Lo importante es el futuro para San Martín

Caruso moldea el equipo que jugará la Copa de la Superliga, pensando en la base para la B

12 Abril 2019

Ni bien el descenso de San Martín quedó confirmado, en La Ciudadela se trazaron un nuevo objetivo: aunar esfuerzos y encarrilar un trabajo a largo plazo que les otorgue la posibilidad de retornar a la Superliga lo antes posible.

Así, la dirigencia comenzó a trabajar en el armado del nuevo plantel y el primer paso fue estudiar cada caso de los jugadores que hoy están en el plantel, para decidir si les renovarán o no la confianza.

Pedro Fernández, Rodrigo Moreira y Oliver Benítez tienen contrato hasta mediados de 2020 y sus intenciones de seguir parecen coincidir con los de la mesa chica de la directiva. Así también, a Lucas Acevedo le queda poco más de un año de contrato y, si no aparece una oferta que le convenga a ambas partes, podría ser uno de los puntales en el plantel de la B.

“Tengo contrato hasta junio, pero las ganas de seguir están. Una vez que termine el torneo me reuniré con los dirigentes para ver ese tema”, le confió a LG Deportiva Rodrigo Gómez, otro de los que tendría las puertas abiertas para renovar.

Tomás Federico, Juan Orellana y Lucas González firmaron hace algunos días la renovación de sus vínculos. Maximiliano Martínez y Lucas Diarte tendrían ganas de quedarse a buscar revancha, mientras que a Gustavo Abregú Nahuel Menéndez, Gonzalo Lamardo y Nicolás Delgadillo les queda un año más de contrato. Hernán Petryk, Emiliano Purita, Nicolás Giménez y Julián Vitale deben volver a Peñarol, San Lorenzo, Talleres e Independiente, respectivamente, clubes dueños de su ficha.

Con Claudio Bieler, “Tino” Costa y Adrián Arregui afuera y con Matías García jugando sus últimos partidos en el club, el foco está en ver qué es lo que pasará con los delanteros. A Gonzalo Rodríguez, Luciano Pons, Ramiro Costa y Valentín Viola se les termina el vínculo a fin de temporada. Por eso, en los próximos días la CD comenzará a negociar con los jugadores que le interesan que continúen.

En cuanto a los casos de Jorge Carranza y Alejandro Altuna, por ahora no hay nada definido. El arquero tuvo algunas buenas actuaciones en la Superliga, pero en los últimos partidos ni siquiera concentró. En tanto, el volante jugó muy poco en el último año.

Por todo esto, tras el juego con Boca, Ricardo Caruso Lombardi comenzó a armar el equipo en torno a los futbolistas que pueden llegar a ser la base del nuevo plantel. Así, contra Estudiantes y San Lorenzo, varios de los que fueron una fija durante la Superliga no aparecieron en escena y otros resurgieron desde el ostracismo y comenzaron a ganarse un lugar importante en la consideración de cara a la B Nacional.

El equipo estuvo lejos de resentirse en cuanto a estructura y funcionamiento. Todo lo contrario. Pese a que San Martín no pudo ganar, se lo vio más compacto en defensa (fue uno de los principales déficits de la temporada) y pese a que le costó horrores convertir, generó varias situaciones en esos dos juegos. “Con trabajo el equipo debe ir apareciendo. Esto es así, corrigen errores y se trata siempre de jugar mejor. Nos está costando mucho terminar las jugadas”, explicó Caruso, dejando en claro que seguirá “dándole una mano” a la CD. “Quiero dejarles una base para que a San Martín le cueste menos el proceso de rearmado. Es muy bueno que los juveniles vayan tomando rodaje, pero tampoco hay que tirarles toda la presión, eh”, sentenció.

En San Martín miran de reojo lo que resta de la temporada, pero tienen en claro que lo más importante es el futuro.

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