Hacer un trámite o ir de compras al centro de Yerba Buena se puede convertir en una verdadera odisea si decidimos hacerlo en auto. Sucede que el área central de la Ciudad Jardín, en los horarios de tráfico intenso, pareciera que va a explotar. En los últimos años ha crecido tanto el parque automotor y la cantidad de negocios que la principal Avenida, la Aconquija, se ve desbordada de peatones y vehículos a diario.
Ahora, en un intento por empezar a ordenar la cuestión, el Concejo Deliberante aprobó una ordenanza para que el estacionamiento sea medido y pago en la vía pública. Además, las autoridades prevén la creación de un colectivo interno para mejorar la conectividad. El tiempo dirá si estas dos medidas serán suficientes o no para solucionar el creciente caos en el tránsito yerbabuenense.
Con el proyecto del estacionamiento medido se buscará terminar con el cobro indebido, irregular y excesivo de estacionamiento en las calles, según anunciaron los ediles. Sin dudas, representa un paso adelante aunque resta ver cómo se aplicará y quién lo controlará. No será una tarea fácil en una ciudad cuyo parque automotor se duplicó en 10 años y hoy alcanza los 25.000 autos y 18.000 motos que circulan a diario por allí. A ese número hay que sumar los vehículos procedentes de otros lugares que también llegan a la ciudad.
Hoy hay más accidentes y más infracciones en las calles y avenidas de la localidad. A la luz del crecimiento inmobiliario, es evidente que Yerba Buena necesita sí o sí de un plan integral de tránsito. Y que ese plan deberá enfrentar los hábitos de muchos yerbabuenenses, acostumbrados a dejar su auto a metros de donde deben descender. La falta de lugares para estacionar será uno de los puntos que deberán resolver las autoridades. La mayoría de los comercios no tiene guarderías. Fuera de la posibilidad de dejar un auto en la calle no hay demasiadas opciones.
Algunos expertos han propuesto peatonalizar calles. Es la medida más popular de las ciudades desarrolladas: priorizar al peatón. Sin embargo, para tomar esta decisión Yerba Buena debería tener sí o sí un transporte público más eficiente. Hoy cuenta con cinco líneas de ómnibus que sólo resuelven la conectividad este-oeste de la ciudad. No se contemplan otras necesidades de traslado. O suponen que la gran mayoría de la gente tiene su propio rodado.
Justamente esto es lo que se analiza en la Secretaría de Planificación y Gestión municipal. Los funcionarios estudian crear un colectivo pequeño que recorra en forma de cero el norte y sur de la Ciudad Jardín y que deje a los pasajeros a no más de cuatro cuadras de los puntos de referencia. La idea incluye, en un futuro, poder hacer trasbordos con las líneas de ómnibus que circulan hoy.
Es de esperar que estos proyectos que están surgiendo tengan la visión de una ciudad más amable con quienes la transitan, ya sea a pie o motorizados. No estaría mal escuchar a los vecinos: hay quienes piden bicisendas, mientras que otros quieren que se prohiba estacionar en la Aconquija, por ejemplo. Tener un nuevo estudio multidisciplinario sobre la realidad del tránsito