La 24 de Septiembre al 500 se cubrió anoche de una nube de polvo. Parecía una escena propia de los grandes atentados que en el mundo ya están naturalizados. Con las partículas aún en suspensión, curiosos, vecinos, policías, bomberos, funcionarios, concejales y cuanto transeúnte pasaba por allí se agolparon alrededor de los escombros.
Ayudados por la luz de las pantallas de sus celulares empezaron a retirar bloques de cemento mientras oían gritos y temían lo peor. Pasada la medianoche, el derrumbe del ex cine-teatro Parravicini había ocasionado tres muertes. Se trata de transeúntes que pasaban por la vereda del ex cine en el momento en que se desplomó la fachada.
Tras la tragedia, el arzobispo de Tucumán, Carlos Alberto Sánchez, emitió un breve mensaje. "Como obispo de Tucumán suplico al Señor por las víctimas del dramático derrumbe del edificio y ruego a la Virgen de la Merced les dé paz, fortaleza y consuelo a los familiares, y pronta recuperación a los heridos", escribió.
Las víctimas
- María Cristina Sosa
- Miguel Morandini
- Víctor Hugo Aranda