23 Octubre 2018
IMPOTENCIA. Sara, hermana de Valentín, expresa su bronca entre la multitud; mientras que su madre, Soledad Contreras, recibe el abrazo de un allegado. la gaceta / foto de diego aráoz
“Lo único que quiero saber es dónde están los asesinos de mi hijo. Pero aquí nadie me pudo responder”, expresó Soledad Contreras, quien llegó ayer a Yerba Buena, tras viajar toda la noche desde Cañada de Gómez, Santa Fe. “Ni siquiera pude despedir a mi hijo”, exclamó ante cientos de personas.
La mujer contó que había hablado con Valentín Villegas, de 15 años, durante la madrugada del domingo, en el inicio del Día de la Madre. “Estuvimos en contacto hasta las cinco de la mañana, hablando y enviándonos fotos. Lo último que me dijo fue: ‘mamá, te prometo que voy a ir. Al otro día lo mataron”, recordó.
Cubierta de lágrimas y empapada por la lluvia, Contreras rememoró los últimos momentos que compartió con el menor asesinado. En ese momento, más de 250 personas la acompañaban frente a la comisaría de calle San Martín, en la “Ciudad Jardín”.
“Enterré a mi hijo y a las 15.30 vine a la comisaría. No pudieron decirme nada. Les pregunté (a los policías), pero no me informaron nada. Lo único que vi fue un video en el que se veía que sacaban a una persona con capucha”, dijo.
Familiares, allegados, compañeros del colegio secundario y un gran cantidad de vecinos gritaron anoche el nombre de “Valentín” y pidieron “justicia”, tras el homicidio. Portaron carteles, prendieron velas y caminaron varias cuadras para expresar el dolor y el enojo vecinal por la inseguridad.
“Estamos cansados de la injusticia, de la inseguridad, de los jueces, de los fiscales, de pagar sueldo a gente inepta, y de la corrupción”, manifestó Consuelo, quien acompañaba con aplausos las quejas.
“Aquí en Yerba Buena, en Tafí Viejo, en todo Tucumán se padece la inseguridad. Todos los días muere gente de bien y el delincuente entra por una puerta y sale por la otra. Si hay una situación que nos sobrepasa, actualicemos y mejoremos las leyes, y no sigamos con normas de 1810”, agregó.
La marcha y los reclamos se instalaron también en la residencia del gobernador, Juan Manzur, cuyo frente permanecía a oscuras. Allí, los vecinos realzaron los cuestionamientos hacia el arco político, incluyendo a los intendentes de la provincia, en particular, hacia Mariano Campero, de Yerba Buena.
“Esto no es sólo por Valentín, es por todos”, dijo, frente a la intendencia local, Santiago Villegas, padre del adolescente. “Esto no tiene nada que ver con política. Todos los lunes reclamaremos; todos los lunes caminaremos. Por favor, no me dejen solo porque yo no dejaré solo a ninguno de ustedes”, enfatizó.
En el cierre de la protesta se anunció que el jueves se realizaría una nueva movilización.
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