Inseguridad: el arrebato es el delito más frecuente en el macrocentro

“Por los controles y los operativos que se desarrollan a toda hora hay un desplazamiento del delito”, explicó el jefe de Policía.

ARCHIVO LA GACETA ARCHIVO LA GACETA

No es un número exacto, pero sí un claro indicio de lo que está sucediendo en el centro de la capital. En promedio, en la semana del domingo 5 hasta el 12, se denunciaron al menos seis hechos de inseguridad en promedio, ya que quedaron registrados 42 hechos. Y esto no sucede en los barrios de la periferia, sino un sector que está comprendido entre las avenidas Sarmiento (norte), Avenida Avellaneda/Sáenz Peña (este) y Roca (sur) y Marco Avellaneda/Bernabé Araoz (oeste).

El arrebato, con 16 casos, fue el delito más cometido en este sector de la ciudad. Al menos nueve casos se produjeron al sur de la calle 24 de Septiembre. “No nos sorprende nada ya. Desde que trajeron los ómnibus a este sector de la ciudad hay más delitos de este tipo. Deberían haber pensado que eso ocurriría porque hay mucha gente en las paradas cuando no hay movimiento en la zona. Los entregaron en bandeja a los motochorros a los usuarios de los colectivos”, dijo Juan Carlos Frías, encargado de un quiosco ubicado en la zona de tribunales.

En Barrio Norte, en cambio, hay mayor presencia policial, pero se siguen produciendo ataques. Allí, según las denuncias a las que tuvo acceso LA GACETA, queda en claro que se trata de oportunistas. Por ejemplo, una mujer fue víctima de un arrebato en la esquina de Junín y Santa Fe, es decir a metros de la sede de la ex Brigada de Investigaciones y de la Unidad Regional Capital. “Ningún ladrón que esté en su sano juicio podría cometer un robo allí. Aquí hay muchos dando vuelta buscando una oportunidad y, cuando la tienen, la concretan”, indicó Josefina de Racedo, que vive a media cuadra de la plaza Urquiza.

Punguistas al acecho

Y si de oportunistas se trata, los 10 ataques de punguistas consolidaron el hurto como el segundo tipo de delito cometido en este sector del centro capitalino. “Como somos comerciantes las conocemos. Cada rato los policías las corren o se las llevan detenidas, pero siempre, a las semanas o a los meses, vuelven. Atacan en negocios, a personas mayores y hasta chicos que salen de las escuelas con los celulares en sus mochilas”, destacó María Fernanda Rivadeneira, empleada de un comercio ubicado en la peatonal Muñecas.

Luego de que la Policía reforzara la zona de avenida Mate de Luna para frenar los ataques de rompevidrios, los motochorros se mudan cada vez más a la zona del centro. Los dos últimos hechos denunciados se cometieron en Santiago del Estero y Catamarca y 25 de Mayo y General Paz.

Inseguridad: el arrebato es el delito más frecuente en el macrocentro

También están resurgiendo algunos delitos que parecían haber quedado en el olvido o que solían registrarse fuera de las cuatro avenidas: el robo de estéreos, ruedas de auxilio o algún otro elemento de los vehículos estacionados en las calles o en guarderías.

“Los changos andan desesperados. Están buscando la oportunidad para ‘ganarse’ algo y hacer plata. Hay que estar muy atentos para que no te sorprendan. Vivimos de esto y si roban uno de los vehículos que cuidamos, ya nadie va a confiar en nosotros”, explicó José Luis Herrera, “trapito profesional”, como él mismo se definió en la entrevista con LA GACETA.

Otro dato para tener en cuenta: los tres asaltos que se registraron en la ciudad fueron cometidos por motochorros. En realidad, 18 de los 42 delitos fueron cometidos por personas que utilizaron la moto para delinquir.

Desplazamientos

El jefe de Policía, Manuel Bernachi dijo a LA GACETA que los ataques podrían estar “vinculados” con los operativos que se están realizando en la periferia. “Indudablemente hay un desplazamiento del delito en la capital. Los controles y los operativos que se hacen en otros sectores generan que los que cometen ilícitos se movilicen a otros sectores. Lo importante es que estamos monitoreando todo esto para cambiar permanentemente de estrategia”, señaló.

Manuel Bernachi, Jefe de Policía Manuel Bernachi, Jefe de Policía ARCHIVO LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ

El titular de la fuerza destacó que constantemente están modificando la distribución de los agentes. “Lo más importante es que estamos incrementando la presencia policial en las calles”, agregó.

Más allanamientos

Por su parte, el comisario Jorge Dip, director de la Dirección de Investigaciones Capital, señaló que además de las tareas de prevención están incrementándose los allanamientos para dar con los autores de estos ilícitos. “En los últimos días detuvimos a dos personas que estaban involucrados en un ataque de rompevidrios a los que se les secuestró además inhibidores de alarmas. Vamos a incrementar los trabajos y para ellos es fundamental que se denuncien los casos. Así podremos mejorar aún más la prevención”, concluyó.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios