EN ESCENA
• A las 22, en La Sodería (Juan Posse 1.141).
“Siempre invito a mis talleres a todas las personas interesadas en el movimiento, y a las personas curiosas. No hace falta tener formación en danza. Lo importante es ser curioso; querer explorar en uno mismo el movimiento. Es una iniciación en el camino de descubrir el potencial que todos tenemos y a través del movimiento”.
Gisela Fantacuzzi es performer, investigadora, coreógrafa y enseñante certificada del Método Feldenkrais. Dictó el taller “El cuerpo atravesado” previo a su presentación de esta noche en La Sodería, con el espectáculo “Todo lo que se extiende en el aire”.
Esta es la tercera vez que la artista argentina radicada en Italia se presenta en la provincia, pero por primera vez ofreció el workshop donde utiliza el Método Feldenkrais “para empezar a trabajar una conciencia corporal y después hacia la improvisación del movimiento”.
El Método es un proceso de aprendizaje, que permite desarrollar la conciencia y la inteligencia del cuerpo al moverse. Se basa en la capacidad de aprendizaje del sistema nervioso y en la toma de conciencia del cuerpo en movimiento para descubrir nuevas opciones al movernos y adaptarnos mejor al entorno en el que vivimos y trabajamos.
Performance
Fantacuzzi es la creadora, directora y performer de una puesta escénica que se resiste a ser clasificada dentro de un género específico.
La autora explica por qué: “este trabajo siempre es una búsqueda”. “Quizá pueda llamarse puesta, performance o teatro danza; esto último está más cerca por mi formación -reconoce-. Es un trabajo que empecé a investigar sola hace dos años, a partir de momentos trascendentes en mi vida. Empecé a escribir, a probar cosas y todo esto empezó a generar imágenes de video. Son marcas que quedaron en mi cuerpo y que quise manifestar como punto de partida de mi trabajo. Más tarde aparecieron textos de Marcel Proust, en los que nos apoyamos para clarificar el trabajo. Todavía estamos en proceso; aún no está terminado, estamos tratando de definirlo”.
Fantacuzzi ideó la dramaturgia junto al actor italiano Giandomenico Sale, que también interviene en escena. Hay una videoproyección de la artista italiana Francesca Saraullo. La música, Fragmentos de un sueño florido #3, #4 y #9, es del compositor Hernán Vivies.