A no preocuparse: “Tito” Noir pronto estará de vuelta en el "Decano"

El jugador estará al menos 10 días inactivo por un desgarro en su pierna izquierda.

EN RECUPERACIÓN. Ricardo Noir (derecha) hace un gesto de optimismo, mientras comparte trabajo de recuperación con Pier Barrios, otro lesionado del equipo. EN RECUPERACIÓN. Ricardo Noir (derecha) hace un gesto de optimismo, mientras comparte trabajo de recuperación con Pier Barrios, otro lesionado del equipo.
21 Septiembre 2018

“Me duele mucho el isquiotibial”, le dice Ricardo Noir a LG Deportiva. Lo mismo les dijo a los médicos de Atlético a los cinco minutos de comenzado el partido contra Gremio. Justo el partido (otra vez) más importante en la historia del club. El síntoma parecía tener un diagnóstico ineludible: un desgarro. Quizás por eso y sin conocimientos médicos académicos, sus compañeros notaron el dolor, escucharon sus palabras y empezaron a hacer señas al banco: “¡cambio! ¡Cambio!”, decían para acompañar a los gestos con los brazos. Algunas horas después, el diagnóstico exacto es: desgarro isquiofemoral de un centímetro en su pierna izquierda. ¿Importa ahora? Sí. Importa porque gracias a ese diagnóstico sabemos que estará, como mucho, 10 días inactivo y no 21 como suele pasar con los desgarros.

Pero volvamos en el tiempo a ese momento, que pareció ser crucial para el desarrollo del partido. La pelota estaba en campo de Atlético y se iba por el lateral próximo a la tribuna de calle Laprida. Esa donde se paran los hinchas que aplauden los desbordes y las barridas para quitar.

Más cercano a esto último estuvo la jugada de “Tito”. La pelota ya se iba y no parecía haber mucha diferencia si es que eso pasaba finalmente, pero el jugador corrió, se esforzó y la paró con la suela aunque ya estaba afuera. Ahí sintió el pinchazo y se dejó caer en los carteles.

Lo que siguió es historia conocida y parte de ella contada en las primeras líneas: médicos, pedido de cambio, ingreso de Gervasio Núñez, expulsión de Gervasio Núñez y dos dolorosos goles de Gremio.

Algunos supusieron que el jugador ya venía con dolores, que la jugada sólo fue el último empujón para la lesión, pero no. “No me molestaba para nada, fue esa pelota la que me lesionó”, confirma Noir. Quizás razonaron así para no sentir que todo se había desencadenado por esa sola jugada pero así fue. Y habrá que lidiar con ello. Así lo está haciendo “Tito”.

“Siempre que pienso que puedo llegar a una pelota, voy”, admite Noir. Pensó que llegaba y fue. Quizás no era tan intrascendente como se vio por televisión o aún en la cancha. O al menos no lo era en su cabeza cuando corrió. Quizás si llegaba a frenarla, iniciaba un ataque y se gestaba el primer gol “decano”. Nunca lo sabremos. Si sabemos que todo acabó mal para Atlético pero no solo por esa situación. Al menos así lo toma el entrerriano. “Son cosas que en un partido de fútbol pueden pasar y me pasó a mí. Ahora me tengo que recuperar bien y ya”, explica “Tito” dos días después de lo sucedido. Sin embargo, ese trayecto en el carrito que suele acarrear lesionados y malas noticias, lo transitó con lágrimas. “Me duele mucho”, repitió. Era de suponer. El músculo de la pierna y el más grande del cuerpo también, por quedarse afuera de ese partido.

Sus dos posturas son lógicas en él. Cualquier jugador de fútbol se lamentaría de salir de un partido así y nadie más que él sabe que aceptar que estas cosas pasan, es lo más sano. Tal vez porque ya lo ha vivido.

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