El microcentro tucumano, habituado al feroz frenesí diario, vivió anoche un ritmo incluso más acelerado. Mientras una ruidosa protesta sindical recorría las peatonales, la mayoría de los comercios cerró sus puertas cerca de las 20:30, media hora antes que de costumbre. Además de las discusiones -aún abiertas- por el horario de atención, persistían las dudas sobre la circulación de colectivos en la ciudad. La noche del lunes, la reducción en el servicio de transporte público ya había obligado a empleados y dueños de negocios a acordar una salida más temprana para alcanzar las últimas unidades, que circularían hasta las 21. Ayer se replicó la movida, aunque oficialmente cesó la restricción y las frecuencias nocturnas suspendidas fueron restablecidas.
Si bien gran parte de las compañías ordenó que los recorridos continuaran anoche pasadas las 23, se espera que recién hoy todo -tanto en las líneas urbanas como en la actividad comercial- retome una mayor normalidad.
Ante la reducción horaria dispuesta por la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), que finalmente duró dos noches, la Municipalidad había anunciado que pondría en marcha un sistema de minibuses. “Afortunadamente no hizo falta porque los empresarios anunciaron la normalización. No tenía sentido poner unidades a competir con un sector en crisis”, dijo a LA GACETA Rodolfo Ocaranza, secretario de Gobierno de la Capital.
Es la segunda vez que un grupo de combis registradas por la Intendencia estuvo a punto de ejecutar recorridos alternativos en la ciudad. Ya en enero, durante un paro de choferes que luego fue resuelto, la población casi estrenó el servicio de emergencia.
En este caso, la idea era únicamente realizar frecuencias después de las 21 para que trabajadores y estudiantes de terciarios pudieran regresar a sus hogares. “Teníamos 12 circuitos y cinco puntos de concentración definidos. La alternativa estará disponible si otra vez hay problemas en el sector. Esperemos que no haga falta”, expresó Ocaranza.
“Explotará el sistema”
Ya al mediodía, en la Municipalidad sabían que no sería necesario convocar a los minibuses porque Aetat revertiría la medida. Unas horas después, la cámara formalizó el anuncio. “Haciéndonos eco de los numerosos pedidos de la comunidad (...), las empresas en todas sus modalidades decidieron flexibilizar la medida y restablecer con diagramas de emergencia los servicios suspendidos”, informaron. Las carteras a cargo del transporte público de la Provincia y la Capital, además, habían anticipado sanciones contra las firmas involucradas.
“Se deja también aclarado que el ahorro que pretendimos realizar será llevado a cabo con racionalización en otros horarios”, agregó Aetat en el comunicado.
¿Qué quiere decir? “Significa que, de forma conjunta con la Municipalidad, haremos más eficiente las frecuencias: pondremos más coches cuando hagan más falta y retiraremos aquellos que no tienen tanta demanda”, explicó Luis García, vocal de Aetat. “Los datos están en manos de ellos por el manejo de la Tarjeta Ciudadana. De 15 a 17 la afluencia es menor, mientras que de 20 a 21.30 es mayor”, ejemplificó.
Según los cálculos del empresario, al cortar el servicio a las 21, el ahorro de combustible osciló entre 500 y 600 litros en 50 unidades. “El problema es que entre lo que se paga de subsidios y el costo del boleto no se cubren los costos de explotación. Recién mejora un poco la recaudación, pero los ingresos pierden contra los egresos por la inflación”, alertó.
Así, en Aetat ya hablan de una “inminente interrupción del servicio” para la semana que viene. “El día 10 explotará el sistema porque no podremos pagar los sueldos con los subsidios atrasados y desactualizados. El gremio seguro reaccionará con una medida de fuerza”, previó García.
César González, secretario general de la Unión de Transportes Automotor (UTA) reiteró anoche la preocupación por el abono de los salarios de marzo. “Me parece bien que se haya revertido la reducción nocturna, pero no opinamos porque es una medida que sólo los empresarios han tomado. Esperamos que hasta el 7 paguen para seguir”, transmitió.
Los comerciantes, en tanto, celebraron la decisión de Aetat. Gabriela Coronel, titular de la cámara del sector, avisó que hoy volverán a atender hasta las 21 (en paralelo, sigue el conflicto sindical por los horarios). “Peluquerías, gimnasios y gastronómicos fueron los más afectados”, detalló.