Por Santiago Re
14 Junio 2022
CARAVANA DE PROTESTA. Una de las últimas marchas que realizaron los cadetes en la plaza Independencia. Allí pidieron medidas de seguridad. LA GACETA / FOTO DE INÉS QUINTEROS ORIO
El Gobierno se hará cargo de la incorporación de GPS en las motocicletas de los repartidores que trabajan en las calles tucumanas. Se trata de una de las medidas que los cadetes solicitaban para combatir la inseguridad y con el fin de recuperar rápidamente los vehículos que les roban.
Mediante decreto, el gobernador interino Osvaldo Jaldo subsidiará con más de $ 5,7 millones la compra de 500 geolocalizadores que la Asociación Sindical de Motociclistas, Mensajeros y Servicios (ASSIM) había solicitado meses atrás por escrito. Hoy, en el Salón Blanco de Casa de Gobierno, se hará la entrega del subsidio.
Si bien los mensajeros reconocen que la iniciativa suma, también entendieron que por sí solo el GPS no será la solución de los problemas que padecen al trabajar en la ciudad.
“Será para todos”
“Para nosotros esto es fruto de la gestión que venimos haciendo desde el año pasado. Reclamábamos que las cosas no podían seguir como venían. Esto es algo inédito, sumaremos elementos de vanguardia para el desarrollo de nuestra actividad”, explicó Hugo Santucho, dirigente de ASSIM. “Sabemos que esto no soluciona la inseguridad. Eso está claro. Pero esto es algo que queríamos y que ya conseguimos”, añadió.
El sindicalista resaltó: “esto no será exclusivo de los afiliados. Es para todos los trabajadores que se empadronen en el programa y eso debe quedar claro”. En ese sentido explicó que el subsidio no implicaría un manejo de los fondos, sino que con ese dinero la Provincia compró 500 dispositivos a la misma agencia que controla los GPS de las patrullas policiales. “Lo que hicimos fue solicitar el subsidio y el PE nos lo otorga”, precisó Santucho.
Requisitos
Santucho señaló que se deberá cumplir con ciertas condiciones para adquirir el GPS. “El cadete que deseé sumarse al programa deberá empadronarse y presentar certificado de buena conducta. No se va a incorporar a nadie que tenga causas penales. El tema del padrón es importante, por un lado se controlará que los motociclistas inscriptos sean repartidores verdaderamente, por otro lado será una forma de que, de a poco, comencemos a blanquear nuestra actividad, que es otra de las cosas que buscamos desde el sindicato”, sostuvo el dirigente. “La idea es que ante un robo se denuncie inmediatamente. El 911 tiene instrucciones de salir siguiendo la señal del dispositivo. Esto no puede quedar solo en que se otorgue un GPS, pero creo que es parte de la solución”, advirtió.
“No fuimos invitados”
“Dudo de que esto sea una solución realmente. Es una forma de seguir naturalizando los robos porque no es algo que sume a la prevención del delito. Sin ir más lejos, esto no resuelve un caso como el que sufrió Guillermo Sahad”, consideró Agustín Lazarte, uno de los voceros de los Cadetes Autoconvocados, quienes en varias oportunidades convocaron marchas frente a Casa de Gobierno para reclamar seguridad. La última fue el 18 de mayo, cuando Sahad falleció en un hospital. Un día antes un delincuente le había disparado para robarle su motocicleta.
Lazarte agregó: “no fuimos invitados por el Gobierno a esta presentación. De todas formas no es lo que reclamamos. Lo que estamos pidiendo es prevención de delitos, la idea que le acercamos al Gobierno es que podemos servir de apoyo logístico e informático en las investigaciones: estamos 18 horas diarias en la calle”. Además, Lazarte informó que cuando se cumpla otro aniversario de la muerte de Sahad volverán a marcjar.
Gonzalo Zamorano, otro vocero de los Autoconvocados, dijo que en diciembre habían presentado un proyecto pidiendo los GPS y que, sin embargo, fueron excluidos del acto que se hará hoy. “Es una medida que servirá para el post delito; no es mala, suma. Por ejemplo, ayudará a encontrar más rápido una moto robada”, valoró.
“El compañero que pueda, que se acerque y solicite el GPS, esa es nuestra visión, pero no me parece correcto que el Gobierno use a un sindicato que no nos representa para otorgar esto”, añadió.
Zamorano comentó que la mayor preocupación sigue vigente: el miedo de salir a trabajar y no volver a casa. Agregó que se organizaron para conseguirle gas pimienta a cada repartidora y que además varios cadetes comenzaron a tomar cursos de defensa personal.
Un viejo reclamo
Por los asaltos y crímenes sufridos, desde el año pasado los cadetes se manifiestan exigiendo varias medidas para trabajar seguros en las calles.
Ante los reclamos, el gobierno destinará $ 5,7 millones para la compra de 500 GPS que se instalarán en las motos de los repartidores.
Cadetes manifestaron que si bien la medida es positiva, la prioridad debe ser mejorar la prevención del delito.
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