14 Noviembre 2022
Algunos productores de trigo ya prefieren ingresar a los animales a pastar que mover la maquinaria para recoger lo poco que puede ofrecer un lote. Es que los recortes en la estimación de producción de trigo de los últimos meses reflejan la gravedad de la crisis por la que atraviesa el cereal por la sequía y las heladas tardías y la incertidumbre que genera no solamente en el mercado, sino también en el Gobierno que perderá también ingresos al tesoro. Pero el que más padece la situación es el agricultor, ahora acotado para enfrentar la próxima campaña.