Por Juan Martín de Chazal
23 Junio 2020
EN ACTIVIDAD. El comercio podría verse obligado a cerrar sus puertas si se detecta circulación viral en Tucumán. la gaceta / foto de Inés Quinteros Orio
Las noticias que llegan desde otras provincias hacen temer lo peor: un brote de coronavirus puede producirse de repente y forzar a dar marcha atrás con el desconfinamiento gradual. Si bien Tucumán no ha registrado hasta el momento casos de circulación comunitaria, las autoridades del Sistema Provincial de Salud (Siprosa) ya lo advirtieron: la aparición de un paciente infectado cuyo nexo epidemiológico no pueda ser precisado podría producir el retorno a una cuarentena más estricta como la de meses atrás.
El caso de Jujuy, que regresó el sábado a la fase 1 del aislamiento obligatorio luego de confirmar casos de covid-19 “sin certezas de que existe transmisión comunitaria”, es seguido de cerca en Tucumán. Y no sólo por las autoridades sanitarias y los médicos, sino también por comerciantes y otros sectores que se atemorizan ante la posibilidad de frenar, una vez más, sus actividades en crisis.
Desde mayo, la provincia gobernada por Gerardo Morales ha sido una de las que más temprano comenzó la desescalada ante la ausencia de casos nuevos durante semanas. Fue una de las primeras en permitir la reapertura del comercio y el sector gastronómico, además del turismo interno y otras actividades. De hecho, fue la pionera en evaluar el retorno de las clases presenciales. Todos esos planes han sido echados por la borda desde el 17 de junio, cuando los hisopados realizados a dos policías dieron positivo para coronavirus sin que se pudiera establecer a ciencia cierta los orígenes de sus contagios. A partir de ese momento, los casos confirmados fueron en aumento y la provincia norteña atraviesa ahora una cuarentena estricta como la que se inició en el país el 20 de marzo.
Además de Jujuy, otros ocho territorios que ya se encontraban en la fase 5 dieron marcha atrás con las flexibilizaciones por la aparición de focos de coronavirus. Ocurrió en ciudades de Córdoba, Mendoza, Santa Fe, Entre Ríos, Chubut, Neuquén, Corrientes y del interior bonaerense.
¿Cuántas probabilidades hay de que un hecho así ocurra en Tucumán? Todo depende de la circulación viral, que puede “pasar en cualquier momento”, según estimó Luis Medina Ruiz, secretario ejecutivo médico del Siprosa. “Puede suceder que alguien que haya ingresado (a la provincia) hace 15 días, y que haya dado negativo, tenga en realidad un período de incubación largo y pueda contagiar luego”, ejemplificó ayer en diálogo con LG Play.
Atento al panorama de otros sitios del país, el funcionario advirtió: “lamentablemente, si no hay una respuesta adecuada con las recomendaciones y aparece un paciente que demuestra circulación viral (comunitaria), vamos a pedir al Comité Operativo de Emergencia (COE) volver atrás”. Y agregó: “no queremos que pase como en otras provincias donde ya se están llenando los hospitales y las terapias intensivas con pacientes graves. Eso ocurre cuando hay muchos contagios”.
Cuestión de tiempo
Medina Ruiz calculó que detrás de cada paciente sintomático con covid-19 hay entre 10 y 20 que son asintomáticos. “Una sola persona puede descontrolar la situación. Somos una provincia de gran tránsito y con una alta densidad poblacional. Hasta ahora hemos trabajado bien, pero están dadas las condiciones para que tengamos problemas”, alertó. “En poco tiempo, se puede transformar en algo difícil de controlar”, sumó.
Consultado por este diario, el médico infectólogo Juan Manuel Núñez explicó que la aparición de casos como los que sucedieron en Jujuy puede significar el inicio de un foco de contagios. “Un brote es un aumento en el número de casos sobre lo que se espera”, definió. En ese sentido, precisó que la transmisión comunitaria se da cuando no se puede establecer la causa de la infección y opinó que su aparición justifica el retorno del aislamiento. “Nadie quiere volver atrás, pero es posible. Esto es muy dinámico”, expresó.
Al igual que Medina Ruiz, el especialista consideró que Tucumán está “bajo un riesgo muy alto” por las características de la provincia, en especial por la densidad poblacional alta. “A diferencia de Jujuy y Salta, nuestra ‘ventaja’ es que no tenemos fronteras internacionales. Así, se ha podido frenar el ingreso de más personas infectadas. Pero es esperable que haya un brote; es probable, ha pasado en todo el mundo”. concluyó Núñez.
Por lo pronto, no habrá más flexibilizaciones en Tucumán. La vigencia de las que ya hay, además, depende de que el virus no circule.
La experiencia de Jujuy
- Debió volver al aislamiento “sin certezas” sobre si hay transmisión comunitaria
- La mayor exposición, dicen los expertos, es la cantidad de puestos fronterizos externos
- El 24 de mayo, se había habilitado el turismo interno en toda la provincia
- Desde el 15 de junio, se convirtió en el primer lugar en volver de a poco a las aulas
- Los bares reabrieron a mediados de mayo
El escenario en Tucumán
- Todos los casos detectados hasta ahora son importados o por contacto estrecho
- Los especialistas y las autoridades evalúan la alta densidad poblacional como un riesgo
- Nunca hubo y aún no hay una fecha establecida para el retorno del turismo local
- Hasta el momento, no hay un día establecido para el regreso a las cases presenciales
- La reabertura de bares se inició el 8 de junio
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