Por Carlos Werner
28 Enero 2022
La Selección y una muestra de carácter ante Chile
Siempre hay mar de fondo cuando las selecciones de Argentina y Chile se van a enfrentar. La previa del partido de anoche, que la Selección ganó 2-1, no fue la excepción. Es más, fue más “caliente” lo que pasó antes del juego que durante, incluyendo el clima fervoroso y algo hostil que propuso el público en el estadio “Zorros del Desierto” de Calama. En los 90 minutos hubo mucho nervio, velocidad, fervor y varias llegadas sobre los arcos. Es decir, cuestiones naturales de un partido. Pero antes sí hubo situaciones que alimentaron una rivalidad que hace años está muy alejada de un simple partido de fútbol.
Desde el momento en que Chile decidió hacer de local en un estadio ubicado a 2.300 metros sobre el nivel del mar, se entendió que se buscaba crear un ámbito incómodo para el visitante. Otro capítulo se dio con la llegada de la Selección: controles exhaustivos (hasta con perros antinarcóticos), falta de agua en el hotel, incluso declaraciones picantes del ministro del Interior, Rodrigo Delgado, contestándole a “Dibu” Martínez ante sus quejas por el trato que se le dio al equipo al llegar. “Hablan de ‘quilombo’, y el verdadero quilombo lo tenía ellos con los papeles”, lanzó.
Dejando de lado este toma y daca, hubo un partido que Argentina jugó sin Lionel Messi como conductor y sin Lionel Scaloni como DT. Lo hizo sin lujos, jugando al límite por momentos, pero sin perder la compostura, ante un rival necesitado de un buen resultado.
Se vio en el primer tiempo otra “gema” de Ángel Di María para abrir el marcador; la sorpresa de “Dibu” ante el preciso cabezazo de Ben Brereton para el empate y el máximo dividendo que sacó Lautaro Martínez ante el mal rechazo (por un fuerte remate de Rodrigo De Paul) del arquero Claudio Bravo (que al rato salió lesionado). En el segundo, todo fue más luchado; el equipo nacional perdió el dominio de la pelota y debió apelar a su oficio y paciencia para aguantar los embates chilenos. “Dibu” tuvo algunas atajadas clave, con lo que le bajó la cortina a la impetuosa pero desordenada e improductiva búsqueda del local.
Argentina ganó, se acercó a Brasil en la tabla y extendió su invicto a 28 partidos. Visto de este modo, lo suyo fue positivo. El martes, Colombia será otra medida para saber qué más tiene para ofrecer un equipo que muestra carácter.
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