25 Septiembre 2018
A LA CANCHA. Acosta encabeza a Atlético en goles junto a Leandro Díaz (atrás suyo) y en la salida del equipo al campo de San Martín de San Juan. Luis Rodríguez completa el podio con cuatro goles. foto de agustín moya
Cuando se hace alusión a los 10 años que pasaron desde la última temporada de Atlético en el Federal A (2007/08), generalmente es para ponerlo a contraluz de su presente. Y vaya que vale la pena. Así lo hizo Mario Leito, inmediatamente después de que el equipo accedió a los cuartos de final de la Copa Libertadores, que actualmente se encuentra disputando (la serie está 0-2). “Y pensar que hace 10 años estábamos en tercera categoría”, remarcó. Hoy puede recordárselo por el liderato (aunque sea transitorio) de la Superliga. El “Decano” se ubica en los puestos más altos del fútbol argentino y el recuerdo de que lo construyó desde lo más bajo, sirve como referencia en muchísimos aspectos.
Uno de esos aspectos, no tan visibles como estar entre los ocho mejores de América o ser el líder del torneo local, es la cantidad de jugadores tucumanos que tiene. Atlético no solo se refundó como club a partir de esos seis años en el Federal A sino que logró hacerlo con varios jugadores locales.
No necesariamente son todos propiedad del club (es decir, de inferiores que igual los tiene en Tomás Cuello o Jonás Romero) pero el sentido de pertenencia de ellos con la institución, quieran o no, terminará siendo mucho más fuerte. Y eso, es un valor a destacar.
Gabriel Risso Patrón, Guillermo Acosta, Luis Rodríguez y Leandro Díaz se consolidaron en este año como titulares en el equipo de Ricardo Zielinski. Y no en cualquier equipo, sino en el que alcanzó los topes máximos futbolísiticos.
Que sean cuatro representa más de la tercera parte del equipo. Si tenemos en cuenta que el lateral izquierdo perdió algo de terreno en los últimos partidos, tres tampoco sería un número despreciable. Sobre todo si los tres que quedan, nos ayuda a mirar otro aspecto interesante que también sirve de referencia.
El “Pulguita”, el “Loco” y el “Bebé” son los actuales goleadores del equipo en la temporada. Cuatro para cada uno de los dos primeros y tres para el último. Todos repartidos entre las tres competencias: Superliga, Copa Argentina y Copa Libertadores.
¿Quién lo hubiese dicho? Hace 10 años estaba en el Federal A y ahora no solo está entre los mejores ocho de América, y entre los puestos más altos de la Superliga, sino que tiene varios tucumanos en el plantel ¡y tres de ellos son sus goleadores!
Rodríguez está en Atlético desde ese ascenso a la B Nacional en 2008 (llegó en 2006), solo pasó fuera de Tucumán seis meses, para estar en Newell’s. El “Bebé”, arribó proveniente de San Jorge en 2012. Leandro Díaz, -fanático confeso- llegó en 2014 y ascendió en 2015. Luego se fue y volvió este año.
Acosta, que además de hacer goles es un talismán para el equipo (leva 24 con la camiseta celeste y blanca en 22 partidos y en ninguno de ellos el equipo perdió) declaró lo siguiente luego del triunfo ante San Martín en San Juan, con otro tanto suyo: “Estar en la punta con algunos equipos grandes de la Argentina. Es lo máximo. Queremos salir del descenso y jugando así lo vamos a lograr”.
Justamente en esa declaración está parte de la clave de esta refundación del club: pensar en grande pero sin dejar de recordar lo que pasó o lo que puede pasar.
Atlético no arrancó el torneo con el objetivo de salir campeón como sí lo hicieron los equipos grandes con los que comparte los primeros lugares. El objetivo es salvarse del descenso. Sin embargo, a medida que pasen las fechas, si la ubicación se mantiene, podrá soñar y, quien sabe, mutar el objetivo.
Si Godoy Cruz peleó hasta la última fecha, ¿por qué no Atlético? Si lo hiciera, habría otro suceso para poner a contra luz de ese recuerdo en 2008.
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