Ischuk habló del presente de Atlético: “nada de esto es casualidad”

El arquero recordó los emotivos penales del ascenso de 2008.

UN TUCUMANO MÁS. Ischuk se radicó aquí cuando dejó el fútbol y se casó con Gisella Salomón, hija del “Turco”, otro ex arquero “decano”. En el medio, Tiziano UN TUCUMANO MÁS. Ischuk se radicó aquí cuando dejó el fútbol y se casó con Gisella Salomón, hija del “Turco”, otro ex arquero “decano”. En el medio, Tiziano LA GACETA/ DIEGO ARÁOZ
27 Septiembre 2018

Muchos afirman que la actualidad de Atlético empezó a cimentarse hace poco más de 10 años, en la infartante definición por penales ante Racing de Córdoba, mediante la cual logró el pasaje a la B Nacional. Lucas Ischuk tuvo un protagonismo decisivo aquella siesta del 15 de junio de 2008: no sólo atajó el cuarto penal -a Hernán Fernández-, sino que anotó el quinto para el “Decano”, con el cual se selló la salida de ese infierno, que era el viejo Argentino A.

Atlético significó mucho en la vida de Ischuk. Tanto que trascendió lo deportivo: se casó con Gisella (hija de Ricardo Salomón, ex arquero y ex entrenador de arqueros del “Decano”), con la cual tuvo dos hijos: Isolina (7 años) y Tiziano (3) -“los mejores premios que rescaté en la vida”, afirma-. Se radicó aquí y encaró un emprendimiento comercial y deportivo.

“Cuesta explicar con palabras lo que vivimos ese día. Fue algo único en mi carrera y lo recuerdo como tal. En ese momento no quería pensar. Me dio mucha confianza atajar el cuarto disparo de ellos. Si hubiese tenido la obligación de no errar habría pateado más presionado. Cuando Pablo Hernández acertó nuestro cuarto penal, pude relajarme y darle al equipo lo que necesitaba”, recordó el santafesino -de Santa Isabel- aquel emocionante ascenso y analizó el histórico presente del “Decano” durante una charla con LG Deportiva.

- ¿Cómo vivís este momento del club?

- Con gran satisfacción. Lo que se hizo hace una década sirvió para que Atlético se posicione entre las instituciones más importantes del país. No sólo progresó en lo deportivo; también creció enormemente en lo institucional. Nada de esto es casualidad. Es producto del trabajo mancomunado de todos los que se están en el club. La dirigencia trabajó bien y acertó en la contratación de los técnicos, que aportaron muchísimo. Se formaron grupos humanos que tiran para adelante. Cuando se juntan todos esos condimentos se puede conseguir lo que Atlético rescató en la última década. Ojalá se siga trabajando con esa humildad.

Se agranda en las difíciles

- ¿Cómo te sentís cuando ves a Atlético en la Libertadores?

- Uno, que tuvo la dicha de vestir esa camiseta, sabe lo que significa para el jugador estar en este tipo de competencia. Pensar que cuando se clasificó para la edición anterior, varios pensaron que era algo que no se iba a repetir; pero hoy vemos al equipo en cuartos de final, definiendo el certamen con los mejores equipos del continente. Si bien perdió contra Gremio, la campaña que está haciendo en la Superliga demuestra que ese resultado no lo afectó. Ir a Brasil 0-2 es complicado, pero Atlético se agranda en las difíciles.

- ¿Qué opinás del presente de Cristian Lucchetti?

- “Laucha” es un monstruo. ¿Cómo un arquero puede tener ese rendimiento a los 40 años? ¡Está mejor que cuando tenía 20! Es uno de uno de los grandes responsables de este presente.

- ¿Cuál fue la mayor alegría que viviste en el club?

- Viví muchas alegrías con Atlético, pero si debo elegir una me quedo con el ascenso a Primera logrado en 2009. Lo conseguimos en un Nacional B mucho más duro que el actual. Acaso no se lo haya valorado tanto porque logramos el objetivo con cuatro fechas antes del final. Era un equipazo.

- ¿Y la tristeza más grande?

- Me dolió mucho cuando perdimos la categoría la temporada siguiente. Pero lo que nos destrozó anímicamente fue el fracaso del año posterior cuando luego de una primera rueda magnifica nos desinflamos por completo en la parte final. Eso nos frustró mucho, porque teníamos material como para volver a ascender.

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