Recaudos por la inseguridad en predios de la UNT

La semana pasada, una estudiante de la Facultad de Agronomía y Zootecnia denunció el robo de su moto, que estaba estacionada en el predio universitario de la Ex Quinta Agronómica. Según contó, mientras ella almorzaba en el comedor universitario sintió que arrancaban la moto. Junto a sus compañeros empezaron una persecución para intentar detener al ladrón. Ni ellos ni la guardia de la UNT pudieron lograrlo y el delincuente consiguió huir por la puerta de entrada del Centro Herrera.

Los estudiantes afirman que sólo hay cuatro guardias de seguridad para una gran cantidad de alumnos y que el de los robos no es un tema nuevo. “No sabemos qué hacer” reflexionó, uno de los jóvenes que había perseguido al delincuente. Aunque para las autoridades –que creen que se está cerca de resolver este caso puntual- las “culpas son compartidas” (porque una de las motos estaba sin candado), los estudiantes pidieron que se aclare el caso y que se implemente un control más exhaustivo de quienes ingresan al predio. El secretario general de la Universidad, José Hugo Saab, apuntó que el del martes fue el segundo robo registrado en el año. Dijo que ordenar los espacios es algo que ya estaba en agenda, antes de estos episodios, y por eso se trabaja en un sistema que permita registrar debidamente cada vehículo y a su propietario. “Hoy eso es imposible. No sabemos de quién es cada moto. Ingresan cerca de 3.000 por día”, explicó. Añadió que se van a mejorar las playas de estacionamiento para poner más orden. Mientras tanto, los chicos evitan ciertos horarios y cambian sus hábitos, en especial para no ser víctimas de motoarrebatos.

La seguridad en los predios de la Universidad no debería ser motivo de preocupación de los estudiantes, más allá de los recaudos personales que se toman al desarrollar actividades en sitios públicos. Tiene que ser una preocupación de funcionarios de la institución y de las autoridades de Seguridad. Hace menos de tres meses hubo un pedido al Ministro de Seguridad por parte del Rector, para reforzar la presencia policial en las Facultades del Centro Prebisch, del Herrera y del Manantial -donde, cabe recordar, hace poco hubo un intento de usurpación en el campo de caña-. La UNT anunció la reformulación de una guardia universitaria para mejorar la seguridad en todos sus predios, que abarcan desde las instalaciones de estudio hasta el extenso parque Sierra de San Javier.

También se anticipó que se sumarán nuevas cámaras de seguridad al Centro de Monitoreo (son 30 que ya están licitadas y prontas a poner en actividad) y que junto al Ministerio de Seguridad se busca implementar “corredores seguros” en la zona del parque 9 de Julio, donde funcionan cuatro Facultades. Los incidentes relatados, así como el presunto intento de secuestro de una alumna a la salida de la escuela Sarmiento, son señales de alerta. “Por este caso hemos incorporado más seguridad: se utilizará sólo una puerta para la salida y ahora hay un policía que cuida la entrada”, explicó Saab, a propósito del presunto intento de secuestro. Indicó que se planificó un programa para instruir sobre los recaudos a tener en cuenta ante un caso como ese. “Además de las medidas de reforzar la seguridad, con la Facultad de Psicología comenzamos capacitaciones para los padres y directores, con la intención de llegar luego también a los docentes”, explicó.

La UNT abarca un universo de unas 60.000 personas entre estudiantes, docentes y administrativos, y su actividad es central en nuestra sociedad. Las señales de alerta deben ser atendidas para que se generen respuestas adecuadas, en procura de que las actividades se desarrollen sin riesgos. Esto tendría que ser la normalidad en la vida universitaria.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios