Yatasto: mitos y verdades sobre la estancia que elegía Belgrano para curarse y descansar

A 150 kilómetros de Tucumán puede visitarse la casona colonial donde el general vivió importantes momentos, como un encuentro con San Martín.

 Según los estudios, dos algarrobos fueron testigos de los pasos de Belgrano, porque datan de 300 años. Según los estudios, dos algarrobos fueron testigos de los pasos de Belgrano, porque datan de 300 años.

Dos imágenes fuertes protagonizadas por Manuel Belgrano se asocian con la Posta de Yatasto (Salta) y corresponden a momentos clave.

- La primera: el prócer a punto de convertirse en general, cerrando los ojos y pidiendo al cielo una excepcional ayuda divina. La valentía estaba, pero se necesitaban también fuerza, estrategia y una gran dosis de suerte para liberar la patria con un ejército flaco en más de un sentido.

- La segunda imagen corresponde a un héroe derrotado, en retirada, próximo a ser juzgado por el poder central a causa de los fracasos en Vilcapugio y Ayohuma, en el frustrado intento de liberar al Alto Perú (hoy Bolivia). Ahí, además de agotado, estaría pensando en qué había fallado y en si la aventura de la independencia era verdaderamente posible.

Es probable que al imaginar esos dos momentos de Belgrano, en un parate entre batalla y batalla, acudan a la mente la figura del creador de la Bandera sentado bajo un viejo algarrobo, pensativo y solitario. Y quizás sea exactamente como le gustaba descansar al general durante los varios días que pasaba en la estancia de don Vicente Toledo y Pimentel, pero lo cierto que es no hay documentación que lo confirme.

El de Belgrano recostado en un algarrobo, mirando la casa de sus anfitriones, pensando en las batallas, es uno de los mitos que rodean la finca ubicada 20 kilómetros al sur de la ciudad de Metán. El otro mito se refiere al segundo de los encuentros históricos de los que fue testigo esa hacienda colonial.

Norma Aguilar y Hugo Solorza, salteños de Metán y estudiosos de los pasos del general Belgrano por el norte argentino, recibieron a LA GACETA en este recorrido por el museo Posta de Yatasto. Rodeado de fincas de arándanos, el museo ambienta a los visitantes en el estilo de vida de principios del siglo XIX, con el gauchaje, el trabajo de la tierra y el ganado como los protagonistas.

El sitio es principalmente reconocido por dos grandes encuentros entre patriotas. El primero, el 26 de marzo de 1812, cuando Belgrano recibe por parte de Juan Martín de Pueyrredón el mando el Ejército del Norte, o Ejército Auxiliar del Perú, con el que seis meses después logrará la resonante victoria en la Batalla de Tucumán. El segundo es la reunión entre Belgrano y José de San Martín, días antes de entregarle el mando del mismo Ejército, tras las derrotas en Alto Perú.

“Esta estancia pasaba cerca del camino de postas; era un lugar sumamente transitado por los ejércitos de la patria. Y esa es la razón por la que este sitio haya sido visitado en reiteradas oportunidades por Belgrano y sus milicias. El trazado del camino era muy similar al que tiene ahora la ruta 9 hacia Tucumán”, explica Solorza, historiador aficionado y escritor.

“La estancia tiene la calidad de posta, que eran sitios obligados en los que los cuerpos del ejército debían parar para reabastecerse y atender la caballada, además de buscar nuevos milicianos que engrosaran las filas del ejército camino al Alto Perú. Yatasto no era una posta oficial, pero funcionaba como tal”, agrega Aguilar, docente de Historia Regional e investigadora del Conicet.

Después de crear la Bandera en Rosario, el 27 de febrero de 1812, Belgrano recibe la orden de hacerse cargo del Ejército del Norte y el sitio donde se produce el cambio de mando es Yatasto. Luego el general emprende viaje a Tucumán, donde se libra la gran batalla del 24 de septiembre.

“Los encuentros con Pueyrredón y con San Martín son los más reconocidos, pero en las marchas y contramarchas que tuvieron los ejércitos de la patria, Belgrano recorre varias veces más estos caminos. Hay que recordar que una vez que llega por primera vez al norte va a Jujuy, organiza el Éxodo, luego se produce el combate de Río de las Piedras en el 1812. Después de la Batalla de Tucumán viene aquí a reponerse de su enfermedad, fiebre de tercianas, como él reporta, descansa y desde aquí emprende la expedición que termina con la victoria de la Batalla de Salta, en febrero de 1813”, detalla Solorza.

El escritor comenta sobre un histórico parte enviado por Belgrano al Triunvirato, informando que el 13 de ese mes realizó “uno de los más grandes actos desde nuestra feliz revolución, al hacer jurar a los soldados lealtad a la soberana Asamblea y a la bandera”.

“Luego de la batalla de Salta sigue su derrotero hacia el norte, y llegan los contrastes de Vilcapugio y Ayohuma, y regresa. Ahí pide ayuda mientras bajaba por la Quebrada, el coronel San Martín es el que va en auxilio de Belgrano”, agrega el historiador.

El 18 de enero de 1814 Buenos Aires ya había determinado el cambio en el mando del Ejército Auxiliar. José de San Martín reemplazaría a Belgrano. Pero por las distancias, las noticias no llegaban de un momento a otro y de ahí el segundo mito: el traspaso de mando no fue en Yatasto, sólo el encuentro previo. “Ellos desconocían esa novedad y entre el 21 y el 30 él sigue dando las órdenes como jefe. Ahí es cuando manda a San Martín a Tucumán a presentarse como segundo en el mando. Cuando llega, se da con la noticia de que San Martín era el nuevo jefe. Belgrano acata. El cambio de mando se da en Tucumán”, destaca Aguilar.


Fechas clave

1812 Encuentro y cambio de mando entre Juan Martín de Pueyrredón y Belgrano, el 26 de marzo.

1814 Encuentro entre Belgrano y José de San Martín, el 17 de enero.


Cuando abran...
El museo de Yatasto puede visitarse todos los días, excepto los lunes


El Museo Posta de Yatasto es de dependencia nacional y está ubicado en la localidad de Yatasto (Salta). Como todos los museos nacionales, está cerrado por la pandemia de coronavirus. Recrea el estilo de vida campestre de principios del 1800. Cuando reabra sus puertas puede visitarse todos los días, excepto los lunes. Para llegar desde Tucumán hay que tomar la ruta 9 en dirección a Salta. 20 kilómetros antes de Metán, hay sobre la ruta cartelería indicadora para tomar un camino de ripio de unos 2 kilómetros hasta llegar a la estancia. Son 150 kilómetros desde San Miguel de Tucumán.

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