivadavia, Fabio Cambareri, informó hoy a Télam que unos 60 hombres trabajan para adecuar la estructura de la popa del buque donde se instalará una rampa para facilitar el descenso del minisubmarino en alta mar.

También transportará robots dirigidos de manera remota, cámaras hiperbáricas para hacer el traspaso bajo presión de los submarinistas argentinos y campanas para evacuación bajo el agua.