El oficialismo tucumano propone la eliminación de los partidos vecinales (municipales y comunales) para achicar la oferta electoral y sacar de circulación a unas 690 agrupaciones. Así, la duda se posa ahora sobre la cantidad de fuerzas que estarán en condiciones de participar en los comicios de 2019, ya que al menos un tercio de los sellos no llega al piso de afiliados que le exige la ley para inscribirse.
Según datos de la Junta Electoral Provincial (JEP), de las 70 agrupaciones de índole provincial (aquellas que pueden presentar cualquier postulación, de gobernador hacia abajo), al menos 21 no alcanzan los 4.000 afiliados.
El artículo nueve de la Ley N° 5454 es tajante, y establece que el reconocimiento definitivo se obtiene al acreditar la afiliación de un número de electores no inferior al cuatro por mil (4%) del total de los inscriptos en el Registro de Electores del correspondiente distrito. No obstante, una vez reconocidos, la norma no les exige que deban mantener un mínimo de afiliados.
Entre las agrupaciones por debajo de ese piso aparecen algunas vinculadas a históricos referentes del peronismo, como el vicepresidente primero de la Legislatura, Juan Antonio Ruiz Olivares. Su acople Acción Regional registra 3.602 afiliados, según la JEP. También aparecen debajo de ese umbral Proyecto Popular (ligado a la legisladora Stella Maris Córdoba), Tucumán en Positivo (de la secretaria de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse) y el Partido de los Trabajadores (del secretario de Trabajo, Roberto Palina), entre otros.
En el caso del Código Electoral Nacional, en su artículo siete bis “a” determina que en los distritos con más de un millón de electores se requiere un mínimo de 4.000 afiliados, y en la esfera nacional sí es requisito mantener ese número. Lo curioso es que de las 25 agrupaciones registradas ante la Secretaría Electoral Nacional de Tucumán, al menos 15 tampoco llegan a los 4.000 inscriptos. El piso lo marca el massismo tucumano, que con su Frente Renovador Auténtico apenas llega a 2.044 afiliaciones, según consta en un informe del segundo semestre del año pasado.
La cantidad de afiliados por partido cobra dimensión a partir del inicio del proceso de reforma política. Ocurre que hay sectores del oficialismo que creen que por allí podrían incrementarse los requisitos a las agrupaciones, a fin de filtrar aún más la lista de posibles participantes en 2019 pero mantener vigente el sistema de acoples.
El miércoles, el gobernador, Juan Manzur, anunció a LA GACETA que el primer proyecto del oficialismo para avanzar con la reforma política consiste en una modificación de la ley Orgánica de Partidos Políticos. El cambio determina que para poder participar en una elección los partidos deben haber obtenido el reconocimiento jurídico 180 días antes, indica que los ciudadanos sólo pueden asociarse con fines políticos para actuar como partido provincial, elimina el capítulo referido a los partidos municipales y comunales y establece que se necesitan 1.500 adhesiones para obtener el reconocimiento definitivo (actualmente está en 400 adhesiones).
De esta manera, quedarían en pie 70 agrupaciones de índole provincial y otras 25 registradas ante la Justicia Federal (entre nacionales y de distrito). La nueva ley dejaría fuera de competencia a unos 285 partidos municipales, a una treintena de fuerzas comunales y a otras 380 expresiones vecinales que están en vías de formación.
En los comicios nacionales del año pasado, el padrón electoral alcanzó a 1.217.274 tucumanos, por lo que si se toma en cuenta la exigencia del cuatro por mil del padrón, la cifra exigida se elevaría a 4.800, aproximadamente.