BELMOPAN.- La evasión a la Justicia llegó a su fin. El empresario Alberto Samid fue detenido ayer por la Interpol en Belice, donde estaba prófugo. La confirmación fue brindada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
“En Belice, fue detenido por Interpol, Alberto Samid. Nuestra política es clara y transparente. Quienes tienen deudas con la Justicia, deben presentarse. Y nuestra política de colaboración internacional, nos permite al instante saber dónde están”, informó la funcionaria en su cuenta de Twitter.
Samid, autodenominado “Rey de la Carne”, había sido declarado hace dos días como prófugo por la Justicia, por lo se que libró, a través de Interpol, una orden de captura internacional. Debe comparecer ante el Tribunal Oral en lo Penal Económico, en un proceso oral y público, con eje en una causa iniciada hace 23 años, por presunta evasión fiscal y asociación ilícita.
Escalas intermedias
Dos efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA) partieron anoche a Belice para que, en caso de que se resuelva su expulsión, el detenido pueda ser traído rápidamente al país, apuntó Bullrich.
Precisamente, el jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Gerardo Milman, confió que Samid “podría ser expulsado” de Belice, que no tiene tratado de extradición con la Argentina.
Fuentes del Ministerio de Seguridad indicaron que el empresario de la carne salió ilegalmente del país hacia Paraguay, desde donde se habría trasladado a Panamá, para recalar finalmente en Belice.
Las primeras informaciones sobre la detención de Samid se conocieron en la mañana de ayer, cuando trascendió que medios de ese país consignaban que el dirigente justicialista había sido apresado.
“Edad avanzada”
Dueño de una cadena de carnicerías con fuerte presencia en el Conurbano bonaerense, el dirigente justicialista había sido calificado como un individuo “violento” en el documento que hizo circular Interpol. En esa comunicación se advertía que, a pesar de su “edad avanzada”, mantenía “su oposición a cumplir con las órdenes de la autoridad pública”.
“El buscado formaba parte de la cúpula de una organización delictiva, siendo Samid uno de los elementos más preponderantes de esa asociación Ilícita. Por intermedio de varios frigoríficos destinados a la venta de alimentos vacunos, dicha organización retenía los impuestos que debían ser aportados a las arcas del Estado Nacional”, decía la circular de Interpol.
El jueves por la noche, en sus últimas declaraciones públicas realizadas a la señal de cable TN, Samid había señalado que se encontraba en el país, “en una provincia peronista”, y que “en doce horas en auto” podía llegar a la ciudad de Buenos Aires.
Más temprano, en otras entrevistas, había señalado que se encontraba en “un campo muy grande”, con “más de ocho tranqueras”, donde (aseveró en tono desafiante)era “muy difícil” que lo pudieran encontrar. (Télam)