Intoxicado con cocaína: Un niño está grave por haber ingerido droga accidentalmente en El Palomar

Tiene un año. Sus padres fueron aprehendidos.

“El angelito estaba pálido cuando su madre salió corriendo pidiendo ayuda. No sabíamos que había pasado y cuando nos enteramos quedamos espantados. Bueno, pero estas cosas pasan aquí como en cualquier otro barrio en el que los jóvenes andan perdidos por la droga”, aseguró Braulia de Fernández, vecina del barrio El Palomar donde se registró un insólito caso. Un pequeño de 1 año se encuentra en grave estado después de haber consumido accidentalmente una dosis de cocaína. Los progenitores quedaron aprehendidos.

Pasada las 13, la madre del niño, de 28 años, se encontraba cocinando cuando observó que su hijo tenía problemas para respirar. Cuando estaba intentando hacerlo reaccionar, descubrió que en el lugar donde estaba el niño había un “papelito”, nombre con el que se conoce la dosis de cocaína. La mujer lo trasladó hasta el hospital de Niños.

La mujer, al llegar al centro asistencial, declaró que su hermano, que padece de problemas de adicción, se había presentado en el domicilio para cortar leña. Estimó, según el parte oficial, que se le pudo haber caído la dosis y que el pequeño se la tragó de manera accidental.

La misma versión le dio a la Policía que, por orden de la Justicia, quedó aprehendida al igual que su pareja. “Se tomó esta medida hasta tanto se haga una requisa exhaustiva en la vivienda donde se desencadenó este lamentable hecho”, aseguró el jefe de la Unidad Regional, Este Fabio Ferreyra. “Para evitar que alguien ingresara a la casa o que los vecinos tomaran represalias por el caso, se ordenó una consigna especial que se mantendrá hasta que el Equipo Científico de Investigación Fiscal haga su trabajo”, finalizó el funcionario policial.

Voceros del hospital señalaron que el pequeño se encuentra en terapia intensiva con pronóstico reservado. También indicaron que no es común que se atiendan este tipo de casos. Normalmente, según explicaron los profesionales, atienden menores de 13 años que están intoxicados o recién nacidos que tienen problemas porque sus madres no dejaron de consumir durante la gestación.

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