Por Bruno Farano
25 Abril 2022
LE PUSO EL PECHO A LA SITUACIÓN. Pellerano asumió el paso en falso y entiende que volver a ganar rápido es clave. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ
El inesperado declive futbolístico que el equipo mostró el viernes contra Mitre dejó algunos interrogantes. San Martín tropezó; pero tropezó feo. Es verdad que tuvo un partido para el olvido en lo colectivo y que casi todas sus individualidades estuvieron muy por debajo de su nivel habitual. Pero también es cierto que cuando un equipo tiene un bajón de ese calibre, es una clara señal de alarma.
¿Qué fue lo que pasó? ¿Por qué San Martín se vio tan sorprendido por el plantel “aurinegro”? ¿Cuál fue el verdadero motivo porque el que el “Santo” pasó del cielo al infierno en tan sólo seis días? Esas y otras más preguntas deberán responderse puertas adentro Pablo De Muner y sus pupilos. Encontrar las respuestas rápido es vital porque el tiempo apremia y duelos vitales aparecen en el horizonte.
Quilmes por Copa Argentina y Sachachispas, por la Primera Nacional son juegos que el “Santo” tiene la obligación de ganar. Contra el “Cervecero”, además de jugarse un pasaje a la siguiente ronda de Copa Argentina, tiene la chance de levantarse rápido luego del golpazo. En tanto, en Villa Soldati no puede fallar si es que pretende seguir peleándole mano a mano la cima a Belgrano.
“Este tipo de golpes no suceden sólo en el fútbol; también pasan en la vida cotidiana. Y uno tiene que estar preparado para sobreponerse. Hay momentos en los que venís bien y te pasa algo malo. Ese es el momento en el que tenés que levantarte, sacudirte y seguir”, dice Hernán Pellerano, uno de los líderes que tiene el grupo y el capitán del equipo.
Durante las últimas semanas, San Martín había recibido muchos elogios; no sólo en nuestra provincia sino también a nivel nacional. Luego de las buenas producciones contra Quilmes y Ferro, el nivel del equipo había sido resaltado en múltiples ocasiones. Y esas loas, según la mirada de “Pelle” pudieron haber causado -de manera inconsciente- el paso en falso. “Siempre es difícil jugar un partido después de un rendimiento como el que tuvimos contra Ferro. Pese a que somos un plantel humilde, que no se la cree, los elogios inconscientemente pueden haber jugado en contra porque terminás creyéndote algo que todavía no sos”, explica, alertando a todos de cara a un torneo largo y extenuante. “Cuando venís de hacer un partido tan bueno de visitante, podés pensar que de local vas a ganar tranquilo. Y no es así”.
“Nosotros debemos ser responsables de lo que el equipo hizo en esta oportunidad. Tenemos que corregir muchas cosas para que no vuelvan a ocurrir este tipo de situaciones”, agrega Lucas Diarte, otros de los referentes que salió a poner el pecho.
Cuando el “Santo” perdió en Mar Del Plata contra Alvarado, luego de tener el partido controlado, muchos pensaron que se venía lo peor. Sin embargo, en el partido siguiente el equipo recuperó su mejor versión, volvió a ganar y volvió a acomodarse en las posiciones. Y eso es lo que pretenden hacer nuevamente ahora. “Tenemos que demostrar que la derrota contra Mitre fue un accidente. Para eso hay que volver al nivel que tuvimos en los partidos anteriores y volver a ganar”, avisa Pellerano.
Así, con pocos días de trabajo antes del partido contra Quilmes, además de lo futbolístico, lo mental es otro tema a tratar. Ahí es donde los más experimentados quieren aportar su granito de arena, sabiendo que son ellos los que deben respaldar a los más jóvenes. “Tenemos que ser los responsables de llevar adelante al grupo. Debemos darle a los más chicos un empujoncito para levantarlos. Es una tarea para hacerla en conjunto con el cuerpo técnico; y a eso apuntaremos durante estos días que tenemos por delante”, sentencia el central.
Dejar atrás un paso fallido con una actuación convincente y, sobre todo una victoria que despeje todas las dudas, es el objetivo que tienen todos en Bolívar y Pellegrini. Y en esa faena, la tarea de los más experimentados es fundamental.
RINCÓN "SANTO"
Comienza a definir todo
Hoy por la mañana, en el complejo “Natalio Mirkin”, el plantel seguirá adelante con los entrenamientos. Pablo De Muner (foto) comenzará a darle forma al equipo para el miércoles, teniendo en cuenta que el tiempo apremia.
El viaje a La Rioja
De acuerdo a lo que informaron, la delegación partirá mañana al mediodía, luego del entrenamiento rumbo a La Rioja y armará su búnker en el hotel Avant. Entre hoy y mañana, el cuerpo técnico definirá la lista de convocados para el duelo contra Quilmes.
Venta de entradas
La organización de la Copa Argentina informó que las entradas para los hinchas “santos” se venderán mañana, entre las 10 y las 18 en La Ciudadela. En tanto, el miércoles desde las 14 será en La Rioja (avenida 12 de Octubre y Jorge Newbery). Los precios son: populares $1.500, plateas $3.000 y menor acompañante a popular $1.000.
Buscará acercarse
Desde las 15.35, Instituto de Córdoba visitará en Carlos Casares a Agropecuario con la intención de achicar la diferencia con Belgrano y San Martín, y subirse a la tercera colocación en la tabla. El resto de los partidos de hoy serán: Deportivo Riestra-Villa Dálmine, Gimnasia (M)-Flandria y Defensores de Belgrano-Ferro. Los resultados que se registraron ayer, fueron: Atlético de Rafaela 1-Nueva Chicago 1, Estudiantes (BA) 2-Alvarado 0 y Guillermo Brown 0-Deportivo Maipú 1.
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