La Sala III ordenó ayer el traslado al penal de Villa Urquiza de los cuatro condenados por encubrimiento del homicidio de Paulina Lebbos. Hugo Sánchez, Nicolás Barrera, Héctor Rubén Brito y Eduardo Di Lella, los tres primeros, ex funcionarios jerárquicos de la Policía, y el ex secretario de Seguridad, dejarán así sus lugares de arresto en los próximos días, tras completar con varios exámenes de rigor.
El Tribunal ordenó hace tres semanas la prisión preventiva para los cuatro ex funcionarios, medida que se extenderá por un lapso de un año o hasta que el fallo del juicio penal quede firme. Di Lella permanecía en la sede de Bomberos de la fuerza de seguridad; mientras que Sánchez, ex jefe de la Policía, sigue en una delegación de la Policía Federal (PFA). Barrera y Brito, ex subjefe de la fuerza local y jefe de la Unidad Regional Norte (URN), están alojados en el edificio de la división Comando Radioeléctrico.
Di Lella y Sánchez fueron condenados a seis años de prisión por los delitos de encubrimiento, en concurso ideal con la falsificación ideológica de instrumento público. A ello se suma la inhabilitación especial para el ejercicio de cargos públicos por 10 años.
La pena de Barrera fue de cinco años y seis meses de cárcel por los mismos ilícitos, y la imposibilidad de ocupar puestos en la estructura del Estado provincial durante nueve años. El ex jefe de la URN ha sido condenado a cinco años prisión e inhabilitación por ocho años.
Internación de Di Lella
En el mismo día, alrededor de las 19, el funcionario del área de seguridad durante el gobierno de José Alperovich sufrió un infarto y, por ello, fue internado de urgencia en un sanatorio privado del centro de la capital.
“No venía sintiéndose bien. Venía aguantando para evitar que le achacaran una sobreactuación. Durante el juicio oral había tenido un par de episodios cardíacos”, expresó ayer el abogado defensor, Gustavo Morales.
El parte médico señaló que Di Lella, de 62 años, es un paciente “con factor de riesgo cardiovascular e hipertensión arterial”. El diagnóstico determinó “síndrome coronario agudo”, una afección originada por la disminución de la irrigación sanguínea al corazón.
Di Lella podría requerir internación en una unidad de cuidados intensivos, informó el letrado respecto del parte oficial. Un médico forense se presentó anoche en la clínica para confirmar la asistencia al ex secretario de Seguridad. La Sala III recibirá luego el informe oficial para definir si revisará o no la disposición de arresto.