El incidente de tránsito de hace pocas semanas en el que un juez fue filmado mientras descargaba su ira con la motocicleta de un cadete ha dado mucho que hablar en nuestra comunidad y ha derivado en pedidos de juicio político contra el magistrado. También ha puesto de manifiesto el problema de lo que se conoce como furia al volante, que, según han advertido expertos en tránsito y entidades civiles, se ha incrementado en el marco del encierro y de las tensiones de la pandemia.
La licenciada Graciela Valles, del Departamento de Educación Vial del Automóvil Club Argentino, explicó que “el 85% de los siniestros son ocasionados por el factor humano y que el comportamiento de los usuarios es la causa más directa de los accidentes de tránsito; la aptitud para conducir es fruto del aprendizaje, un proceso complejo que abarca un tiempo largo. La conducción agresiva genera una situación de peligro físico y psicológico para el otro participante”.
En una encuesta de Luchemos por la vida entre conductores de vehículos de ambos sexos, el 53% reconoció que insultaba y/o gesticulaba a otro conductor que lo molestaba con sus maniobras; el 42% devolvía las agresiones verbales-gestuales que recibía y el 9% de los conductores varones alguna vez se había trenzado físicamente en una pelea por el tránsito.
“No lo hemos estudiado concretamente pero el confinamiento, las restricciones y la incertidumbre que se vive en el contexto de pandemia genera un malestar que se exacerba e influye mucho en las emociones que se sienten. Todo esto puede generar cierto grado de violencia”, dijo Mirta Gallardo, psicóloga y subdirectora de licencias de conducir y educación vial en la Municipalidad capitalina. “El vehículo es una máquina que amplifica estas emociones. Si uno se sube enojado al volante, se amplifica el enojo”, explicó Claudio Artaza Saade, perito especializado en accidentes de tránsito. Según informó, Tucumán es la cuarta provincia a nivel nación en siniestros viales y tasa de fatalidad. “Primero está Santiago del Estero con una tasa del 15.4; luego San Luis con el 14.8; La Rioja con 13.2 y Tucumán con el 13.3”, explicó. Otro dato a destacar es que el 81% de los varones protagonizan los accidentes contra el 17% de las mujeres y en el 44% de los accidentes son protagonistas personas de entre 15 a 34 años de edad.
La psicóloga y directora de Investigación y Educación Vial de Luchemos por la Vida, María Cristina Isoba, destacó que los últimos incrementos de reportes públicos de siniestros de tránsito con agresiones parecen indicar un aumento de la agresividad al volante, que puede tener varias razones. “Una, el aumento del estrés en los conductores por la extraordinaria crisis e incertidumbre provocados por la pandemia de Covid-19 y sus secuelas a nivel personal y económicas. Además, durante meses los controles de tránsito para la seguridad vial se redujeron o interrumpieron: esto generó en la población una sensación de anarquía”.
Hay tratamientos para atenuar estas conductas y tests que intentan detectar estas personalidades antes de habilitarlos para el manejo, afirmó Gustavo Brambati, de Seguridad Vial de Cesvi Argentina. Sería importante que el caso que ha dado que hablar en nuestro medio incentive al debate sobre el modo de otorgar licencias de conducir y de analizar el comportamiento de los conductores, así como sobre la necesidad de empezar con campañas de concientización desde temprano, como los cursos de educación vial en los colegios, para trabajar desde temprana edad la tolerancia como valor fundamental a la hora del manejo.