El capitán de la selección de Países Bajos, Virgil van Dijk, se muestra cauteloso sobre la amenaza que representa Lionel Messi cuando los neerlandeses se enfrenten a Argentina en los cuartos de final de la Copa del Mundo, pese a que salió victorioso la última vez que se enfrentaron a nivel de clubes.
Van Dijk calificó a Messi como el mejor jugador contra el que había jugado después de que su equipo, Liverpool, remontara una desventaja de tres goles en el partido de ida para vencer al Barcelona en su camino hacia el título en la Liga de Campeones de 2019 y reiteró el elogio en Qatar después de que Países Bajos llegara a cuartos de final.
“Es un honor jugar contra él”, dijo, antes de desviar cualquier comparación individual previo al partido que se disputará en el Lusail Stadium.
“No soy yo contra él, ni Países Bajos contra él; sino Países Bajos contra Argentina”, sentenció. “Nadie puede hacerlo solo, tendremos que idear un buen plan”.
Ese fue ciertamente el caso en el Mundial de 2014 cuando el entrenador Louis van Gaal tuvo que prepararse para la amenaza de Messi en la semifinal en Brasil, cuando terminaron derrotados por penales tras un empate sin goles. Lo que aprendieron, sin embargo, fue que defenderse de Messi es una tarea colectiva.
En ese partido, Messi tuvo más un papel de creador de juego, pero se le asignó un defensa central para que lo marcara, además de que también recibió una atención especial de Daley Blind, quien jugaba en el mediocampo y cortó con éxito gran parte del juego argentino.
Blind es el único sobreviviente en el equipo neerlandés ocho años después, pero ahora juega como lateral izquierdo. Mientras que Messi, de 35 años, tiene un papel diferente en una nueva selección argentina.
Van Dijk sumará sus propias lecciones de 2019, cuando Messi anotó dos goles cuando Barcelona los venció 3-0 en el partido de ida de la semifinal de la Liga de Campeones, aunque el primer gol fue un rebote y el segundo un espectacular tiro libre.
Pero Van Dijk y sus compañeros de equipo terminaron festejando tras ganar 4-0 en Anfield en la vuelta, para después superar al Tottenham Hotspur en la final.
Sin embargo, Messi aún dejó una fuerte impresión en el central neerlandés.
“Lo difícil de él es que cuando estamos atacando, se está relajando en algún rincón o algo así”, recordó Van Dijk. “Hay que estar muy afinado en cuanto a organización defensiva. Siempre lo buscaban para intentar hacérnosla difícil en el contragolpe”.