San Martín y una leve mejoría que no alcanzó

La leve mejoría evidenciada durante el primer tiempo se esfumó con el correr de los minutos. Otra vez los errores propios le costaron una nueva derrota a San Martín, que ya se despidió de la pelea por el primer ascenso. Esta vez no hubo milagro ante Villa Dálmine y eso que Ricardo Noir tuvo la última, con el arco vacío, y la terminó tirando por arriba del travesaño. Pero el derrumbe comenzó mucho antes, cuando el “Santo” perdió la pelota y retrocedió en el campo porque su mediocampo ya no contenía ni generaba juego. La salida de Juan Imbert, por lesión, le quitó al equipo tucumano el todoterreno que lo sostenía, pese a sus falencias. La jugada del gol visitante tal vez resume el mal momento que atraviesa San Martín, que hoy mostró vergüenza pero se olvidó del fútbol. Era una salida sencilla para el fondo pero un mal dominio de Emiliano Purita permitió un centro y, con la defensa desacoplada, hizo todo más fácil para que Sergio Sosa, de cabeza, ponga el 1-0.

Con cuatro delanteros tampoco pudo encontrar la claridad para lastimar a un rival limitado, tal vez el más débil de su grupo. Si el comienzo en este mini torneo era malo, anoche en La Ciudadela quedó en claro que todavía puede ser peor.

Era el partido para ganar y empezar el 2021 con otras posibilidades. Sin embargo, esta pandemia parece no tener cura para San Martín, que cayó en un pozo ciego del que ni siquiera los cambios de nombres parecen poder sacarlo. Anoche volvieron a ser titulares “Tino” Costa y Gonzalo Rodríguez, que mostraron apenas destellos. Pero nada parece alcanzar para, al menos, sumar un empate. Este “Santo” caído en desgracia perdió cuatro de los cinco partidos que jugó desde el reinicio de la competencia y cerró el año con cuatro caídas consecutivas en casa, algo impensado para un equipo que se preparó para luchar por el campeonato. El próximo sábado se cruzará con Deportivo Riestra, como visitante, que si hoy derrota a Sarmiento dejará a los tucumanos en el último puesto.