Chiquititas y Casi Ángeles fueron tiras que marcaron a distintas generaciones de niños y adolescentes en nuestro país. Las dos fueron creadas por Cris Morena y si bien contaban con actores adultos, todos los créditos se los llevaron los niños y adolescentes que perduran en la memoria de quienes crecieron con la televisión encendida con esta programación.
Entre ellos, estaba Guadalupe Anton, una actriz que rápidamente se ganó el cariño de todos, debido a sus grandes interpretaciones en estas series. En Chiquititas, encarnó la piel de Anita y en Casi Angeles fue Alelí. Sin embargo, su vida tomaría un rumbo distinto al de la actuación.
En una entrevista con Infobae, comentó que sus inicios se debieron a su gran timidez. “Había empezado teatro porque Empecé era muy tímida y retraída. La actuación hizo que pudiera cambiar un poco mi personalidad, volverme muchísimo más extrovertida. Fue un gran cambio para mi vida haberme metido en el mundo de la interpretación. Me sirvió muchísimo desde todos los sentidos”, dijo.
“Sin temor a equivocarme podría decir que fue la etapa más linda de mi vida. El teatro, las giras, la gente que conocí: realmente fue una experiencia única”, aseguró haciendo referencia a aquella etapa en Casi Angeles y Chiquititas.
Asimismo, remarcó que sigue teniendo una estrecha relación con algunos de sus compañeros. “Sigo en contacto con algunos. Como 'Yeyito' (Stéfano de Gregorio), Gastón Dalmau. Con ellos nos mantenemos en contacto”.
También, comentó el por qué no siguió en el rubro: “Creo que no busqué las posibilidades para seguir en el medio. Quizás soy una persona muy sensible, que todo me afecta demasiado… por eso no sé si estaba preparada para seguir. Tal vez el no buscar la chance tuvo que ver con eso: en mi cabeza ya estaba la decisión tomada”.
Aunque, dejó una posibilidad abierta si la convocarán. “Hoy te digo que no me imagino volviendo al ruedo, pero al mismo tiempo también te digo que si se me presentase la oportunidad, lo pensaría. Por el motivo que ya te dije: realmente fui muy feliz haciéndolo. Por esa parte del combo es que creo que me daría la oportunidad”, afirmó.
“Siempre me gustó la Psicología, así que no lo dudé apenas terminé el colegio. Actualmente estoy ejerciendo, es algo que me apasiona”, contó haciendo referencia al presente que está viviendo. “A la mañana acompaño a un niño a la escuela y por la tarde estoy trabajando en un centro de neurodesarrollo. Así que durante la semana estoy todo el día trabajando, no paro. En cuanto a mi vida, el año pasado me mude sola con mi perra, así que salgo de trabajar y me voy al departamento. La verdad es que trabajo un montón y las salidas las dejo para el fin de semana”, agregó.
“En la calle me siguen reconociendo: dicen que no cambié nada y eso me causa risa. Lo peor es que tenía 9 años en ese momento y ahora, 25… Me re divierte que me pidan fotos, aunque a veces me da vergüenza pero porque yo soy una persona tímida. La gente, que en ese momento eran adolescentes, se acerca siempre con toda la buena onda. Ese cariño me gusta”, concluyó.