13 Abril 2022
TODO EN ORDEN. De Muner celebró un nuevo triunfo “santo” como local. Pero valoró, por sobre todas las cosas, el método con el que su equipo logró su cometido. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ
“Este grupo se merecía un triunfo así”. En la rueda de prensa pos victoria sobre Independiente Rivadavia, mientras analizaba detalles del juego, Pablo De Muner dejó una frase que hizo ruido.
Luego del inexplicable y doloroso empate contra Quilmes, en un duelo que parecía ganado, el entrenador no se cansó de defender a sus jugadores. Durante la semana había resaltado el juego que viene mostrando el “Santo”, había elogiado las virtudes y hasta se había encargado de frenar a los críticos. Por eso la victoria contra “Lepra” era una necesidad y un alivio por cómo se dio.
San Martín volvió a mostrar el buen juego asociado, el hambre voraz y la ambición; pero también logró extenderlo a lo largo de los 90 minutos (más allá de que en el inicio del complemento le regaló la pelota a su rival). Esta vez, también marcó un gol en el complemento y demostró que partido a partido va creciendo en algunos aspectos. “Era un duelo muy importante para nosotros. Sabíamos que Belgrano había ganado y teníamos la necesidad de hacer lo nuestro. Fue un partido duro, difícil, ante un rival que se cerró bien”, dijo el entrenador, resaltando que pese a no haber podido generado la cantidad de situaciones que hubiera deseado, el equipo estuvo bien. “Nos costó generar situaciones, pero manejamos casi todo el partido la pelota. El equipo lo hizo muy bien, los cambios nos dieron aire y pudimos liquidarlo en el complemento”.
El público volvió a copar La Ciudadela. Poco importó la tormenta de la tarde, las calles anegadas en diferentes puntos de la ciudad ni la lluvia que no cesó ni un instante. “Hay que golpearse el pecho y sentir orgullo”, había pedido De Muner. Y el hincha “santo” hoy va a la cancha a ver jugar a su equipo, a alentar y a disfrutar porque así lo acostumbró un plantel que en casa va sumando casi el 87 por ciento de los puntos en juego (ganó cuatro, empató uno, anotó siete goles y no recibió ninguno). “Estamos muy bien en condición de local. El equipo muestra personalidad y sabe aprovechar los momentos. Esta vez, los cambios le dieron aire y así pudimos liquidar el partido”, aseguró.
Si las lesiones fueron un problema que causó muchos dolores de cabeza en las primeras fechas, el recambio fue una verdadera solución. En 10 jornadas, De Muner utilizó 24 jugadores y la estructura nunca se resintió. Todos saben a qué juega San Martín y cómo utiliza sus armas; y cada integrante del grupo está capacitado para aportar lo suyo. “Tuvimos muchos inconvenientes a la hora de competir. Sin embargo, la identidad se ve marcada y eso es importante”, resaltó, antes de celebrar que sus pupilos hayan podido sacarse la bronca del resultado contra el “Cervecero”. “Teníamos que demostrar lo que hicimos contra Quilmes a lo largo de todo un partido y volver a hacerlo de local, con nuestra gente, es muy importante. Estamos contentos con el nivel que muestra el equipo. Pero hay que seguir”.
Volvió Nicolás Sansotre y aportó lo que acostumbra; jugó por primera vez Franco Quiroz y cumplió con creces; a Juan Orellana le tocó volver a ser titular y se mostró firme. “Lo positivo de todas las lesiones que tuvimos es que fuimos modificando el equipo casi todos los partidos y todos los jugadores aportaron algo. Eso es importantísimo de cara al futuro”, sentenció “Tomate” pensando en el “eterno” torneo de 37 fechas; pero feliz porque su equipo volvió a da otra muestra de protagonismo, ganando un partido complicado, con la obligación de hacerlo por los resultados que se habían registrado en la fecha y jugando bien al fútbol. Más no se puede pedir.
Sin descanso
El plantel retomó ayer los entrenamientos pensando en el duelo del sábado, desde las 16.05 contra Ferro en Caballito. El grupo trabajará hoy, mañana y pasado por la mañana en el complejo y el viernes, luego del almuerzo, volará a Buenos Aires. Por otro lado, quedó confirmado que por la fecha 12, el “Santo” recibirá a Mitre, el viernes 22, desde las 21.10. Ese juego será televisado.
Copa Argentina
Finalmente, luego de varias idas y vueltas, se confirmó el día, horario y sede del duelo por los 32avos de final de la Copa Argentina. San Martín y Quilmes, jugarán el miércoles 27 de abril desde las 18, en el estadio Carlos Augusto Mercado Luna, de La Rioja. A través de las redes sociales, los hinchas ya comenzaron a diagramar el viaje por lo que se espera una masiva concurrencia “santa”.
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