UNA REVERSIÓN
TURRÓN DE CHOCOLATE CON GALLETAS OREO
Si sos de los que aman comer cosas muuuuy dulces, esta propuesta de dulce navideño te va a encantar. Las galletas tipo oreo son tan ricas que las podés mezclar con un montón de cosas, y en un turrón de chocolate son una bomba. Para prepararlo vas a necesitar 50 gr de manteca, 150 gr de chocolate con leche y 120 gr de chocolate para postres (el tipo fondant) y un paquete de estas galletas. No te preocupes: no vas a necesitar más que 10 minutos de tu tiempo. Primero picá las galletas (de la forma que más te guste: puede ser a mano o con batidor) hasta que queden trozos muy pequeños. Luego, poné la manteca en un bowl (más o menos grande) y derretila; cuando esté muy caliente, le agregás los chocolates hasta que también se derritan. De ser necesario, calentá nuevamente la manteca un minuto más. Cuando esa mezcla esté lista, agregamos de a poco las galletas y volvemos a revolver. Luego, lo ponés en un molde (preferentemente de silicona) y lo dejás enfriar a temperatura ambiente.
EL MÁS VENDIDO
PARA QUE NO PELEES CON LA TÍA POR LA ÚLTIMA PORCIÓN
El turrón, en sus diversas formas, es uno de los dulces más elegidos por los argentinos. Pero, hay uno, en especial, que históricamente le “pelea” a todos juntos. El turrón de maní (tipo Mantecol) es un clásico en las mesas navideñas y es muy sencillo de preparar. Para una tableta necesitás 200 gramos de manteca de maní, 10 cucharadas de azúcar, 2 cucharadas de agua y una cucharadita de jugo de limón. Para hacerlo tenés que poner todos los ingredientes (menos la pasta de maní) en una olla y revolver hasta formar un almíbar. Deberás alcanzar el famoso “punto bolita” (son 135°) Cuando eso esté listo, pasás la mezcla a una batidora o mixer y lo unís con la manteca de maní; necesitás que ambas cosas se integren bien. Una vez integrada la pasta, tenés que llevarla a un molde y corroborar que no hayan grumos o cristales de azúcar; si hay, tendrás que mezclar a mano la preparación. Si no hay, podés pasarlo a un molde. Luego le ponés algo pesado por encima (para que se compacte el turrón) y lo dejás reposar por 24 horas.
UNO CON AVENA
UNA VERSIÓN MÁS ARGENTA
El turrón es una preparación que tiene diversos orígenes y, por ello, también hay miles de recetas diferentes. Una de las más difundidas es la del turrón alemán, que tiene de protagonista la avena. Te ofrecemos una opción un poco más argenta: vas a necesitar 3 tazas de avena, 3 de azúcar, 1 paquete de manteca (de 200 gramos), 1 taza de cacao en polvo, 3 paquetes de galletas de agua y un pote de medio kilo de dulce de leche. En una olla derretí la manteca con el azúcar, y luego agregá la avena, el dulce de leche y el cacao. Cociná toda la preparación por cinco minutos y luego dejala enfriar. Pasás a un molde y ponés una capa de galletas de agua, y otra de la mezcla, y repetís el proceso hasta terminar la mezcla. Luego, lo tenés que llevar a la heladera por seis horas antes de devorarlo.
TURRÓN DURO
UNA DE LAS VERSIONES MÁS TRADICIONALES
En sus orígenes el turrón se hacía con huevo. Conocido como turrón de Alicante o turrón duro, es una de las recetas que más ha dado vueltas por el globo. Para hacerla vas a necesitar al menos encender la hornalla, porque sí vas a tener que cocinar: necesitás una clara de huevo, 200 gramos de almendras crudas, 100 gramos de azúcar, 150 gramos de miel y 50 gramos de azúcar impalpable. Lo primero que vas a hacer es tostar las almendras (no las compres ya tostadas, porque estas traen sal y te van a arruinar toda la preparación). Luego ponés a calentar la miel hasta que esté muy líquida; añadís el azúcar y revolvés hasta que se vuelva un caramelo. Dejás reposando esa preparación y aprovechás para hacer un merengue: vas a tener que batir la clara con el azúcar impalpable. Cuando esté lista, mezclá el merengue con el caramelo. En un bowl volcás las almendras y por encima tirás la preparación de huevo y caramelo; lo dejás enfriar 24 horas y ya podés disfrutarlo.