Por Bruno Farano
23 Marzo 2023
GOLEADOR. Alejandro Melo -con pasado en Atlético- es el máximo artillero de los “sojeros”, con cuatro conquistas. Controlarlo será una de las misiones que aguardan a los “santos” en Carlos Casares. Prensa Club Agropecuario
El volumen de juego que el equipo viene exhibiendo en el arranque del torneo no dejó satisfecho a nadie en La Ciudadela. Números al margen, los dirigentes, Iván Delfino, sus jugadores y los hinchas son conscientes de que para pelear hasta las últimas consecuencias no alcanzará sólo con actitud positiva, con ganas o con algún pasaje de buen fútbol.
Por eso el entrenador plantó bandera y durante esta semana viene trabajando en consecuencia. “Hay que buscar las triangulaciones que nos permitan llegar con más claridad”, fue su pedido. Los jugadores intentarán comenzar a ponerlo en práctica en Carlos Casares, el sábado desde las 15.30 contra Agropecuario.
Justamente, el estadio “Ofelia Rosenzuaig” es un reducto en el que el “santo” nunca pudo imponer su juego. Allí siempre corrió desde atrás, pese a que la “chapa” le permitió sumar puntos importantes. De hecho, no perdió en esa cancha.
La primera vez que San Martín visitó al “sojero” fue el 13 de mayo de 2018, en la semifinal de ida del Reducido de la Primera B Nacional. En aquella oportunidad, el equipo dirigido por Darío Forestello -que terminaría ascendiendo a la Superliga- se trajo un 0 a 0 valiosísimo que le sirvió de cara a la revancha.
El 5 de julio de 2021, por la fecha 15 de la Primera Nacional, el “santo” ganó 1-0 gracias al gol de Lucas Cano. Mientras que el año pasado, el 14 de mayo y también por la fecha 15, igualó 1-1 (Brian Blando había abierto la cuenta para el dueño de casa y Diego Sosa sentenció el resultado).
Esos tres partidos tuvieron un denominador común. Agropecuario fue amo y señor desde el juego. En todos los casos manejó la pelota y los tiempos de partido; aunque careció de peso ofensivo para traducir esa supremacía en la red. Contrariamente, a San Martín siempre le costó imponer su estilo en la “capital nacional del girasol”.
Por eso, Delfino ahora tendrá la difícil tarea de encontrar la mejor versión de su equipo, algo que todos le reclaman, en una cancha complicada en la que Agropecuario suele hacerse muy fuerte.
Justamente, los dirigidos por Gabriel Gómez vienen invictos jugando de locales en esta temporada. Le ganaron a Deportivo Morón (3-1) y a Defensores de Belgrano (2-1) e igualaron con All Boys (1-1).
Pero además llegarán al duelo del sábado ostentando la condición de escoltas (tienen 13 puntos, producto de cuatro victorias, un empate y dos derrotas), a sólo dos unidades del líder Almirante Brown.
Gómez, que en la pasada temporada supo llevar a Independiente Rivadavia hasta la segunda fase del Reducido, intenta imponer su impronta en un Agropecuario que de a poco va transformándose en protagonista de la segunda categoría de nuestro fútbol.
Su idea es clara, precisa y simple: armar equipos pragmáticos, que sepan adaptarse a las diferentes situaciones de juego o de partido para sacar ventajas a partir de ese aspecto.
A Gómez no le tiembla el pulso para cambiar el esquema de acuerdo al rival que tiene en frente. De esa manera, en lo que va de la temporada Agropecuario mutó entre el 4-4-2, el 4-1-4-1, el 4-3-3 y el 5-2-3.
Lo pragmático sobre lo dogmático siempre. Así vive el fútbol su entrenador; por eso el “sojero” no se entretiene tanto con la pelota en los pies. Apuesta al juego directo, a ser vertical, a perforar las defensas rivales por las bandas para asistir a sus hombres de área.
Es junto a Brown uno de los equipos más efectivos de la zona A, con 10 goles en seis partidos; pero tiene un déficit que el “santo” debe aprovechar: recibió nueve goles y sólo pudo mantener la valla invicta dos veces, contra Güemes en el debut y contra Nueva Chicago la fecha pasada (ambos como visitante).
Además, cuenta con mucha experiencia dentro del plantel. ¿Algunos ejemplos? El arquero Francisco Rago; los defensores Rafael Barrios y Diego Mondino; los volantes Damián Lemos y Martín Rivero; y los puntas Alejandro Melo (es el goleador del equipo con cuatro tantos) y Mauricio Asenjo.
Jugando en su tierra, Agropecuario siempre fue un rival difícil para San Martín. “Hay que seguir creciendo. Que la gente confíe porque este plantel da todo por esta camiseta”, sostuvo Francisco Tinaglini quien, como todos en Bolívar y Pellegrini, apuesta a que el “santo” encuentre el juego ideal el sábado y pueda volver a sonreír en esa ciudad de la que nunca se fue derrotado.
¿Quién ingresará por Bravo?
A las 8.45, en el complejo “Natalio Mirkin” comenzará la última práctica del plantel antes de viajar mañana rumbo a Buenos Aires. El DT debe definir quién reemplazará a Federico Bravo (será baja por haber llegado al límite de tarjetas amarillas). Tampoco estará Gervasio Núñez, ya que no se recuperó de un esguince de tobillo. Como contrapartida, el entrenador podrá contar con Franco Miritello, quien ya cumplió la fecha de suspensión.
Lo más popular
